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Hacia 1330 el escultor Andrea Pisano será el encargado de hacer una puerta con relieves de bronce para la fachada sur del Baptisterio de Florencia. Consta de veintiocho relieves enmarcados en cuadrifolios en los que se alude a episodios de la vida de San Juan Bautista junto a imágenes de profetas. En el invierno de 1400-1401 el Arte dei Mercante di Calimala, gremio que reunía a los grandes comerciantes de la ciudad y al que correspondía el embellecimiento del edificio, consideró que se debía sustituir una de las dos puertas de madera que quedaban por una nueva de bronce. Acordaron convocar un concurso público para que el artista más capaz de la ciudad fuera el encargado de la realización de la obra. Se eligió como temática el sacrificio de Isaac y se especificó que la forma del marco debía ser tetralobular. De los siete escultores finalistas, sólo quedan las pruebas realizadas por Filippo Brunelleschi y Lorenzo Ghiberti, resultando este último el vencedor ya que sus figuras se integran de manera acertada en el paisaje, recordando la figura de Isaac a la estatuaria clásica. El 23 de noviembre de 1403 se firmaba el contrato entre la Calimala y Ghiberti para la ejecución de la segunda puerta del Baptisterio, la orientada hacia la catedral. El 19 de abril de 1924 se instalaban las dos hojas de esta puerta. El cliente salió tan satisfecho del resultado que no dudó en realizar un nuevo encargo a Ghiberti, menos de un año después de la entrega, el 2 de enero de 1425. Se trataba de la tercera puerta, la llamada Puerta del Paraíso, para la que diseñó diez escenas en formato cuadrangular en las que se representan asuntos del Antiguo Testamento: Adán y Eva; Caín y Abel; Noé; Abraham; Esaú y Jacob; José; Moisés; Josué; David; y Salomón.
Personaje Literato
Escritora perteneciente a la Generación del 36, fue la primera mujer que ocupó un sillón en la Real Academia de la Lengua Española. La mayor parte de su infancia transcurrió en Melilla y a los trece años regresó a su ciudad natal. Entre 1923 y 1928 trabajó en la Oficina de Delineación de la constructora Naval de Cartagena. Después de estudiar Comercio, bachillerato y Magisterio en la Escuela Normal de Albacete, se matriculó en la Facultad de Filosofía de Valencia pero no llegó a terminar la carrera. Colaboró con la Universidad de Murcia y con las Misiones Pedagógicas republicanas, organizando excursiones y una sección cultural de cine educativo. Realizó colaboraciones radiofónicas con Radio Cartagena y escribió artículos para diversos periódicos de su ciudad. En 1927 conoció a Antonio Oliver Belmás, escritor y poeta de la Generación del 27, con el que se casaría en 1931. Durante la Segunda República ambos impulsaron la Universidad Popular de Cartagena; fundaron en 1933 la revista Presencia y dirigieron instituciones locales como el Ateneo y el Conservatorio. En 1929 se publicó en Madrid su primer libro: "Brocal". Una selección de sus composiciones se editó en Bruselas junto a otras de autores de renombre como Juan Ramón Jiménez, Pedro Salinas, Jorge Guillén, Federico García Lorca... Colaboró con diversas publicaciones republicanas y participó en la creación de la revista El Gallo (1934-35), dirigida por Ramón Sijé. En 1936, gracias a una beca, pudo realizar estudios sobre instituciones de cultura popular en Francia y Bélgica. Recibió numerosos premios pero el mayor reconocimiento recibido fue su nombramiento como académica de la Lengua Española, ocupando el sillón "k" en 1978, convirtiéndose en la primera mujer que en ingresar en esta institución. El 28 de enero del 79 pronuncia su discurso de ingreso ante los Reyes de España: Poesía ante el tiempo y la inmortalidad. En 1995 se constituyó el Patronato Carmen Conde - Antonio Oliver cuyo legado cultural es custodiado por el Archivo Municipal de Cartagena (Murcia). El mobiliario y enseres pasaron a constituir el Museo Carmen Conde-Antonio Oliver ubicado en el Centro Cultural Ramón Alonso Luzzy de Cartagena. A partir de 1989 comenzaron a manifestarse síntomas de Alzheimer y fallece en una residencia de Majadahonda (Madrid) el 8 de enero de 1996.
obra
Antoine Apponyi era un noble húngaro que ejercía como embajador de Austria en Roma. En 1826 será trasladado a París con la misma misión. Estaba casado con una de las damas más bellas de Italia y Francia. Thérèse, condesa de Nogarola, había nacido en Verona, la ciudad de Romeo y Julieta. Ambos consituían una de las parejas de moda del imperio napoleónico.
obra
Entre los apoyos más importantes para Toulouse-Lautrec estarán sus tíos Charles y Emilie, protagonistas de sendos carboncillos donde se pone claramente de manifiesto la facilidad del joven pintor para el dibujo, apreciándose un trazo firme y seguro con el que nos ofrece el carácter del personaje, elemento común a la mayoría de los retratos de Toulouse-Lautrec.
Personaje Político
El conde de Aguilar siguió la carrera militar -ascendiendo hasta teniente coronel- y siempre fue fiel a doña Mariana de Austria, regente de su hijo Carlos II tras la muerte de Felipe IV. Fue elegido para la reorganización del Regimiento de la Chamberga y tras la subida al poder por parte de don Juan José de Austria será enviado a Orán y desterrado a Logroño. Cuando muere don Juan José en 1679 la reina madre regresa a Madrid y el conde es recompensado por su fidelidad. Es nombrado consejero de Estado (1695) y presidente del Consejo de Aragón (1698). Desde sus cargos de responsabilidad dio muestras de su carácter violento y siempre apoyó opciones belicistas. En el problema de la sucesión apoyará a la reina madre y defenderá la candidatura de José Fernando de Baviera, apostando siempre por los Habsburgo. A la muerte de Carlos II formó parte de la Junta de Gobierno que actuaría hasta la llegada del nuevo rey, Felipe de Anjou. El monarca borbón no alejó al conde de los puestos de gobierno y le nombrará presidente del Consejo de Indias, permaneciendo en este cargo hasta su muerte.
obra
La relación de Goya con el Banco de San Carlos - embrión del actual Banco de España - se inicia a mediados de la década de 1780. Será el encargado de retratar a personas relacionadas con la institución como el propio Carlos III - su promotor - el Conde de Cabarrús - su fundador - o José de Toro y Zambrano. El Conde de Altamira - de nombre Vicente Isabel Ossorio de Moscoso - era una de las personas más ricas de su época, siendo uno de los primeros directores de la institución. Poseedor de una colección pictórica sólo comparable a la de la Casa Real tenía la desgracia de ser uno de los hombres más bajitos de su tiempo - Lord Holland dijo de él que era el "hombre más pequeño que he visto nunca en sociedad y más chico que alguno de los enanos que se exhiben pagando" -, tara que ha sido remarcada por el artista al emplear una elevada mesa sobre la que el conde se apoya. La menuda figura se sienta en un amplio butacón, recortando los tres elementos sobre un fondo neutro para ampliar el volumen de la escena. Sobre la mesa encontramos una escribanía ejecutada con todo lujo de detalles al igual que los bordados de la ropa del noble. Su rostro nos llama la atención al ser iluminado por un potente foco de luz procedente de la izquierda y resaltarse sobre el fondo. La luz resbala sobre las sedas de las faldas de la mesa, creando un atractivo efecto de plegados. Los vivos colores empleados resaltan aun más la figura de este noble personaje que encargaría varios retratos de sus hijos a Goya, demostrando su satisfacción con el retrato que contemplamos.