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monumento
El puente que se levanta sobre el río Aragón da nombre a esta población oscense, que se correspondía con la estación de Osturit -nombre que recibía Puente la Reina de Jaca en la guía del Liber Sancti Iacobi-. Aunque, se desconoce la época a la que pertenece, no hay que olvidar que el camino de Santiago impulsó la proliferación de obras civiles destinadas a facilitar el tránsito al peregrino.
monumento
El río Arga a su paso por Burlada es salvado por un puente construido en época medieval, constituido por seis arcos de medio punto. Se trata de un puente de longitud considerable, unos 80 metros, que salva con creces la anchura del río en este punto. A lo largo del tiempo ha sufrido diversas modificaciones en su estructura primitiva, considerándose que la forma original era más apuntada. Cada uno de los seis arcos tiene una longitud de nueve metros, sostenidos en la zona de aguas arriba por tajamares de diferentes formas.
monumento
El intenso tráfico de peregrinos que circulaba en época medieval por el Camino de Santiago, tanto a pie como a caballo, impulsó la construcción de puentes y numerosas mejoras en las calzadas. La tradición nos cuenta que dos constructores de puentes, como son santo Domingo de la Calzada y san Juan de Ortega, dedicaron buena parte de su vida a mantener la Ruta en las mejores condiciones que permitía la época. No en balde, hoy día es santo Domingo de la Calzada el patrón de los Ingenieros de Caminos.
monumento
Cuando el peregrino abandona la población leonesa de Mansilla de las Mulas en encuentra con el puente de origen medieval que atraviesa el río Esla. Esta construcción, desde la que puede admirarse el recinto amurallado que acota la villa, consta de ocho bóvedas de distintos siglos. Siguiendo el Camino en esta dirección, Villamoros de Mansilla es el próximo punto con que se encuentra el penitente.
obra
Monet no hace una síntesis de las sensaciones apreciadas, con el fin de darnos una mañana que sea la de todas las mañanas o una tarde que sea la de todas las tardes. Su ojo preciso va a las nubes, capta los fenómenos más delicados y más fugitivos. Podríamos considerarle como un pintor de detalles, un colorista de la hora. Para él, cada minuto tiene sus tonos, cada mes sus colores y cada estación su luz. Pero también, en sus cuadros esa sensación de instantáneos está en relación con la fotografía, apartado que al que siempre dedicó una especial atención. A pesar de todo y a pesar de lo mucho que se ha escrito de su obra, el efecto final de cada una de sus composiciones contiene un capricho de su propia inspiración, existe siempre un punto donde el pintor se muestra todo entero, una señal donde Claude Monet se revela a través de su propia visión, ese punto es la mancha.
obra
Cézanne se sentía especialmente atraído por la naturaleza que le rodeaba y no se cansaba de observarla y escudriñar hasta su último detalle. Fruto de este afán observador, el maestro no duda en trabajar sobre el mismo motivo durante largas temporadas, pudiendo tardar en concluir un cuadro hasta dos o tres años. "A veces se necesita mucho tiempo para concebir y preparar el modelo" dijo en una ocasión el maestro. Por eso, él no se interesa por captar el momento fugaz, el instante lumínico que tanto atraía a su buen amigo Monet. Cézanne se preocupa por la forma y el volumen, intentando alcanzarlos a través del color. "La forma alcanza sólo su plenitud cuando el color posee mayor riqueza" será una de sus máximas como bien podemos apreciar en este delicado trabajo en el que las tonalidades verdes y azules se adueñan de la composición, aplicadas con manchas uniformes de una transparencia cercana a la acuarela. Como si de un mosaico se tratara, estos toques de color van configurando la estructura interna del lienzo y van aportando las formas y los volúmenes al conjunto, anticipando así el cubismo.
monumento
A las afueras de Castrojeriz, para salvar el río Odra, la primitiva calzada romana contaba con un puente, que fue sustituido en época medieval por uno más moderno. Este puente forma parte de la Ruta Jacobea que conduce a los peregrinos hacia Itero del Castillo e Itero de la Vega, tras subir la fuerte pendiente del Alto de Mostelares.