La estancia en Roma permitirá a Pordenone ponerse en contacto con las obras de Miguel Angel y Rafael, interesándose también por Durero a través de las estampas. Estas influencias serán las que se encuentran presentes en esta "Sacra Conversazione" presidida por la Virgen María con el Niño, situados en un elevado pedestal. La simétrica composición recuerda a Durero mientras que la monumentalidad de las figuras -especialmente San Juan bautista y San Pedro- están tomadas de Miguel Angel. De Rafael encontramos la delicadeza de los rostros y las tonalidades empleadas.La escena se desarrolla ante una amplia arquitectura de inspiración clásica, creando el efecto de perspectiva gracias a la disposición de las figuras en el espacio, en planos paralelos que se alejan en profundidad. Para romper con la monumentalidad del pedestal, Pordenone coloca a los pies de la Virgen una muchacha tocando el laúd, con lo que acentúa la teatralidad de la escena, siguiendo las pautas del Manierismo.
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Tal y como ocurre en la tabla del Descanso en la huida Egipto, Baldung Grien convierte una escena de tema sagrado en algo amable donde la atención a los sentimientos es la nota común en sus obras hasta la adhesión del pintor a la Reforma, que hará que su estilo se haga más duro y severo.
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Es una de las obras más famosas de Van Eyck por lo impactante de la imagen. Se considera que la realizó hacia 1425. Lo que más impresionó es la combinación de la figura femenina de la Virgen con la arquitectura gótica de la iglesia donde está encerrada. La desproporción es evidente: la cabeza de la Virgen alcanza a la galería del triforio, en el arranque de las bóvedas. Se trata de identificar la efigie monumental de María con la bellísima arquitectura gótica. Esta identificación se basa en que María es el templo que albergó a Dios cuando se hizo hombre, y en muchas pinturas de Van Eyck, María sustituye al altar en las iglesias. La arquitectura de la iglesia está completamente llena de alusiones a María: el trascoro, al fondo, está adornado con relieves sobre la vida de María, como la Anunciación, la Virgen con el Niño, etc. Esta imagen se suele ofrecer como contraposición a la pintura renacentista de la misma época, en la que priman la proporción y la perspectiva. Aquí, en cambio, la perspectiva de la arquitectura es correcta aunque se transforma la realidad para obedecer al propósito de identificar a María con Iglesia. La posición de la Virgen, mirando hacia la derecha del marco, ha hecho pensar que la tabla formaba parte de un díptico, y que en el otro lado se encontraría el donante o cliente que encargó la obra.
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Hasta el presente se considera esta obra como la más temprana que conocemos de Murillo. Procede del convento de los Padres Dominicos de Santo Tomás en Sevilla y en su composición y técnica el pintor se presenta heredero de maestros de generaciones anteriores. Murillo todavía no ha creado un estilo personal y por eso en el dibujo muestra evidentes influencias de su maestro, Juan del Castillo, especialmente en los rasgos delicados y finos con los que describe los rostros y las sonrisas insinuadas. En el rompimiento de Gloria que aparece en la zona superior -formado por ángeles mancebos que tocan música y cantan mientras que angelitos arrojan flores a santo Domingo- se constata la influencia de Juan de Roelas. Los ropajes que cubren a los personajes estarían inspirados en Zurbarán, sobre todo el modelado recio de los pliegues. Quizá por esta amalgama de influencias, algunos especialistas consideran, injustificadamente, que no se trata de una obra salida de los pinceles de Murillo.
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Cuando Tiziano entró en contacto con la pintura de Giorgione se dejó fascinar por ella desde el primer momento. Sin embargo, en los trabajos realizados en los primeros años de la década de 1510 se pone claramente de manifiesto la todavía vinculación con el estilo aprendido con su maestro, Giovanni Bellini. La composición deriva de éste al cortar a la Virgen por la cintura, colocar una cortina al fondo y abrir el paisaje en la zona de la izquierda de la composición. Una buena muestra de su dependencia de los modelos quattrocentistas será la minuciosa descripción de los detalles -las elegantes ropas de María o la delicadeza de la cortina del fondo-. Las tonalidades empleadas y el óvalo del rostro de la Virgen se interpretan como elementos inspirados en el maestro de Castellfranco. En la iluminación y los tonos utilizados se aprecia la evolución del estilo de Tiziano quien convertirá la luz y el color en los baluartes de su pintura. El antecuerpo utilizado para colocar al Niño se repetirá en algunos retratos como la Schiavona o el Ariosto.
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Los protestantes habían manifestado dudas acerca de la figura de María como intercesora de la Humanidad por lo que el catolicismo enarbolará el estandarte mariano, siendo la protagonista de un importante número de lienzos encabezados por las Inmaculadas que realizarán Murillo, Antolínez o Pacheco. La Virgen que nos presenta El Greco enlaza con el tema de la Pasión de Cristo; viste túnica roja (símbolo de martirio), con manto azulado (simbolizando la eternidad) y toca blanca (de pureza) que recorta su busto ante un fondo neutro con un halo de luminosidad anaranjada. Su rostro aniñado esboza una ligera sonrisa que indicaría la alegría por la Salvación. El estilo de Doménikos es minucioso y muestra una importancia poco habitual del dibujo sin renunciar al color y la luz.
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En el panel superior derecho del Políptico de la Resurrección de Brescia se halla la Virgen María que forma parte de una Anunciación con el Arcángel San Gabriel. La figura tiene cierta similitud con los retratos femeninos de la década de 1510, destacando el gesto de la mano derecha que se lleva al pecho, en actitud de aceptar la concepción del Niño Jesús. Una intensa iluminación baña la figura y resalta los brillos de las telas, creando un acentuado contraste con el fondo neutro y oscuro. La perspectiva de "soto in sù" empleada refuerza la belleza de la Virgen, resultando una de las imágenes más acertadas del conjunto.
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Esta hermosa Virgen María es una de las obras más reputadas de sus autores, los hermanos Van Eyck. La parte donde se sitúa, el registro superior del Políptico de Gante, se supone que fue trazada en su mayor parte por Hubert, y que Jan simplemente daría algunos retoques a la muerte de su hermano. Pero posteriores restauraciones han intervenido también sobre la figura, transformando el azul verdoso del manto original en un azul luminoso y compacto, y eliminado el craquelado del barniz en un erróneo entendimiento del estado de conservación de la obra. La Virgen es un auténtico modelo de hermosura, con la corona alternando pedrería con lirios y rosas que aluden a su pureza. Tras ella, el arco recoge versos del Magnificat que alaban su belleza sin fin. María lee un libro que parece una joya, encuadernado en seda verde con borlas doradas en las esquinas. La lectura era una de las actividades más frecuentes en las que aparecía enfrascada María, ocupación completamente aristocrática, hasta que en el Barroco se la presente como un modelo de la vida cotidiana y se ocupe de labores de costura y similares.
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Los lienzos que representan a los personajes divinos durante su infancia se hicieron muy populares entre los clientes particulares de la segunda mitad del siglo XVII. Eran visiones muy sentimentales y cercanas a la devoción fervorosa de quienes los encargaban. Esta Virgencita aparece como una niña en su casa, conforme a las visiones milagrosas de beatos y místicos de la época. Está leyendo cuando el sueño la ha sorprendido y por la expresión arrebatada de su rostro resulta fácil deducir que sueña con los ángeles. La niña viste un alegre vestido rojo que significa Amor y Realeza, puesto que ella es la Reina de los Ángeles. Su manto azul indica Esperanza y Fidelidad, y el resto de sus virtudes las encontramos en el jarro con flores. Este detalle resulta un estupendo bodegón de clara intención naturalista. Igual de naturalista resulta el rostro gordezuelo y sonrosado de la niña, en el cual parecen adivinarse los rasgos de la hija del pintor, Manuela, que posó para muchos de los últimos lienzos de su padre.