Tras casi cinco años de compromiso, debido a la negativa de la familia de la novia, María Bicknell y Constable se casaron el 2 de octubre en la iglesia de San Martín, oficiando la ceremonia el reverendo John Fisher, buen amigo del pintor. Fisher invitó a los recién casados a pasar la luna de miel en Osmington, junto a Weymounth, donde él residía en compañía de su esposa ya que él se había casado también hacía poco tiempo. Durante esta estancia Constable pintó numerosos estudios de la costa de Dorset, entre ellos varias vistas de la bahía de Weymounth. Los especialistas no se ponen de acuerdo si la obra que contemplamos sería un boceto tomado al aire libre o una obra definitiva realizada a partir de esos bocetos. Su frescura hace pensar más bien en la primera opción, habiendo dispuesto el pintor su caballete al oeste de Redcliff Point, frente al monte Jordan y el acantilado de Furzy. No cabe duda de que lo mejor de esta imagen es el cielo, con esas nubes de diferentes tonalidades que presentan una maravillosa sensación de movimiento y que bien merecen las palabras de Fuseli, uno de los miembros de la Royal Academy al afirmar que "echaba de menos un paraguas cuando se colocaba ante un chaparrón de Constable". El efecto lumínico y la sensación de calma y placidez que consigue el maestro son también dignos de resaltar, creando una obra cargada de naturalismo que será de inevitable referencia para la escuela de Barbizon y el impresionismo.
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lugar
Ciudad iraquí de aproximadamente 60.000 habitantes, situada al norte del país, a unos 210 km de la capital. Es un importante centro industrial gracias a su refinería de petróleo, la más grande del país. La ciudad cuenta con un importante núcleo de población kurda, muy castigada durante el proceso de 'arabización' del norte del país llevado a cabo bajo la dictadura de Saddam Hussein. La ciudad fue bombardeada durante la Guerra del Golfo, en 1991, siendo destruidas el 80% de las refinerías petrolíferas de la zona. A pesar de ser reconstruidas, el embargo de Naciones Unidas ha provocado una enorme carencia de piezas, encontrándose actualmente en estado de deterioro. Durante la invasión estadounidense del año 2003, Baiji fue tomada rápidamente gracias al apoyo kurdo. Actualmente la ciudad vive bajo la espiral de violencia en que se encuentra sumido el país, con ataques terroristas casi a diario.
obra
En los años 1910 y 1911 Nolde se sintió atraído, como el resto de los expresionistas de El Puente, por la vida urbana. Pintó escenas de cabaret, de café y de teatro: "Dibujaba una y otra vez la luz de las salas, el brillo superficial, las gentes, buenas o malas, completamente o semiarruinadas. Dibujaba ese otro lado de la vida con su maquillaje, su suciedad brillante y su corrupción". Sus Bailarinas con velas, resueltas en rojos violentos, transmiten una sensación de vitalidad primitiva y salvaje. Pero sólo en el mundo verdaderamente primitivo podían quedar rastros de pureza y en su busca se fue, en 1914, a los mares del Sur.
obra
Cansados de los continuos rechazos en el Salón de París, el organismo académico oficial, los jóvenes impresionistas decidieron constituir una Sociedad Anónima de Artistas para organizar su propia exposición. La primera muestra del grupo -en la que participaron Cézanne, Monet, Morisot, Degas y Renoir entre otros- se celebró entre el 15 de abril y el 15 de mayo de 1874 en los locales cedidos por el fotógrafo Nadar, en el boulevard des Capucines. Renoir participó con seis lienzos y un pastel, siendo esta Bailarina que contemplamos una de las obras participantes. Los críticos se cebaron con ella y Louis Leroy -el responsable del nombre del grupo al mencionarlos de manera peyorativa como "impresionistas"- en la revista "Chirivari" se hizo eco de un comentario de Joseph Vicent: "Lástima que el pintor, en posesión de cierto conocimiento del color, no dibuje mejor; las piernas de su bailarina son tan frágiles como el tul del faldellín".La bailarina enlaza con los trabajos de Degas, interesándose Renoir por la atmósfera que rodea a la joven más que por los detalles del vestido. La ubicación en el espacio recuerda al Pífano de Manet, que se inspira en obras de Velázquez, uno de los pintores más admirados entre los jóvenes pintores. No es cierta la crítica al referirse al débil dibujo sino que nos encontramos ante una figura modelada con cierto aire clasicista. Las tonalidades claras dominan el conjunto, aplicadas de manera rápida en relación con el estilo de sus compañeros.
obra
Entre los pintores impresionistas el más admirado por Toulouse-Lautrec, sin duda, será Degas cuya influencia se pone claramente de manifiesto en este lienzo que contemplamos, uno de los escasos dedicados por Henri a las bailarinas clásicas, más interesado en el mundo del cabaret. La figura se sitúa en solitario en el escenario, haciendo uno de sus pasos, mostrándose la tramoya tras ella. Las luces artificiales serán una interesante preocupación para el pintor como observamos en la distribución de las sombras; pero lo más significativo lo encontramos en el empleo de poderosas líneas que organizan la composición, reaccionando contra la pérdida de la forma a la que estaba abocado el Impresionismo, resaltando el volumen de la bailarina. El color pasa a un segundo plano, aplicado de manera contundente, formando tonalidades y líneas un tándem perfecto.
obra
En los momentos iniciales de la época ramésida la pintura egipcia parece convertirse en un arte autónomo, especialmente en los fragmentos de caliza como el que aquí contemplamos, procedente del poblado de Deir el-Medineh. En esta imagen observamos como el trazo y el color buscan cierta independencia respecto al marco. La bella y sensual bailarina ha sido recogida en el momento de la acrobacia con total naturalidad, abandonando las estructuras características de la ley de la frontalidad.
obra
En este bello dibujo, Degas se muestra en deuda con Ingres, cuyos dibujos admiraba. La postura forzada de la bailarina se complementa con su compañera, la Bailarina rascándose la espalda.