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Personaje
Arquitecto
Con Charles Van Straeten proyectó en Bruselas el Palacio del Príncipe de Orange, entre 1823 y 1826 -en la actualidad Palacio de la Academia-. En esta obra son evidentes las referencias a Palladio.
obra
Cuando Gauguin llega a Tahití en 1891 se dedicará a realizar retratos para conseguir dinero rápido. La mujer que contemplamos sería una dama inglesa, casada con un jefe tahitiano, que trabajaba como intérprete. Pagó 200 francos por el retrato, cantidad que el artista no consideró suficiente. La figura de Suzanne aparece en primer plano, recortada sobre un fondo de papel pintado en el que encontramos una flor, sentada en una silla y vestida con un traje estampado. La planitud de la figura y la edad de la modelo recuerdan a La bella Angela, aunque en este caso sea el colorido empleado algo más oscuro, animado por las florecillas del vestido. La influencia de la estampa japonesa y el primitivismo que rodea la imagen son dos cuestiones básicas en la pintura de Gauguin en estos momentos.
obra
Un amplio grupo de pintores impresionistas -con Renoir y Cèzanne a la cabeza- empezaban a criticar la pérdida de forma y volumen que se estaba produciendo en algunas obras de Monet, especialmente las marinas realizadas en Etrerat y Belle-Ile. Para evitar críticas realizó una serie de trabajos protagonizados por las hijas de Alice Hoschede, la mujer con la que compartió el pintor su vida desde la muerte de Camille. En esta ocasión se nos presenta a Suzanne leyendo y Blanche pintando, recuperando así el interés por la figura que parecía haber perdido en trabajos anteriores. A pesar de las figuras, el maestro no abandona su estilo impresionista, interesándose por efectos de luz y creando sensaciones atmosféricas que diluyen contornos y suprimen detalles. Las dos jóvenes se sitúan en una zona de sombra, especialmente Blanche, creando sombras coloreadas en sus blancos vestidos. Su disposición en diversos planos sirve para crear la perspectiva mientras que los matorrales del fondo tienen una manifiesta planitud, en la que recuerda a las estampas japonesas. La iluminación empleada condiciona los colores, que son aplicados con fuerza y rapidez, especialmente en las zonas de hierba, apreciándose algo de detalle en las dos jóvenes. El resultado es una obra en sintonía con los trabajos de la primera etapa -véase Mujeres en el jardín- aunque la luz y el color tengan una mayor participación, cargando de impresionismo el conjunto.
obra
El contacto entre Manet y los pintores impresionistas se remonta al año en que expuso su Desayuno en la hierba en el Salón de los Rechazados. Pero en el verano de 1874 se refuerza esa relación, realizando Manet una serie de obras muy próximas al estilo de Monet y Renoir - Argenteuil o Pareja en un balandro -. Será Degas, sin embargo, quien restableció el interés por el pastel, abandonado desde el siglo XVIII. Manet empleó esta técnica en algunos retratos, como el que observamos, donde se muestra un momento intimista de la vida burguesa que le pone en contacto con Chardin, retomando así la tradición de la pintura clásica que tanto interesaba al artista. El contraste entre las tonalidades azules y naranjas resalta la cercanía con los autores del último Barroco.
obra
Suzanne Valadon es el apodo utilizado por Marie-Clementine Valade, hija de madre soltera nacida en Bourg de Bessines (Limoges) en 1867. Su madre se trasladó a París donde la niña creció sola y desamparada en el barrio de Montmartre, dedicándose a la lavandería y al mundo del circo, debutando como trapecista, teniendo que abandonar debido a una caída. Se dedicó entonces a posar como modelo, recogiendo su bello rostro artistas como Renoir, Zandomeneghi o Lautrec, quedando embarazada a los 18 años, naciendo el también pintor Maurice Utrillo. Suzanne intentó que Lautrec se casara con ella, amenazándole con el suicidio si renunciaba al matrimonio lo que provocó que Henri la abandonara, respondiendo la joven con un verdadero intento de suicidio en 1888 aunque su vida continuó hasta 1938, dedicándose esporádicamente a la pintura. La figura de la modelo se ubica al aire libre, existiendo relación con los retratos de Degas, el pintor impresionista al que más admiró Henri, centrando su atención en el rostro absolutamente expresivo, transmitiendo su soledad y su angustia. La composición se organiza a través de un entramado de líneas y trazos aparentemente sin sentido, quizá para no desviar nuestra atención. Las sombras malvas características del Impresionismo están presentes en este trabajo que separa las primeras obras de París del periodo maduro donde Lautrec trabaja de manera independiente, elaborando un estilo propio.