Magistrado romano cuya misión era controlar el sistema judicial romano, bien de Roma o sus provincias.
Busqueda de contenidos
Personaje
Pintor
Desde los años treinta hasta comienzos de la década de los sesenta estuvo en Roma en numerosas ocasiones. De su primera etapa son algunas obras como parte de la decoración de San Carlo ai Catinari o el coro de Sant'Andrea della Valle. En Nápoles entra en contacto con la producción de Ribera, y conoce a Lucas Jordán. Es entonces cuando realiza la decoración de San Pietro a Maiella. Poco después se traslada a Roma y allí interviene en el Palacio Doria Pamphili de Valmontone. Desde la década de los años sesenta establece su residencia en Malta, donde es nombrado pintor oficial de la Orden de San Juan de Jerusalén. En la catedral de La Valletta ejecutó la decoración del Oratorio de los Caballeros. Caravaggio, la pintura boloñesa y el estilo de Lanfranco.
Personaje
Pintor
Estudia en la Escuela de Bellas Artes de Ferrara y luego ingresa en la de Brera. En esta última conoce por medio de Bertini la scapigliatura lombarda. En medio de este ambiente muestra su predilección por los asuntos de corte romántico. Su posterior relación con Grubicy determinaría su gusto por recurrir a la técnica divisionista. A finales del XIX ilustra los cuentos de Alan Poe. En esta época se identifica con las tendencias del simbolismo y pinta obras como Maternidad o Novara. La historia es otro de los asuntos que más le atraen. Prueba de ello es la serie que realiza de El Rey Sol. Cuando fallece Segantini se convierte en el divisionista más importante de su época, sin abandonar su gusto por el simbolismo. A esta fase de su trayectoria corresponden obras como: Vía Vía, Tríptico del día o La caída de los ángeles. De su legado literario sobresale su tratado sobre "Principios científicos del divisionismo".
Personaje
Jean Prévost nació en Mons hacia 1465, pero fue en Amberes donde obtuvo su título de maestro, en 1493. Al año siguiente se instala en Brujas, manteniendo el contacto con Quentin Metsys, con el que se había formado. Continua la tradición de la Pintura Flamenca, introduciendo novedades italianas procedentes del Quattrocento. Falleció en Brujas en 1529.
Personaje
Militar
Político
El último rey de Troya fue uno de los hombres más fecundos de la Antigüedad si creemos a Homero. Tuvo 50 hijos de los cuales 19 fueron de su segunda esposa, Hécuba. Héctor y Paris serían los más famosos. Tras la invasión de Troya por los griegos, el anciano Príamo murió en la batalla.
lugar
La capital del barroco cordobés, cuna de personajes ilustres como Niceto Alcalá-Zamora o José Álvarez Cubero, se levanta en una fértil planicie, al pie las Sierras Subbéticas. Tan privilegiado lugar presenta ocupación desde muy antiguo, habiéndose encontrado evidencias de poblamiento durante el Paleolítico Medio, más concretamente del Musteriense. La idoneidad del lugar para la ocupación humana hace que también se asienten en él tanto los pueblos ibéricos como los romanos. Sin embargo, la localidad tendrá que esperar a la época musulmana para experimentar un fuerte desarrollo. Así, la primera referencia escrita sobre la villa la proporciona Ibn Al-Jatib, quien informa de que tropas egipcias que llegaron a la península con Abul-Jattar acabaron por asentarse en el año 746 en Bago, como así era llamado Priego por aquel entonces. Hacia el año 863, la población de Bago o Baguh -pues es varía la grafía que encuentran los estudiosos- es citada como una de las que participa en las campañas del emir Muhammad I, formando entre sus tropas muchos de sus pobladores. Mediado ese mismo siglo, la cora o provincia de Priego tendrá un papel relevante durante el convulso final de la centuria, en el que se suceden disputas y luchas en el seno del emirato cordobés. Así, en 889 Ibn Mastana, quien se nombró a sí mismo señor de Priego y de Luque, eligió la primera localidad como centro de sus operaciones. Ibn Mastana fue uno de los seguidores principales de la revuelta comandad por el muladí Ibn Hafsun. Durante la etapa califal, y después de haber sufrido diversas conquistas y destrucciones, Priego gozó de una cierta prosperidad. Sin embargo, cuando aquél desapareció, la población fue incluida primero en el reino zirí granadino y más tarde dominada por almorávides y almohades, sucesivamente. Aprovechando la debilidad de los musulmanes, la llamada Reconquista cristiana avanza, y Priego ha de ser fuertemente fortificada. A pesar de ello, los cristianos, dirigidos por el rey castellano Fernando III el Santo, logran tomar la villa en el año 1225. Tras la conquista cristiana, Priego es dada en encomienda a la Orden de Calatrava, con el encargo de defenderla de los previsibles intentos musulmanes de reconquista, dada su situación fronteriza. A pesar de ello, todavía volvería la población a manos musulmanas, pasando a pertenecer al reino nazarí de Granada. Poco habría de durar esta situación, pues en 1341 Alfonso XI la conquista de manera definitiva, reparando su muralla y favoreciendo su repoblación mediante la exención de ciertos tributos. A partir de 1370 Priego pasa a formar parte del patrimonio de la Casa de Aguilar, de la mano de su señor Gonzalo Fernández de Córdoba, gracias a una concesión de Enrique II. Don Pedro, su descendiente, será el primer titular del Marquesado de Priego, por nombramiento de los Reyes Católicos en 1502. A partir de entonces comienza una etapa de desarrollo para la villa. Las calles y plazas se adornan con nuevas edificaciones, tanto civiles como religiosas. Así, con construidas la Casa del Cabildo, la cárcel, el Pósito y las Carnicerías Reales. Además se construye la iglesia de San Esteban, hoy de San Francisco, y se vuelve a levantar la ermita de San Nicasio. En el siglo XVII, Priego experimenta en sus carnes la decadencia de la Monarquía hispánica que caracteriza a los Austrias menores. La crisis económica se ve incrementada tras la expulsión de los moriscos, que en número de 3.000 poblaban el barrio de la Puerta Granada. Muestra de la crisis es que los vecinos son obligados a pagar un impuesto, la alcabala, del que hasta entonces estaban exentos. Para evitarlo, entre todos llegan a un acuerdo con al Corona para comprar las alcabalas por la cantidad de 130.000 ducados, trato que rubrica Felipe III y que confirma Felipe IV en 1617. Por si fuera poco, dos epidemias de peste merman la población en 1650 y 1680. El siglo XVIII es una etapa de relativo bienestar económico, gracias especialmente a la industria de la seda. La centuria había comenzado con la participación de la villa en la Guerra de Sucesión y en la defensa de Gibraltar y, en 1711, había pasado a depender de la casa de Medinaceli. La pujante industria textil permitió en las primeras décadas del siglo decorar a sus iglesias y ermitas con obras y elementos del más puro estilo barroco, hasta el punto que la localidad se convirtió, desde el punto de vista artístico, en una villa con un barroco único, dada su originalidad. Yesos y maderas policromadas adornan ahora iglesias y palacios de nueva creación, trabajando en Priego autores como Hurtado Izquierdo, Pedrajas o Santaella. El virtuosismo del barroco cordobés alcanza entonces un punto culminante, sin parangón en la escena artística europea. Sin embargo, poco habrá de durar la bonanza económica. Las elevadas tasas, el descenso de la producción de seda y la competencia de tejidos como el algodón acaban por instalar la tan temida crisis. La situación se prolonga durante la centuria siguiente, el XIX, en la que se produce la desaparición de los gremios y se agrava debido a la convulsa situación política, con acontecimientos como la invasión napoleónica y las luchas entre liberales y conservadores. No obstante, a finales del siglo la población ha experimentado cierta recuperación, habiendo crecido el número de vecinos y la producción agrícola. Así las cosas, Alfonso XII le otorga el título de ciudad, lo que da fe de la importancia alcanzada. En las primeras décadas del siglo XX Priego llega a los 17.000 habitantes y empieza a aparecer en ella un cierto desarrollo industrial ligado, cómo no, al sector textil. Actualmente la localidad cuenta una pujante economía, basada en la agricultura, la industria y el turismo, industria esta última que se apoya en su impresionante patrimonio monumental.
video
En medio de un circo montañoso que sombrea su huerta, Priego se alza como capital del barroco cordobés, lo que justifica por sí solo la visita. Numerosos hallazgos prehistóricos, ibéricos y romanos dan fe de la antigüedad del lugar. Con el tiempo, desempeñará un importante papel en la historia andalusí, hasta que Fernando III se apodera de ella en 1225. Priego fue uno de los principales centros de producción de seda, lo que fomentó el desarrollo artístico en la villa para convertirse en la capital del barroco cordobés. Los hitos monumentales del Sagrario de la Asunción, la Aurora y la Fuente del Rey la convierten en parada obligada para los amantes del arte. Además, es cuna de personajes ilustres como Niceto Alcalá-Zamora, presidente de la II República española, o el escultor José Alvarez Cubero.
Personaje
Militar
Intervino durante los primeros años de la Segunda Guerra Mundial como comandante de la U-Boot. Por iniciativa de Doenitz se lanzó al asalto de la base de la Royal Navy británica en Scapa Flow (Escocia). Prien culminó esta operación, que se saldó con el hundimiento de buque "Royal Oak" y la muerte de más de ochocientos hombres, con gran éxito. Su actuación en esta misión elevó sus cotas de popularidad. En marzo de 1941 el U-47 era alcanzado y se hundía con Prien a bordo.