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obra
Es la otra cara del bullicio del bulevar impresionista, la otra cara de la ciudad moderna. La muchedumbre (amenazante en los primeros planos) y la diagonal cortante que nos conduce hacia lo que no podemos ver, el procedimiento compositivo -agrupamientos y vacío contrastados- nos hablan del hombre entre la multitud como hombre solo en la ciudad inhóspita. Imágenes reales que se aprecian en las perspectivas de algunas de las fotografías de la época. Munch anticipa parte de la estética expresionista de principios de siglo donde los fragmentos de la realidad se captan desde momentos de esa realidad vivida por el sujeto que cuestiona la armonía entre hombre y mundo.
Personaje Científico
En 1904 fue nombrado director de estadística criminal por el Ministerio de justicia francés. Posteriormente, enseño filosofía en el Collège de Francia. Sus primeros ensayos son una crítica a los postulados de otro criminólogo, Cesare Lombroso, defendiendo que la criminalidad obedece a causas de índole social. Por ello, frente al castigo propone la prevención, fundamentalmente educativa, y el trabajo como medio de reinserción. Su teoría sociológica parte de la psicología social, formulando que el conocimiento histórico y social es un proceso en el que intervienen la invención, la repetición, el conflicto y la adaptación. Sus teorías aparecen formuladas en su obra "Logique social", publicada en 1894.
termino
acepcion
Término hebreo. Traducción glosada y parafraseada de la Biblia hebrea al arameo.
fuente
Embarcación usada por los musulmanes para pasar el Estrecho en torno al siglo XIII.
lugar
Los orígenes de Tarifa se remontan al Paleolítico, existiendo varios yacimientos arqueológicos en los que se han hallado huellas de presencia humana, entre ellas algunas pinturas rupestres. También han quedado importantes restos de la Edad de los Metales. El más significativo es la necrópolis de los Algarbes, singular yacimiento donde se mezclan cistas y dólmenes. El siguiente vuelco en la historia de Tarifa, ya en el siglo III a.C., viene determinado por la llegada de los pueblos colonizadores: fenicios y cartagineses, fundándose los primeros enclaves urbanos. La derrota cartaginesa en la Segunda Guerra Púnica dejará la Península Ibérica en manos de Roma. La importancia de Baelo-Claudia será fundamental en el tránsito del Estrecho. Junto a la existencia de una gran complejo fabril para la elaboración de conservas de pescado, la ciudad contaba con grandes edificios públicos. Otro enclave importante fue Mellaria o Melaria, situada por la mayoría de los investigadores en la desembocadura del río del Valle. Se trata de una ciudad factoría dedicada a la elaboración de conservas y salazones de pescado. Más difícil es situar otros enclaves de población romana llamados unas veces Iulia Ioza, en otras Iulia Transducta y por último Tingentera. Durante las invasiones bárbaras del siglo V a esta zona llegaron los pueblos vándalos, que se dirigían al norte de África. La Punta de Tarifa, a partir de entonces, fue conocida como "Portus Vandalorum". En la centuria siguiente serán los bizantinos quienes ocupen este territorio. El dominio bizantino fue efímero; al final, los monarcas visigodos de Toledo recuperaron los territorios del Estrecho. En el año 710 un pequeño contingente musulmán, dirigido por un tal Tarif ben Malik, desembarcó en un punto de la costa hispánica, que a partir de entonces y en honor del hecho paso a denominarse Al-Yazirat Tarif, la isla de Tarif. Las tropas de Tarif construyeron en el lugar del desembarco un recinto fortificado para protegerse, que sería el origen de la ciudad musulmana. Tras la caída del Califato, la ciudad cayo en manos de la taifa de Algeciras, para posteriormente integrarse en el reino de Sevilla. En el año 1090 se incorpora al imperio almorávide y posteriormente al almohade, desde 1145. Ambos imperios beréberes dejarán su impronta en la ciudad y sobre todo en su fortaleza. En el verano de 1292 se presentaron ante los muros de Tarifa las tropas de una poderosa coalición de tropas que trataban de conquistarla, entre las que destacaban las castellanas al mando de su rey Sancho IV el Bravo. Tras algunos meses de asedio, el 21 de septiembre la ciudad era ocupada. El rey dotaba a la villa de una Carta Puebla para su repoblación. En la primavera de 1294 granadinos y norteafricanos pusieron sitio a la ciudad, que resistió de forma heroica. En este contexto se produce el famoso episodio de Alonso Pérez de Guzmán, Guzmán el Bueno, quien no dudó en entregar su propio puñal para que los sitiadores matarán a su hijo, que había sido previamente capturado. Sucesivos sitios por parte de tropas granadinas y norteafricanas conducirán a diversos enfrentamientos, entre los que destaca la batalla del Salado (1340). Será en la Edad Moderna cuando Tarifa se consolide, expandiéndose fuera del recinto murado. Igualmente es en este periodo histórico cuando la ciudad se dota de algunos de sus más característicos edificios monumentales. Podemos afirmar que el XVI fue un siglo de grandes avances y acontecimientos políticos, el XVII es un siglo de crisis y el siglo XVIII vuelve a ser una centuria de extraordinarios avances. En la Guerra de la Independencia, Tarifa se convirtió en base de las tropas anglo-hispanas. Su papel en el resto de episodios políticos que se viven en el siglo XIX será destacado. En esta centuria, a pesar de que el crecimiento demográfico fue sostenido, la población siguió sufriendo las consecuencias sangrantes de las grandes epidemias, frente a las oleadas de peste, ahora toman su mortal relevo la fiebre amarilla y el cólera. Tarifa pronto fue ocupada por las tropas del general Franco, durante la Guerra Civil. La población entró en una etapa de decaimiento económico y social en la Posguerra que obligará a la emigración a buen número de tarifeños desde fines de los cincuenta. La llegada de la Democracia ha permitido salir a la población de la atonía política, impulsando su desarrollo.
Personaje Militar
Tariq ben Ziya era el lugarteniente del gobernador de Ifriquiya, Musa ben Nusayr, y recibió de éste la orden de invadir la Península Ibérica. Unos 7.000 hombres fueron transportados en los barcos que había dispuesto don Julián, señor de Ceuta y partidario de Agila II en la guerra civil que enfrentaba a éste con el rey visigodo Rodrigo. Una vez cruzado el estrecho llegaron a Gibraltar -corrupción lingüística de Yabal Tariq, la montaña de Tariq- y establecieron su base en Algeciras. Conocedor don Rodrigo de la invasión, abandonó su lucha contra los vascones y dirigió sus fuerzas hacia el sur. Tariq solicitó refuerzos y recibió el apoyo de 5.000 beréberes. Los dos ejércitos se encontraron en el Wadi Lakka, lugar identificado con el río Guadalete o el Barbate, en el mes de julio de 711. Tariq salió vencedor del encuentro y se dirigió a Córdoba, derrotando a un grupo de visigodos aislados en Ecija. Sus triunfos le permitieron llegar hasta Toledo donde tomó la ciudad. El invierno lo pasó en Guadalajara. La verdadera ocupación se producirá con la llegada de Musa al frente de 18.000 soldados en el verano de 712, encontrándose con Tariq en Toledo, donde el cliente supuestamente recibió castigo de su señor por haber excedido sus atribuciones. Desde ese momento actuaron de manera conjunta y se dirigieron a Zaragoza que será tomada (714). Tariq sometió a Fortún, noble aragonés que convertido al Islam fundó la familia de los Banu Qasi. Tras haber alcanzado León y Astorga se dirigió a Sevilla para encontrarse con su señor y ambos poner rumbo a Damasco para rendir cuentas al califa, dejando como gobernador a Abd al-Aziz. En la capital omeya no fueron bien recibidos y Tariq fallecerá olvidado, envuelto en cierto halo legendario.