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monumento
Cuando Mehmet II conquistó Estambul en 1453 se hizo construir un palacio que pronto quedó pequeño, por lo que se edificó en 1459 el palacio de Topkapi, una extensión de 700.000 metros cuadrados en cuyo interior llegarían a vivir hasta 4.000 personas. El palacio se compone de cuatro patios y el Harén. El acceso se realiza por la puerta de los Saludos donde se sitúa el primer patio. En el segundo patio encontramos seis pasillos. El primero y el segundo de la derecha nos conducen a las cocinas; el tercero lleva a la puerta de la Felicidad; el cuarto nos dirige al Diván o Asamblea; el quinto nos conduce al harén y el sexto a los establos imperiales. La Puerta de la Felicidad nos abre el paso al tercer patio donde se encuentra la Sala de la Audiencia, lugar donde el sultán recibía a los embajadores. Al este del patio encontramos la Escuela de Expedición de Pajes donde se halla el guardarropa imperial. A continuación podemos ver el Tesoro, edificio construido originalmente como palacio de verano que se convirtió en el siglo XVI en tesorería. En el oeste del patio se situaba la Mezquita principal del palacio, hoy convertida en biblioteca. En el centro se ubica la biblioteca de Ahmet III, construida en 1719 y decorada con azulejos de Iznik. En la zona derecha del cuarto patio se encuentra la Mezquita del sofá; a continuación, el Quiosco de Mecidiye, añadido en 1840. En el centro del patio está la habitación privada del físico principal, una especie de farmacia. A su lado se ubica el Quiosco Sofá, empleado en un primer momento como sala de descanso y después para cobijar a los invitados del sultán. En la terraza se halla el baldaquino de bronce dorado del sultán Ibrahim. A la derecha se halla el Quiosco de Bagdad, levantado en 1639 para conmemorar la toma de la ciudad. A continuación encontramos el Quiosco Revan y el último edificio es el Quiosco del sultán Ibrahín, lugar reservado para la circuncisión de los jóvenes príncipes. Por el segundo patio accedemos al Harén, verdadero palacio dentro del palacio, que estuvo integrado hasta por 400 habitaciones, guardadas por los eunucos negros que tienen en la zona inicial su lugar de residencia. Las salas más atractivas de este lujoso espacio son el Salón de Murat III, habitación cupulada decorada con azulejos rojos y azules; y la Sala de la Fruta de Ahmet III, adornadas sus paredes con pinturas frutales.
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Las salas más atractivas de este lujoso espacio son el Salón de Murat III, habitación cupulada decorada con azulejos rojos y azules; y la Sala de la Fruta de Ahmet III, adornadas sus paredes con pinturas frutales.
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Cuando Mehmet II conquistó Estambul en 1453 se hizo construir un palacio que pronto quedó pequeño, por lo que se edificó en 1459 el palacio de Topkapi, una extensión de 700.000 metros cuadrados en cuyo interior llegarían a vivir hasta 4.000 personas. El palacio se compone de cuatro patios y el Harén. El acceso se realiza por la puerta de los Saludos donde se sitúa el primer patio. En el segundo patio encontramos seis pasillos. El primero y el segundo de la derecha nos conducen a las cocinas; el tercero lleva a la puerta de la Felicidad; el cuarto nos dirige al Diván o Asamblea; el quinto nos conduce al harén y el sexto a los establos imperiales. La Puerta de la Felicidad nos abre el paso al tercer patio donde se encuentra la Sala de la Audiencia, lugar donde el sultán recibía a los embajadores. Al este del patio encontramos la Escuela de Expedición de Pajes donde se halla el guardarropa imperial. A continuación podemos ver el Tesoro, edificio construido originalmente como palacio de verano que se convirtió en el siglo XVI en tesorería. En el oeste del patio se situaba la Mezquita principal del palacio, hoy convertida en biblioteca. En el centro se ubica la biblioteca de Ahmet III, construida en 1719 y decorada con azulejos de Iznik. En la zona derecha del cuarto patio se encuentra la Mezquita del sofá; a continuación, el Quiosco de Mecidiye, añadido en 1840. En el centro del patio está la habitación privada del físico principal, una especie de farmacia. A su lado se ubica el Quiosco Sofá, empleado en un primer momento como sala de descanso y después para cobijar a los invitados del sultán. En la terraza se halla el baldaquino de bronce dorado del sultán Ibrahim. A la derecha se halla el Quiosco de Bagdad, levantado en 1639 para conmemorar la toma de la ciudad. A continuación encontramos el Quiosco Revan y el último edificio es el Quiosco del sultán Ibrahín, lugar reservado para la circuncisión de los jóvenes príncipes. Por el segundo patio accedemos al Harén, verdadero palacio dentro del palacio, que estuvo integrado hasta por 400 habitaciones, guardadas por los eunucos negros que tienen en la zona inicial su lugar de residencia. Las salas más atractivas de este lujoso espacio son el Salón de Murat III, habitación cupulada decorada con azulejos rojos y azules; y la Sala de la Fruta de Ahmet III, adornadas sus paredes con pinturas frutales.
monumento
Palacio construido en el siglo XVI, donde llama especialmente la atención su bellísima portada plateresca, muy relacionada con el renacimiento cordobés del siglo XVI y situado en la zona más privilegiada de Écija. El palacio fue construido en 1530, en estilo plateresco. La portada está colocada en el ángulo de la espaciosa barrera, cuyos puntos iniciales lo forman robustos miradores que contienen en sus bases fustes romanos de granito. Destaca su magnífica escalera del siglo XVIII.
monumento
Para la Exposición de Minería celebrada en 1883 Ricardo Velázquez Bosco levanta este edificio, recibiendo el nombre actual de palacio de Velázquez en honor a su autor. Se trata de un edificio simple en el que el arquitecto no renuncia a su disposición favorita, empleada también en el Ministerio de Agricultura: fachadas, comúnmente amplias, acotadas por pabellones esquineros y un cuerpo central bastante ampuloso, igualmente resaltado. El salón central se cubre con una cubierta metálica que permite el paso de la luz. Las arquerías de las fachadas principal y laterales, de clara inspiración clásica, y los elementos cerámicos decorativos, pintados por Daniel Zuloaga, se convierten en indiscutible señas de identidad.
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Para la Exposición de Minería celebrada en 1883 Ricardo Velázquez Bosco levanta este edificio, recibiendo el nombre actual de palacio de Velázquez en honor a su autor.