Busqueda de contenidos

Personaje Arquitecto
Ignasi Mas i Morell ejecutó las Cases Auriga entre los años 1910 y 1911 y también otra casa singular en la calle Jacint Verdaguer el año 1911, en Sant Joan Despí. También es obra suya la Plaza Monumental de Toros de Barcelona.
Personaje Arquitecto
No fue reconocido oficialmente como arquitecto hasta 1832. Entre los años 1831 y 1847 llevó a cabo la construcción de la nueva fachada del Ayuntamiento de Barcelona, de estilo neoclásico, fachada que creó escuela, repitiéndose el mismo esquema en otros ayuntamientos catalanes. Otras obras suyas son la Puerta del Cementiri Vell, el mercado de Santa Caterina, que realiza junto a José Boxareu, y el plano topográfico de los alrededores de Barcelona
Personaje Literato
Entre la década de los años cuarenta y cincuenta, desarrolló algunas misiones diplomáticas en Filipinas y China. Las experiencias vividas en estos años fueron reflejadas en su obra "Inglaterra, China y la India". Otro de sus libros más importantes es "La Iberia. Memoria sobre la conveniencia de la unión pacífica y legal de Portugal y España", donde muestra su pensamiento político favorable al iberismo.
fuente
La guerra en el Pacífico, aparte de los grandes buques, tuvo otros protagonistas menores, cuya importancia resultó vital para mantener las rutas de transporte y las comunicaciones entre islas. Así, hacían falta vehículos ligeros y poderosos, capaces de alcanzar grandes velocidades y hostigar a la Marina enemiga. Los Mas norteamericanos fueron, en este sentido, muy utilizados, y entre ellos destacó el de tipo Elco, apto para navegar en aguas poco profundas y entre grupos de islas.
fuente
El más representativo de los Mas japoneses, como el resto fue proyectado siguiendo el patrón de los Mas ingleses Thorneycroft, tipo CMB. Muy útiles para la navegación entre islas, sin embargo durante la última fase de la guerra la mayoría no pudo ser utilizado.
Personaje Pintor
El 21 de diciembre de 1401 nace en Castel San Giovanni - actualmente San Giovanni Valdarno - Tomasso di Ser Giovanni di Mone Cassai, más conocido como Masaccio ("tosco", "pesado") uno de los pintores más importantes del Quattrocento. Su padre, notario de profesión, se llamaba Ser Giovanni Cassai - apellido derivado de la profesión de su abuelo, artesano que hacía muebles y cajas - y su madre Iacoba. En 1406 queda huérfano de padre, naciendo ese año su hermano Giovanni, conocido como Scheggia, quien protagonizará San Pedro sana con su sombra en la capilla Brancacci. Caterina, la otra hermana, se casó con un pintor llamado Mariotto di Cristofano. Sus primeros contactos artísticos tendrían lugar en su ciudad natal, trasladándose Masaccio a Florencia hacia 1417, acompañado de su madre, viuda de su segundo matrimonio. El 7 de enero de 1422 aparece inscrito en el gremio de médicos, boticarios y pintores de la ciudad, empapándose del ambiente humanista que se respiraba en la capital de la Toscana, relacionándose con Donatello y Brunelleschi, como se observa en el Tríptico de San Giovenale, su primera obra conocida. En esos momentos también trabaja en el fresco de La Consagración para la iglesia del Carmine. Se considera que al año siguiente realiza un viaje a Roma, donde se interesa por el mundo antiguo. En 1424 se inscribe en la "Compagnia di San Luca" e inicia sus relaciones con Masolino, con quien trabaja en algunas obras como la Santa Ana, Virgen con Niño y ángeles y en la decoración de la capilla Brancacci, su obra maestra. La ejecución de los frescos se prolongará hasta 1428, trabajos que compagina con otros encargos como el Políptico de Pisa o el fresco de la Trinidad de la iglesia de Santa Maria Novella. Gracias al catastro de 1427 sabemos que Masaccio vivía con su hermano Giovanni y su madre en una casa alquilada de la Via dei Servi y que ocupaba un taller en la actual Piazza di San Firenze. En 1428 se traslada a Roma, interrumpiendo los trabajos en la capilla Brancacci - que continuará 60 años después Filippino Lippi - para colaborar nuevamente con Masolino en la ejecución de un tríptico para la iglesia de Santa Maria Maggiore, que no llegó a finalizar ya que falleció misteriosamente ese mismo año, sugiriéndose que fue envenenado, aunque no existen datos fidedignos que avalen esta hipótesis. Cuando recibió la noticia del fallecimiento de Masaccio, su buen amigo Brunelleschi comentó: "Hemos sufrido una gran pérdida". El estilo de Masaccio destacará por sus figuras monumentales, inspiradas en la escultura de Donatello, actualizando las ideas de Giotto y situándose frente a Gentile da Fabriano, quien triunfaba en Florencia con sus elegantes escenas tardogóticas. Masaccio aporta un elevado interés hacia la perspectiva científica al dotar de un nuevo sentido del espacio a sus composiciones, la expresión de sus personajes y el empleo de la iluminación, que transmiten a sus obras un lenguaje crucial para la evolución de la pintura renacentista, considerándose como el primer maestro del Quattrocento, que influiría en artistas como Botticelli, Fra Filippo Lippi o Miguel Ángel.
obra
El artista Préault dominó una plástica impulsiva cercana a la de Barye, incluso más violenta y expresionista. La audaz empresa artística de Préault fue la de un romántico subversivo, de ingenio libre y antioficialista. El fantasmagórico relieve Masacre (1834) es una de las esculturas más rupturistas en el arte francés anterior a Daumier.
obra
Delacroix, como hombre de su tiempo, sintió una gran atracción hacia la guerra de liberación que enfrentó a Grecia con el Imperio turco. En varias ocasiones representó asuntos con esta temática, destacando la Masacre de Quíos, obra en la que se recuerda el ataque de diez mil hombres enviados por el Sultán a la isla de Quíos como represalia contra un ataque independentista griego en 1822. Más de 20.000 personas fallecieron, convirtiendo en esclavos a las mujeres y los niños que sobrevivieron a la matanza. Impresionado por este episodio de la reciente historia griega Delacroix realizó este gran lienzo, que presentó al Salón de 1824, considerándose como el Segundo Manifiesto del Romanticismo. Con esta imagen se pretendía invocar en el espectador la causa de la libertad. La obra es una clara muestra de romanticismo pictórico al encontrarnos con una composición totalmente en movimiento, en la que los ecos de Rubens son significativos al aparecer las figuras en marcados escorzos, incluso vemos a uno de los militares turcos a caballo. La expresividad del conjunto se sitúa por encima de intereses cromáticos o lumínicos, a pesar de que éstos no pasan desapercibidos. El interés por los detalles se aprecia claramente en la calidad de las telas o el "bodegón" de joyas que encontramos en primer plano. Pero lo más efectista serán los rostros de los vencidos contrastando con la altivez del turco vencedor que rapta a la joven desnuda, excepcional figura con la que se anticipa a la Muerte de Sardanápalo.