Roma
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Datos principales
Rango
753 a. C. - 750 d. C.
Desarrollo
ÍNDICE DEL CAPÍTULO Italia antes de Roma . Lacio Antiguo . Magna Grecia . Poblaciones primitivas . Etruscos . Roma: la Monarquía . Primeros reyes . Primeras instituciones y sociedad . Monarquía etrusca . Gobierno de Tarquinio Prisco . Epoca de Servio Tulio . Reformas de Servio Tulio . La religión en tiempos de Servio Tulio . El reinado de Tarquino el Soberbio . La formación de la República Romana . Sociedad Republicana . Plebeyos . Reivindicaciones plebeyas . Luchas patricios-plebeyos . Instituciones republicanas . Instituciones plebeyas . Colegios sacerdotales . Las Leyes de las XII Tablas . Roma en el contexto itálico . Roma: República patricio-plebeya . Evolución económica . Colonización latina . Fortalecimiento del campesinado . Nueva articulación del cuerpo social . La reforma de Apio Claudio . Constitución Republicana .
Expansión romana . Etapas de la conquista de Italia . Tercera Guerra Samnita . Guerras de Pirro y Magna Grecia . Sicilia . Bases de la unificación italiana . Primera Guerra Púnica . Guera Ilírica . Conquista de la Galia Cisalpina . Segunda Guerra Púnica . Cartago . Motivos del conflicto . La lucha entre Aníbal y Roma . Batalla de Cannas . Guerra en Oriente . Segunda Guerra Macedónica . Liberación de Grecia . Guerra contra Antíoco III . Tercera Guerra Macedónica . Sumisión de Grecia . Relación con los reinos helenísticos . Conquista de Hispania . Tercera Guerra Púnica . Consecuencias de la expansión . Desarrollo urbanístico . Sistema provincial . Comercio y transformaciones agrarias . Nuevas relaciones sociales . Orden ecuestre . Plebs romana . Incremento del esclavismo .
República Romana: desde los Gracos a la fase final . Reformas de Tiberio Graco . Tribunado de Cayo Graco . Gobierno de los nobilitas: la conquista de la Narbonense . Guerra de Yugurta . Recuperación de los populares: Mario . Consulado de Mario . Hacia la Guerra Social . Tribunado de M. Livio Druso . Dictadura de Sila . Reformas de Sila . Gobierno de Sertorio en Hispania . Revueltas de esclavos . Revueltas de Sicilia . Revuelta de Espartaco . Guerra contra Mitrídates . Crisis de la nobilitas: el poder personal . Intervención de Pompeyo . Conjuración de Catilina . Regreso de Pompeyo a Roma . Carrera política de César . Primer Triunvirato . Triunviros, Clodio y Cicerón . Guerra de las Galias . Guerra Civil y Dictadura de César . Guerra Civil . Dictadura de César . Alto Imperio (I): Augusto . Ascenso político de Octaviano . Sucesión de César .
Guera de Módena . Segundo Triunvirato . De Filipos a Nauloco . Batalla de Accio . Formación del poder imperial . El mundo romano bajo Augusto . Administración del Imperio . Sociedad . Sucesión de Augusto . Alto Imperio (II): los Julio-Claudios . Gobierno de Tiberio . Administración y sociedad . La religión . Defensa de fronteras . La tiranía de Calígula . Nuevas bases del poder . Política religiosa . Política fronteriza . Caída de Calígula . Gobierno de Claudio . Acceso de Claudio al poder . Intervenciones administrativas . Política municipal . Creación de nuevas provincias . Gobierno de Nerón . Nuevas formas de gobierno . Incendio de Roma . Las finanzas . La cuestión judaíca . Las fronteras . Año de los cuatro emperadores . Italia y las provincias bajo los Julio- Claudios .
Evolución social . Nuevas tendencias ideológicas . Alto Imperio (III): Flavios y Antoninos . El poder imperial . Senadores y caballeros bajo los Flavios . Roma en la política flavia . Las provincias en la política flavia . Economía y fiscalidad de los Flavios . Ejército y campañas militares . Política y cultura bajo los Flavios . Imperio durante los Antoninos . Gobierno de Nerva . El Imperio de Trajano . Administración trajana . Guerras de conquista . El gobierno de Adriano . Administración central . Las provincias bajo Adriano . Defensa fronteriza . El Imperio con Antonino Pío . Administración central . Las provincias . El gobierno de Marco Aurelio . Administración del Imperio . Peligros en las fronteras . El gobierno de Cómodo . Roma y las provincias . Las ciudades . Organización administrativa urbana . Religión y ciudad . Ciudad y economía .
Alto Imperio (IV): los Severos y la anarquía militar . Los Severos . Guerra Civil . Tras la Guerra Civil . Administración central . Política religiosa . Medidas económicas . Anarquía militar . Emperadores soldados . Transición al Bajo Imperio . Sistema tetrárquico . Reformas de Diocleciano . Reforma militar . Reformas económicas . Tetrarquía sin Diocleciano . Bajo Imperio . Constantino dueño único del Imperio . Conversión y política religiosa de Constantino . Sucesión de Constantino: Constancio II . Relaciones Iglesia-Estado . Juliano césar y Juliano emperador . La cuestión religiosa . Política social de los Constantínidas . Reformas fiscales y administrativas . La dinastía Valentiniana en el poder . El Imperio occidental con Valentiniano I . Graciano, Valentiniano II y Teodosio. . Fin de Graciano y usurpación de Máximo . Teodosio: restablecimiento de la unidad imperial .
Fin del Imperio Romano Occidental . Consideraciones sobre la caída del Imperio Romano Occidental . El patronato y los grandes dominios . El papel de la Iglesia . ÍNDICE POR REGIONES ROMA ·Monarquía . ·Formación de la República . ·Expansión romana . ·El final de la República . ·Augusto . ·Los Julio-Claudios . ·Flavios y Antoninos . ·Anarquía militar . ·Transición al bajo imperio . ·Bajo Imperio . CARTAGO ·Papel en la Antigüedad . ·Primera Guerra Púnica . ·Segunda Guerra Púnica . ·Motivos del Conflicto . ·Lucha de Aníbal y Roma . ·Tercera Guerra Púnica . ORIENTE ·Guerra Ilírica . ·Segunda Guerra Macedónica . ·Liberación de Grecia . ·Guerra contra Atioco III . ·III Guerra Macedónica . ·Sumisión de Grecia . ·Guerra contra Mitrídates . GALIA ·Conquista de la Galia Cisalpina . ·Guerra de la Galias . HISPANIA ·Segunda Guerra Púnica . ·Conquista de Hispania . ·Gobierno de Sertorio .
MAGNA GRECIA ·Magna Grecia antes de Roma . ·Guerras de Pirro . ·Conquista de Sicilia . EGIPTO ·Roma y los reinos helenísticos . ·Egipto Ptolemaico . ·Augusto toma Egipto . CONSTANTINOPLA ·Sistema tetrárquico . ·Constantino y el Imperio . ·Los Constantínidas . VIDA COTIDIANA El trabajo y la sociedad . Trabajo agrícola . Trabajo en la minería . Los artesanos . Los comerciantes . Los financieros . El coste de la vida . La familia . La educación . Diversiones . Lengua y literatura . Las mujeres . La prostitución . La ciencia . La filosofía . El Derecho . La religión . Ciudades y casas .
Italia antes de Roma
Tres grandes núcleos de población encontramos antes de la fundación de Roma: Magna Grecia en el sur, Etruria en el norte y el Lacio en el centro.
Más información Lacio Antiguo
El valle del Lacio era una llanura que ofrecía excelentes condiciones para la explotación agrícola y ganadera, además de estar abierta al mar y ser punto de confluencia de varias vías terrestres, factores que propiciaron un rápido desarrollo económico de la región. Allí habitaron los antiguos latinos desde los comienzos del I milenio y se desarrollaron una serie de importantes ciudades -Preneste, Tibur, Gabii y Alba Longa- con las que se relacionará Roma.
Más información Magna Grecia
La zona sur de Italia y la isla de Sicilia serán los lugares donde diferentes polis griegas establecerán sus colonias, iniciándose un estrecho contacto entre el mundo griego y la península itálica. Las relaciones comerciales y culturales también se extenderán a la zona del Lacio, introduciendo el alfabeto, el olivo y favoreciendo el desarrollo de la vida urbana.
Más información Poblaciones primitivas
Sabinos, etruscos, hérnicos, volscos y ecuos serán los pueblos con los que los romanos tendrán relaciones, generalmente no muy amistosas. Los griegos de la Magna Grecia completan este conjunto de pueblos que habitaban la primitiva Italia.
Más información Etruscos
Los orígenes del pueblo etrusco son todavía una incógnita al igual que su escritura. Su momento de esplendor se produce en el siglo VII a.C. cuando las diferentes ciudades gobernadas por reyes realizaron una especie de federación, iniciando una serie de importantes conquistas. En el siglo V se inicia la decadencia.
Más información Roma: la Monarquía
A pesar de las complicaciones existentes para los historiadores alrededor de los orígenes de Roma, atendiendo a las numerosas leyendas y mitos sobre el tema, se considera que el año 754 a.C. sería el de la fundación de la ciudad, estableciéndose una monarquía similar a las tiranías griegas del momento.
Más información Primeros reyes
El primer rey de Roma sería Rómulo, si mantenemos la tradición. Tito Tacio, Numa Pompilio, Tulio Hostilio y Anco Marcio le sucedieron en el cargo, realizando cada uno de ellos diversas reformas. El germen de la ciudad sería el monte Palatino, desde donde se extendería a las demás colinas hasta comprender las siete que recoge la tradición.
Más información Primeras instituciones y sociedad
La Roma primitiva estaba dividida en tres tribus: Ramnes, Tities y Luceres. Cada una aportaba los hombres que formaban los Comicios Curiados que debían ratificar la elección del rey mientras que el Senado era quien tenía la función de elegir al monarca. Apreciamos una distinción social y económica al organizarse la ciudad como una concentración de gentes, el sector privilegiado, de quien dependían una serie de clientes. Esta primera fase de la monarquía viene marcada por el proceso de unificación de los habitantes de las colinas romanas en un único organismo ciudadano.
Más información Monarquía etrusca
Roma en esta época se convirtió en la ciudad hegemónica del Lacio. Lo más probable es que continuara siendo una ciudad latina, no dominada políticamente, al menos de forma permanente, por una o varias ciudades etruscas, aunque sí fue una Roma etrusquizada en los aspectos culturales y religiosos. También fue decisiva en este período la influencia griega. Tarquinio Prisco, Servio Tulio y Tarquino el Soberbio serán los monarcas que gobernarán en este período.
Más información Gobierno de Tarquinio Prisco
Procedente de Tarquinia, Tarquinio Prisco se instaló en Roma donde alcamzó el título de rey. Se le atribuye la construcción de la Cloaca Máxima, del Circo Máximo y del templo de Júpiter en el Capitolio, ampliando a su vez el territorio romano luchando con los sabinos. Aumentó del número de senadores y el de las clases superiores
Más información Epoca de Servio Tulio
Los casi cuarenta años que Servio Tulio ocupó el trono de Roma están caracterizados por la dinámica social y el desarrollo económico. Desconocemos cómo llegó el rey, originario de Vulci, a gobernar la ciudad pero sus reformas serán muy importantes para la evolución de Roma.
Más información Reformas de Servio Tulio
La nueva organización del territorio al dividir a los romanos en tribus y en clases según su riqueza, la elaboración del censo, la creación de un sistema monetario, la introducción de los Comicios Centuriados y la creación de un ejército hoplítico serán las reformas más importantes impulsadas por Servio Tulio.
Más información La religión en tiempos de Servio Tulio
Entre las reformas urbanísticas que llevó a cabo Servio Tulio encontramos la edificación de una serie de templos a las diosas Fortuna, Diana y Mater Matuta, divinidades incorporadas en este momento al panteón romano.
Más información El reinado de Tarquino el Soberbio
El reinado de Tarquinio el Soberbio supondrá el final de la monarquía y el inicio de la República. El cambio de régimen vendrá motivado, posiblemente, por el cansancio de los aristócratas de la política expansiva del monarca. La invasión de Roma por Porsenna y el republicanismo imperante en las vecinas ciudades etruscas sirvieron como acicate para provocar el derrocamiento.
Más información La formación de la República Romana
Los primeros años de la República presentan muchas incertidumbres. Tras la caída de Tarquino y la monarquía se designó un praetor maximus que dirigiría la República. Posteriormente encontramos la institución del consulado, en un primer momento ocupado también por plebeyos hasta que los patricios controlen todos los mecanismos de la vida política.
Más información Sociedad Republicana
Patricios y plebeyos configurarán la división social de la república. Los primeros ocupan la élite económica y política mientras los segundos lucharán por conquistar ciertas parcelas de poder.
Más información Plebeyos
A comienzos de la República los plebeyos se constituyen como grupo organizado en el que todos reconocían un elemento común: su no pertenencia al patriciado, al margen de su fortuna o su pobreza.
Más información Reivindicaciones plebeyas
La admisión regular de los plebeyos en todas las magistraturas y en los sacerdocios, la redistribución de las tierras públicas y la abolición de la servidumbre por deudas serán las demandas presentadas por los plebeyos en su lucha contra los patricios.
Más información Luchas patricios-plebeyos
Hay que distinguir dos etapas durante el conflicto: la primera abarcaría la primera mitad del siglo V, época en la que el movimiento plebeyo se constituyó en un Estado dentro de otro Estado; la segunda a partir de mediados del siglo V, cuando ya se había conseguido introducir a plebeyos en algunas magistraturas y se había logrado la validez de los matrimonios. Desde este momento se desencadenó un proceso durante el cual las instituciones plebeyas perdieron su inicial carácter revolucionario y fueron asimilándose a las estructuras republicanas. La primera secesión de la plebe tuvo lugar en el año 493 a.C.
Más información Instituciones republicanas
Los cónsules, el pretor, los cuestores, los tribunos consulares, los censores, los decemviros, el Senado y los Comicios Centuriados eran las instituciones existentes en los primeros momentos de la república romana.
Más información Instituciones plebeyas
Los tribunos y los ediles de la plebe serán las dos instituciones que defendían las reivindicaciones plebeyas frente a las instituciones patricias.
Más información Colegios sacerdotales
1qLa religión republicana no se movía en una esfera propia y distinta de la vida política, sino que estaba estrechamente vinculada a las instituciones. El Colegio de los Pontífices era el más importante y de él dependían las vestales y los flámines. Los augures también constituían un importante colegio.
Más información Las Leyes de las XII Tablas
Las Leyes de las XII Tablas suponen la consolidación del proceso de estatalización en Roma, unido al triunfo de la plebe. El contenido de las leyes se basa en unos ejes claramente definidos: la salvaguarda del patrimonio y la autoridad del padre, que es el único titular de derecho. La promulgación de estas leyes no resolvió las tensiones y enfrentamientos entre patricios y plebeyos, pero la existencia de una legislación escrita, accesible y válida para todos, favoreció la colaboración entre ambos órdenes y contribuyó a reforzar definitivamente las estructuras de la ciudad estado.
Más información Roma en el contexto itálico
Las tensiones y los conflictos internos de Roma durante el siglo V a.C. deben ser contextualizadas como un caso particular dentro de un proceso itálico y mediterráneo mucho más general. El acontecimiento que permitió la consolidación definitiva de Roma como ciudad fue su victoria sobre la ciudad etrusca de Veyes. La ampliación de su territorio fue paralela al incremento demográfico y al desarrollo de las actividades comerciales y artesanales.
Más información Roma: República patricio-plebeya
El acceso de los plebeyos al poder permitirá a Roma iniciar un despegue económico y militar que le permitirá convertirse rápidamente en potencia.
Más información Evolución económica
A lo largo de los siglos IV y III a.C. se manifiesta en Roma una intensa helenización tanto en el plano económico-comercial como en el ideológico.
Más información Colonización latina
Desde el año 338 a.C. Roma se constituye en cabeza del Lacio, configurando un territorio compacto habitado por romanos e indígenas asimilados. La fundación de nuevas ciudades se produjo de manera continua, cumpliendo estas fundaciones funciones esenciales en el campo económico, social y militar, convirtiéndose en vehículos fundamentales para la romanización de Italia.
Más información Fortalecimiento del campesinado
La colonización latina va a permitir un reparto más acertado de tierras que favorecerán el fortalecimiento del campesinado, al mismo tiempo que las leyes fomentarán la liquidación de las deudas, legándose a prohibir el préstamo con interés.
Más información Nueva articulación del cuerpo social
A lo largo del siglo IV a.C. existe ya una tendencia cada vez mayor a la diferenciación social. No obstante, las tensiones sociales no fueron preocupantes. Las tribus romanas se dividirán en urbanas (cuatro) y rústicas (veintiuna), siendo las bases de las levas. El reparto de la población en estas tribus se hace de una manera desigual y variada.
Más información La reforma de Apio Claudio
Los hijos de algunos libertos pasarían a la clase más elevada al tiempo que el pueblo bajo fue repartido en tribus. Estas son las dos reformas más importantes que realizó Apio Claudio. Cneo Flavio permitió que los plebeyos conocieran cuándo se repartía justicia, rompiendo así como ese método de presión patricio.
Más información Constitución Republicana
Los cónsules y los pretores son elegidos por los comicios o asamblea centuriada. Los censores son nombrados por las centurias mientras que los cuestores son elegidos por las tribus. Los tribunos de la plebe y los ediles eran los últimos escalones del cursus honorum. El Senado estaba formado por los senadores, que constituían el consejo de los magistrados curules. Las asambleas o comicios romanos son de cuatro tipos: comicios curiados, centuriados, de tribus y concilia plebis.
Más información Expansión romana
Expansión romana
Las raíces del imperialismo romano están en la propia estructura de la sociedad romana y en la evolución posterior de ésta, en la que, a factores políticos, se fueron añadiendo otros de carácter económico, psicológico, diplomático, etc... que marcaron la política exterior de Roma y posibilitaron que se convirtiese en una potencia dominadora de medio mundo. El impulso que llevó a Roma a la conquista del mundo mediterráneo y las formas que adoptó dicha conquista están íntimamente ligados a las instituciones republicanas, responsables de su orientación y de los medios para llevarla a cabo.
Más información Etapas de la conquista de Italia
Las guerras samnitas están consideradas como el comienzo de las riquezas de Roma, suponiendo el logro de la supremacía romana en Italia. Las guerras se desarrollaron en varias fases entre el año 328 y el 290 a.C., con intervalos de relativa tranquilidad y con algunas batallas importantes y la ampliación por parte de Roma del sistema de alianzas.
Más información Tercera Guerra Samnita
Entre 298-290 se produce la tercera Guerra Samnita que enfrenta a Roma contra los etruscos, los galos senones y los samnitas. Roma obtiene la victoria y consigue imponer sus condiciones a todos estos pueblos. De la construcción de un Estado territorial en el Lacio e inmediatas localidades, Roma había pasado a la hegemonía itálica.
Más información Guerras de Pirro y Magna Grecia
El primer enfrentamiento del ejército romano con el mundo griego, encarnado en Pirro, se produjo cerca de la colonia tarentina de Heraclea en el 280 a.C. El resultado se tradujo en una victoria para Pirro, si bien las pérdidas en ambos bandos fueron enormes.
Más información Sicilia
El peligro que suponía la presencia de Pirro en el sur de Italia y Sicilia motivó la firma de un tratado entre Cartago y Roma. En el primer enfrentamiento el rey epirota consiguió la victoria pero la victoria de los Campos Arusinos (275 a.C.) permitió a Roma controlar toda Italia.
Más información Bases de la unificación italiana
En el proceso de unificación de Italia hay varios aspectos que conviene señalar: Roma apoyó sistemáticamente a la aristocracia de los pueblos sometidos; el comportamiento romano propició en términos generales la coexistencia y asimilación con los aliados; la principal demanda de Roma a las comunidades sometidas era el suministro de tropas. El potencial económico y militar que conseguirá Roma tras la invasión de Italia será enorme, permitiéndole afrontar con éxito la invasión de Anibal.
Más información Primera Guerra Púnica
La primera Guerra Púnica fue la primera guerra extra-itálica de Roma. Se inicia en el 265 a.C. y dura 24 años. La causa la encontramos en la solicitud de ayuda por parte de los mamertinos en su enfrentamiento con los siracusianos. Roma apoya a los primeros y Cartago a los segundos. La victoria romana permitirá la conversión de Sicilia en provincia romana.
Más información Guera Ilírica
Roma actuó en esta ocasión no sólo en defensa de sus intereses, sino también por la necesidad de reafirmar su posición de potencia hegemónica y mantener un cierto control sobre sus vecinos. El conflicto estalla en el año 230 a.C.; la flota romana no encontró grandes dificultades para apoderarse de Issa y de Faros y castigar duramente a las poblaciones del sur de Iliria. En el 228 a.C. se firma la paz, estableciendo Roma un protectorado sobre la zona.
Más información Conquista de la Galia Cisalpina
Entre el 236 y el 177 a.C. se produjo la conquista del territorio norte de la península itálica, derrotando a los belicosos galos que habitaban en aquella zona. La victoria romana fue asegurada con la creación de dos importantes colonias latinas, Cremona y Plasencia, con seis mil colonos cada una.
Más información Segunda Guerra Púnica
La Segunda Guerra Púnica se libró entre cartagineses y romanos por el control del Mediterráneo occidental. Sus principales protagonistas serán Aníbal y Escipión Africano. El primero vencerá en Cannas pero la victoria definitiva será para el romano en Zama.
Más información Cartago
Creada como factoría por los fenicios en el I milenio a.C., el desarrollo de Cartago como potencia comercial y política se produce a partir del siglo VI a.C. Su expansión alcanza a la costa levantina de la península Ibérica, Sicilia, Ibiza, Cerdeña o diversas islas cercanas a Malta. Su vocación marinera y comercial les llevó hasta las costas de Bretaña.
Más información Motivos del conflicto
La prepotencia de Roma tras la primera Guerra Púnica y el expansionismo cartaginés en la Península Ibérica se consideran como los motivos principales del conflicto. La causa inmediata será el ataque de Aníbal a Sagunto (219 a.C.)
Más información La lucha entre Aníbal y Roma
En 218 a.C. Aníbal atraviesa los Alpes con su ejército y domina casi toda la península Itálica tras la batalla de Cannas (216 a.C.). La reacción romana sería encabezada por Escipión el Africano que consiguió llevar la guerra a Hispania y cortar los suministros del ejército de Aníbal. En el año 202 a.C. tenía lugar la batalla de Zama que daba la victoria a Roma y suponía el final del conflicto.
Más información Batalla de Cannas
Batalla que tiene lugar el 2 de agosto del año 216 a.C. entre el cartaginés Aníbal y los cónsules romanos Emilio y Varrón. Tras algunas horas de lucha, Aníbal consiguió una contundente victoria.
Más información Guerra en Oriente
Roma, hasta mediados del siglo II a.C., no se planteó la posibilidad de establecer un dominio político directo ni una ocupación territorial en Grecia. El objetivo principal estribaba en impedir que se creasen estados potentes y expansionistas que rompieran el equilibrio griego y al mismo tiempo pudiesen constituir un peligro para la propia seguridad de Roma.
Más información Segunda Guerra Macedónica
La política expansionista de Filipo V y de Antíoco III va a motivar la solicitud de ayuda de Rodas y Pérgamo a Roma. Tras una primera victoria romana que obligó a Filipo a negociar, la ruptura de las conversaciones motivó la definitiva batalla de Cinoscéfalos (197 a.C.) que trajo la paz y la independencia a Grecia.
Más información Liberación de Grecia
Tras derrotar a Filipo V, Roma consideró que la mejor situación para Grecia era el restablecimiento de la libertad para las polis, incapaces de transformarse en una gran potencia. En el año 194 a.C. todos los soldados romanos salen de la Hélade, lo que permitirá el desarrollo de un excelente caldo de cultivo para las luchas intestinas.
Más información Guerra contra Antíoco III
El acuerdo de Filipo V y Antíoco para repartirse Egipto contó con la repulsa de Roma. En el año 193 a.C. Roma y Antíoco fijan la frontera entre ambos imperios pero el seleucida se convertirá en el líder de los sentimientos antirromanos de la época. La lucha entre ambos se decantará del lado romano, obteniendo la victoria definitiva en Magnesia del Sípilo (189 a.C.).
Más información Tercera Guerra Macedónica
La política senatorial romana no tardó en suscitar descontentos en Grecia, descontentos que fueron liderados por Perseo de Macedonia. En el año 171 a.C. Roma se lanzó contra Macedonia siendo la primera etapa de la guerra bastante dura para los romanos hasta conseguir la definitiva victoria en las cercanías de Pidna. Tras la victoria, Macedonia era dividida en cuatro regiones, paso previo a convertirse en provincia romana (148 a.C.).
Más información Sumisión de Grecia
Las numerosas revueltas antirromanas -especialmente en Macedonia, la Liga Aquea y Corinto- que se producen en Grecia durante la mitad del siglo II motivarán que Roma acabe definitivamente con la soberanía y la libertad de Grecia.
Más información Relación con los reinos helenísticos
La relación de Roma y las monarquías helenísticas se hizo más estrecha durante la segunda mitad del siglo II a.C. Atalo III de Pérgamo cedió en herencia su reino a Roma (133-129 a.C.); en Egipto la confusa situación permitió la participación en la política del país, reconociendo a Roma como dueña inevitable de sus destinos políticos; en los reinos seleucidas se apostará por Demetrio hasta que Roma intervenga directamente.
Más información Conquista de Hispania
Las riquezas de la península Ibérica motivarían la conquista romana, tras haber llegado al territorio con motivo de la segunda Guerra Púnica. Los indígenas hispanos se someterán con dificultad, encontrándose casos de resistencia relevantes como Viriato o Numancia. Tras la división del territorio conquistado en dos provincias -Ulterior y Citerior- se puso en marcha un ambicioso programa de fundación de ciudades ya que el entorno urbano aún no estaba muy desarrollado en la zona.
Más información Tercera Guerra Púnica
Tras la segunda Guerra Púnica, Cartago se comprometió a no emprender ninguna guerra sin el permiso de Roma. Pero el acoso de Massinisa provocó la respuesta cartaginesa lo que motivó la intervención de Roma a través de Escipión Africano. En la primavera del año 146 a.C. la ciudad fue abandonada y arrasada. Antes del 130 a.C. Roma se convertía en la única e indiscutible potencia del Mediterráneo.
Más información Consecuencias de la expansión
Las guerras ultramarinas que siguieron a la segunda Guerra Púnica tuvieron entre otras consecuencias dos que conviene tener presentes: una profesionalización estable del soldado romano e italiano y un flujo de riqueza que revirtió en Roma e Italia.
Más información Desarrollo urbanístico
El flujo de riquezas que llegó a Roma procedente de las conquistas se dedicó, en buena suma, a la transformación urbanística de la ciudad, levantándose un buen número de templos, teatros o basílicas, financiados por los patricios para aumentar su prestigio personal y familiar. La mayoría de los edificios construidos durante la primera mitad del siglo II tienen como modelo permanente al mundo helenístico.
Más información Sistema provincial
Los territorios anexionados por Roma pasaron a ser organizados en distritos que se designaran provinciae. Los magistrados que ejercían su actividad en los nuevos territorios eran nombrados pretores. El pretor tiene dos funciones primordiales a lo largo del año en que dura su mandato. Por una parte, dirige las tropas asentadas por Roma tras la conquista. En segundo lugar, se encarga de administrar justicia en los asuntos de su competencia. Nadie controla su actividad en la provincia.
Más información Comercio y transformaciones agrarias
Las conquistas romanas de los siglos III-II a.C. motivarán profundas transformaciones en el plano económico, con cambios en la agricultura, creación de nuevos mercados y entrada de un importante flujo de dinero a Roma. La llegada de botines e indemnizaciones de guerra supondrá una ingente entrada de dinero extra a las arcas estatales y privadas. La única forma de comercio sobre la que el Estado romano ejerció un estrecho control fue el grano. El motivo era asegurar el mantenimiento del ejército y el abastecimiento de Roma. Los cultivos más extendidos eran el olivo y la vid, aunque también se impulsa el cultivo de árboles frutales, el huerto de regadío y los pastos.
Más información Nuevas relaciones sociales
En la época de las grandes conquistas se fueron gestando importantes tensiones sociales y contradicciones políticas, especialmente por la importancia otorgada al general vencedor en detrimento de las instituciones republicanas. Las exigencias populares de un reparto más justo de los recursos implicaba el riesgo de una ruptura del equilibrio social.
Más información Orden ecuestre
Tito Livio atestigua la existencia de una categoría de ciudadanos que, desde el 214 a.C., se definía por su inclusión en el censo como poseedores de un millón de ases o 400.000 sestercios. En el siglo II probablemente pertenecían al orden de los caballeros los que poseían tal censo, formasen o no parte de las centurias ecuestres. En las actividades económicas los dos órdenes, senadores y caballeros, aparecen frecuentemente vinculados.
Más información Plebs romana
Roma se convirtió en centro de atracción para multitud de personas de Italia, tanto trabajadores como indigentes. Todos estos trabajadores formaban la plebs que veía como era rechazada por el resto de la sociedad. Para defenderse acabaron asociándose en calles, barrios o collegias. La presencia de esclavos complicará el panorama laboral romano.
Más información Incremento del esclavismo
Entre el 200 y el 150 a.C., se ha estimado el número de prisioneros reducidos a esclavitud en 250.000 lo que motivó una afluencia masiva de esclavos en la ciudad y el campo romano, aunque no se produjo la eliminación del trabajo libre. Las condiciones de vida de los esclavos oscilaron generalmente entre la dureza y la extrema crueldad a que se vieron sometidos.
Más información República Romana: desde los Gracos a la fase final
República Romana: desde los Gracos a la fase final
El período comprendido entre 133 y 27 a.C. será una etapa tremendamente convulsa en la historia de Roma. El fortalecimiento del poder personal conducirá a los triunviratos y las dictaduras de César o Augusto, suponiendo el fin de la República.
Más información Reformas de Tiberio Graco
La ley agraria presentada por Tiberio (133 a.C.) no tenía nada de revolucionaria, ya que reclamaba el principio jurídico sobre el que se fundaba el ager publicus, denunciaba las usurpaciones, prescribía que todos los ocupantes sin títulos fueran expulsados de las tierras usurpadas mientras que las tierras recuperadas se debían distribuir entre los ciudadanos pobres. Roma se dividió entre partidarios y detractores de la ley graquiana y con la ciudad, toda Italia.
Más información Tribunado de Cayo Graco
El programa legislativo de Cayo Graco, heredero del de su hermano Tiberio Graco, no se limitaba a una simple reforma agraria que solucionase la critica situación de una serie de campesinos romanos empobrecidos, sino que trataba de reformar algunas de las estructuras básicas del Estado romano.
Más información Gobierno de los nobilitas: conquista de la Narbonense
En estos años se procederá a realizar una importante serie de campañas que tendrán como resultado la creación de la Galia Narbonense siendo su promotor el cónsul Fulvio Flaco. El objetivo era la creación de una vía terrestre que facilitara las comunicaciones entre Italia e Hispania.
Más información Guerra de Yugurta
La sucesión y la situación interna de Numidia provocará una encarnizada guerra entre Roma y Yugurta. La importancia de este conflicto se manifiesta en que por primera vez el pueblo contestó el derecho de los senadores a dirigir una guerra. El vencedor de la guerra sería Mario.
Más información Recuperación de los populares: Mario
La participación en el botín, la posibilidad de recibir tierras una vez licenciados y el cobro de un stipendium serán las compensaciones al servicio militar que introdujo Mario, motivando la incorporación de proletarios al ejército.
Más información Consulado de Mario
La popularidad de Mario subió muchos enteros cuando acabó con los bárbaros de la Galia. Ocupando durante más de seis ocasiones el consulado, se dejó llevar políticamente de la mano de los populares Saturnino y Glaucia hasta que la reacción senatorial, los caballeros y la plebe urbana pusieron fin a la confusa y violenta situación.
Más información Hacia la Guerra Social
Las fallidas reformas graquianas respecto a la inclusión de oligarcas itálicos en la ciudadanía romana y el enfrentamiento entre caballeros y senadores van a conducir a la guerra social en los años centrales de la década de los 90 a.C.
Más información Tribunado de M. Livio Druso
Las reformas realizadas por M. Livio Druso estaban encaminadas a devolver al Senado su papel tradicional en la política romana al tiempo que se admitía a los itálicos como ciudadanos de Roma. Pero el Senado rechazó la admisión de la ciudadanía y provocó el estallido de la guerra social (91-89 a.C.). Los rebeldes se constituyeron en un Estado federal, dotándose de una organización calcada de la romana. El conflicto se resolvió con la promulgación de la Lex Iulia de civitate que ofrecía la ciudadanía a los pueblos aliados o que depusieron la armas.
Más información Dictadura de Sila
El mando del ejército en las operaciones frente a Mitrídates provocará una enconada lucha en Roma entre Mario y Sila, representantes del poder popular y aristocrático respectivamente. La victoria del segundo supondrá el inicio de una férrea dictadura que será tremendamente negativa por la dura represión que se desarrolló. Las reformas que pondrá en marcha Sila también son dignas de tener en cuenta.
Más información Reformas de Sila
La sistematización de Sila desde su cargo de dictador fue muy importante en tanto en cuanto supuso una ampliación de la clase dirigente y, en general, una mayor adecuación de los mecanismos estatales a la nueva situación de Roma como cabeza de un imperio mediterráneo.
Más información Gobierno de Sertorio en Hispania
Aglutinando a las fuerzas anti-silanas, Sertorio se estableció en Hispania donde organizó un gobierno de inspiración popular. La provincia se convirtió en un Estado autónomo, favoreciendo la romanización de la Península.
Más información Revueltas de esclavos
El aumento desde el siglo II a.C. del empleo de esclavos en los latifundios provocó un mal trato generalizado a estos trabajadores que sería contestado con revueltas, siendo la más conocida la protagonizada por Espartaco.
Más información Revueltas de Sicilia
El maltrato al que eran sometidos los esclavos provocó al primera revuelta en Sicilia durante el año 135 a.C. La actuación de los cónsules supuso la derrota de la rebelión tres años más tarde, cuando más de 200.000 esclavos participaron en las luchas. La segunda revuelta también duró unos tres años, resultando sorprendente que los líderes esclavos amotinados adoptaran el título de rey.
Más información Revuelta de Espartaco
La novedad de la rebelión de Espartaco con respecto a motines anteriores es que ahora sólo se busca la libertad. Con un amplio número de seguidores que iban ampliándose a medida que transcurría el tiempo, Espartaco emprendió un periplo por toda Italia hasta su derrota definitiva en el año 71 a.C. a manos de Licinio Craso. La violencia que caracterizó el movimiento es la nota que resaltan las fuentes.
Más información Guerra contra Mitrídates
Entre los años 89 y 63 a.C. Roma y el reino del Ponto dirigido por Mitrídates VI mantendrán una encarnizada guerra entre cuyas causas encontramos la personalidad del rey, los deseos de fortalecer su poder expandiendo su zona de influencia o la presión fiscal que Roma sometía a la provincia de Asia. Mitrídates buscó el apoyo del pueblo asiático lo que motivó que la aristocracia se decantara por Roma, desnivelando hacia esta última la balanza. Pompeyo venció al rey del Ponto, convirtiendo el reino en provincia romana.
Más información Crisis de la nobilitas: el poder personal
Una de las consecuencias de la reforma de Sila que influyó en gran medida en la política y en el propio final de la República estriba en el hecho de que él había concentrado todo el poder político en manos del Senado, pero no sucedía lo mismo con el poder ejecutivo. Se inició un camino sin retorno que conducía constantemente al Senado a confiar el ejecutivo a un hombre fuerte, a un general que, además, fuese político. Al mismo tiempo, los populares iniciaron una enloquecida carrera por ocupar el poder, provocando un fortalecimiento del personalismo a la hora de gobernar.
Más información Intervención de Pompeyo
Como miembro del partido popular, Pompeyo procedió desde su nombramiento como cónsul a suprimir todas las leyes de Sila. Ayudado por Craso, su papel en los conflictos militares del momento -Guerra Mitridatica y lucha contra los piratas- le colocó en una posición de preferencia para gobernar Roma.
Más información Conjuración de Catilina
Tras ser derrotado en la elección al consulado, Catilina planeó asesinar a los dos cónsules y convertirse en dictador (64 a.C.). El descubrimiento de la conjura provocó la condena a muerte de todos los responsables. En Pistoia, Catilina se suicidó tras la derrota de su ejército.
Más información Regreso de Pompeyo a Roma
A su victorioso regreso de Oriente (62 a.C.), tras vencer a Mitrídates, Pompeyo planteó una serie de propuestas al Senado que le fueron denegadas. Su poder se había resquebrajado al licenciar sus tropas. La alianza entre César y Pompeyo está cada vez más cerca.
Más información Carrera política de César
Líder de los populares, la política de César tenía una amplia dimensión y contemplaba la aplicación de un programa de reformas que transformarían el gobierno y reorganizarían el Estado romano. Su programa político será continuado tras su muerte por Augusto. Su primer puesto fue edil desde donde fue designado Pontifex Maximus. En el año 59 a.C. accedió al consulado para convertirse en triunviro junto a Pompeyo y Craso.
Más información Primer Triunvirato
Durante diez años Pompeyo, Craso y César, como miembros del Primer Triunvirato, controlaron la vida política romana, provocando una crisis que conduciría a la desintegración del Senado y de la clase de los optimates, especialmente por las decisiones de carácter popular que se llevaron a cabo.
Más información Triunviros, Clodio y Cicerón
El acceso al tribunado de Clodio motivó el inicio de una serie de medidas populares que provocaron la disputa con Cicerón y el exilio de éste. César recibía el gobierno de la Galia y Pompeyo era proclamado dictador tras el asesinato de Clodio. El triunvirato se había roto y los anteriores aliados pasaban ahora a ser enemigos.
Más información Guerra de las Galias
Entre el año 58 y 51 a.C. se desarrolla la guerra de las Galias donde César resultará vencedor, subiendo su influencia política en Roma. La conquista supone la anexión de todos los pueblos situados en torno al territorio provincial de la Galia Narbonense hasta alcanzar sus fronteras naturales situando ésta, hacia el Este, en el Rin.
Más información Guerra Civil y Dictadura de César
La candidatura de César al Senado en el año 49 a.C. provocará intensas controversias en Roma. La Curia ordenó al general que depusiese su poder y regresara a Italia. La postura beligerante del Senado -cuyas tropas serían dirigidas por Pompeyo- provocaría la Guerra Civil.
Más información La Guerra Civil romana
La Guerra Civil que vive Roma entre 49 y 45 a.C. enfrentará a Pompeyo como líder del partido senatorial y César como jefe de los populares. Tras tomar César toda Italia en unos meses sin encontrar resistencia, las luchas se celebraron en África, Hispania y Grecia, donde tuvo lugar la definitiva batalla de Farsalia, en la que Pompeyo cayó derrotado. En Munda César venció a los hijos de Pompeyo, poniendo fin a la contienda.
Más información Dictadura de César
En el año 46 a.C. César será nombrado dictador, poniendo en marcha una reforma legislativa de carácter estatal, intentando superar los partidos. La concesión de ciudadanía, la creación de colonias o la ley agraria fueron algunas de las medidas que César dispuso antes de su asesinato en las puertas del Senado en marzo del año 44 a.C.
Más información Alto Imperio: Augusto
Durante el gobierno de Augusto se rompe definitivamente la estructura republicana y se inicia el Imperio, continuando las reformas planteadas por Julio César.
Más información Ascenso político de Octaviano
El asesinato de César (marzo del año 44 a.C.)no había resuelto ningún problema ya que se reanudaron las condiciones para la prolongación de las guerras civiles que tantas vidas habían costado a Roma. Octavio cogerá el testigo reformista del asesinado tras optar a su sucesión.
Más información Sucesión de César
La llegada de Octavio a Roma tras la muerte de César, su padre adoptivo, supondrá el inicio de la carrera política del futuro Augusto. Sus primeros pasos los dará de la mano de Cicerón, en el seno del partido republicano, poniéndose en contra de Marco Antonio.
Más información Guera de Módena
Guerra de Módena
Cuando Marco Antonio dejó de tener derechos sobre el gobierno de la Galia Cisalpina decidió coger las armas, provocando la guerra de Módena de la que salió vencedor el Senado. Octavio presionó a la Curia para ser designado cónsul y desde ese momento cambió su política, tomando a César como inspiración. La ruptura entre Octavio y los republicanos era un hecho.
Más información Segundo Triunvirato
Entre los años 43 y 33 a.C. M. Antonio, Octaviano y Lépido formaron el II Triunvirato para repartirse el gobierno del mundo romano. Durante este tiempo se pondrá en marcha buena parte del programa político de César.
Más información De Filipos a Nauloco
Tras la batalla de Filipos y la toma de Perugia por parte de Octavio, el convenio de Bríndisi selló prácticamente la división del Imperio en dos partes, pues Lépido no constituía ningún peligro. La derrota de Sexto Pompeyo ante Octavio reforzará esta división que, posteriormente, provocará la lucha entre los dos hombres fuertes: Octavio y M. Antonio.
Más información Batalla de Accio
La batalla de Accio (31 a.C.) ganada por Octavio motivará que éste se convierta en el único dueño del poder, iniciándose el Imperio.
Más información Formación del poder imperial
Tras la batalla de Accio, Octavio va a manejar el poder de manera unipersonal pero siempre bajo la apariencia de mantener la legalidad republicana. No en balde, creó un Senado a su medida y ocupó todos los cargos de manera periódica, acaparando nombramientos entre los que destacan el de Augustus, Pontifex Maximus o Pater Patriae. De esta manera, Octavio Augusto se convertía en el dominador político de los romanos sin caer en la trampa de ser nombrado dictador, como le ocurrió a César.
Más información El mundo romano bajo Augusto
Una de las primeras medidas llevadas a cabo por Augusto fue la reducción del número de efectivos militares así como diferentes reformas encaminadas a organizar el ejército de manera más adecuada para la protección de fronteras. Su objetivo fue fijar los límites del territorio imperial frente a barreras naturales (ríos, desiertos o mares). Para reforzar esa medida estratégica, se sirvió del apoyo de Estados amigos, realmente clientes, que con sus propios medios protegieran algunas fronteras más inestables. La tercera medida sería acabar con las bolsas de resistencia de algunos pueblos en el interior de las fronteras como los cántabros o astures.
Más información Administración del Imperio
Entre los objetivos de Augusto estaba la reforma urbanística y administrativa de la ciudad de Roma así como la creación de una nueva administración para Italia y las provincias imperiales. Las provincias senatoriales conservaron durante un tiempo la estructura administrativa de época republicana.
Más información Sociedad
Buena parte de los objetivos de la política de Augusto residían en adaptar a su época el viejo modelo social romano y en potenciar el predominio de las tradiciones occidentales sobre los variados modelos sociales de Oriente. Para ello controló la concesión de derechos de ciudadanía, organizó los requisitos de pertenencia a los órdenes, promulgó leyes para el control de las costumbres o los matrimonios o revitalizó la religión romana tradicional al tiempo que marginaba los cultos orientales.
Más información Sucesión de Augusto
Aunque la propuesta al Senado de leyes sucesorias era contraria a la forma republicana, Augusto no dudó en designar a su sucesor asociándolo al poder. De esta manera, y tras diversas opciones que no fraguaron por la muerte de los diferentes candidatos, Tiberio fue elegido sucesor.
Más información Alto Imperio (II): los Julio-Claudios
Entre los años 14 y 68 los miembros de la familia Julia-Claudia, herederos de Augusto, se suceden en el poder: Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón.
Más información Gobierno de Tiberio
La figura de Tiberio ha sido bastante mal tratada por la historiografía y buena parte de las perversiones que se le atribuyeron vendrían motivadas por su enfrentamiento con el Senado. Además la situación del gobierno que recibió de Augusto no era muy favorable por lo que siempre sale mal parado en la comparativa con su antecesor.
Más información Administración y sociedad
Las reformas llevadas a cabo por Tiberio continuarán la línea trazada por Augusto. Su retiro a Capri provocó que el jefe del pretorio asumiera un importante poder en Roma hasta que fue ajusticiado. Sin embargo, sus medidas tuvieron muy mala prensa entre los romanos pero no se manifiestan de la misma manera los demás ciudadanos del Imperio. Entre sus más importantes logros está el saneamiento del Erario público, las leyes contra el despilfarro, la realización de importantes obras públicas o la regulación del abastecimiento de Roma.
Más información La religión
Uno de los rasgos particulares de la política religiosa de Tiberio se constata en su falta de permisividad ante la práctica de cultos extranjeros en la ciudad de Roma. Como Pontifex Maximus, garantiza la cohesión entre la religión y el poder político.
Más información Defensa de fronteras
La política fronteriza en época de Tiberio tuvo en Germánico a uno de sus principales protagonistas al participar en la pacificación de la revuelta militar en Germania, renovación del pacto con los partos o estancia en Egipto. Tiberio también intervino en Oriente -Tracia, Capadocia-, en las Galias y en el norte de Africa. Aplacadas militarmente las revueltas, la buena gestión económica de Tiberio puso unas bases más sólidas para la pacificación del Imperio.
Más información La tiranía de Calígula
Tras la muerte de Tiberio sin una sucesión preparada, el prefecto del pretorio consigue, bajo la presión de las tropas, que el Senado reconozca a Calígula, hijo de Germánico, como nuevo emperador de Roma.
Más información Nuevas bases del poder
La relación de Calígula con el Senado ofrece dos caras: en un primer momento se manifiesta como un estrecho colaborador con la Curia para posteriormente presentarse como un tirano al que los senadores deben rendir pleitesía. Para contrarrestar se granjeó el apoyo de la plebe a través de continuos espectáculos y reparto de víveres y de los pretorianos al aumentar sus pagas.
Más información Política religiosa
Siguiendo las tradiciones orientales -especialmente la de Egipto-, Calígula pretendió presentarse como divino, comenzando por la propia Roma, lo que chocaba con la mentalidad y tradiciones occidentales así como con la del pueblo judío. Esta divinización del emperador vivo tiene una estrecha relación con la política ya que un poder político de origen divino no podía ser compartido por humanos ni someterse a las críticas de los senadores.
Más información Política fronteriza
La política exterior de Calígula va estar marcada por la ambigüedad ya que actuó de diferentes maneras dependiendo del caso, olvidando la coherencia de sus antecesores. Así en Oriente permitió mayor independencia de los reinos clientes, en Africa se anexionó Mauritania, realizó una campaña innecesaria en Germania y pretendió invadir Britania, llegando a un acuerdo con un rey bretón para evitar la empresa.
Más información Caída de Calígula
El gobierno de Calígula había sido un cúmulo de despropósitos: vació las arcas del Estado y ensayó un modelo de despotismo oriental que sólo podía ser aplicado marginando las más arraigadas tradiciones del Occidente. Esto provocó la conjura del año 41 que acabó con su vida, eligiendo a su tío Claudio como emperador.
Más información Gobierno de Claudio
Tío de Calígula, Claudio accedió al Imperio de mano de los pretorianos cuando contaba con 51 años. Hombre instruido, siguió el modelo político de Augusto interesándose en realizar una sustancial mejora de la administración y resolver serios problemas pendientes de la política exterior y provincial.
Más información Acceso de Claudio al poder
Tras el asesinato de Calígula, su tío Claudio es nombrado emperador por los pretorianos y algunos senadores. Las primeras decisiones de Claudio fueron dirigidas a restableces las buenas relaciones con el Senado. Los juegos personales y políticos de sus mujeres, aliadas con libertos de su confianza, hicieron de la corte de Claudio un entramado de intrigas políticas. Las innovaciones de Claudio en la gestión administrativa condujeron a un distanciamiento mayor de los senadores.
Más información Intervenciones administrativas
El objetivo principal de Claudio fue dotar a la administración de personal especializado y reforzar los mecanismos de control. Para agilizar los trámites administrativos, Claudio reorganizó todos los servicios centrales, ampliando el número de secciones con funciones específicas. Siguiendo el modelo de Augusto, también Claudio intervino activamente en la administración de la justicia.
Más información Política municipal
Los soldados de las tropas auxiliares al ser licenciados y otros muchos provinciales griegos, galos, hispanos e incluso britanos recibieron la ciudadanía romana. Pero Claudio también se sirvió del procedimiento de conceder el derecho de ciudadanía latina a comunidades o particulares como paso previo a su plena integración posterior en la ciudadanía romana.
Más información Creación de nuevas provincias
Bajo Claudio, pasaron a ser nuevas provincias imperiales: Tracia, Licia, Judea, los Alpes Grayos, las dos Mauritantas y Britania. Al frente de esas nuevas provincias, Claudio situó como gobernadores a procuratotes de rango ecuestre. Y para consolidar la presencia romana, cada nueva provincia recibió contingentes de ciudadanos romanos, que fueron asentados en colonias o municipios. En el año 54 muere Claudio posiblemente envenenado por su esposa Agripina. Con la muerte de Claudio, entraba en crisis el enorme poder de los libertos imperiales.
Más información Gobierno de Nerón
Gracias a las gestiones de su madre y del grupo de senadores, caballeros y libertos que contaron con el apoyo de la guardia pretoriana, Nerón es elegido emperador a los 17 años, sucediendo a Claudio.
Más información Nuevas formas de gobierno
Los primeros años del gobierno de Nerón han sido calificados por la tradición senatorial como el quinquenio áureo. Séneca y Burro, consejeros pero los auténticos gobernantes, condujeron a Nerón por el camino de la colaboración con el Senado. Superado el quinquenio, Nerón se fue liberando de sus tutores. Su vasta formación cultural le permitió construir su propio modelo político. Desde el 59 d.C., Nerón se vuelca en el intentó de helenizar culturalmente a Roma y al Occidente.
Más información Incendio de Roma
El distanciamiento del Senado motivó que Nerón buscara apoyo popular. Con motivo del incendio de tres de los catorce barrios de Roma, organizó las medidas de protección de las familias que habían quedado sin hogar ni medios de vida. Para calmar los ánimos y contar con un chivo expiatorio, se culpó a los cristianos de haber provocado el incendio.
Más información Las finanzas
Cuando el exceso de gastos puso en apuros a las arcas del Estado, Nerón acudió a dos medidas económicas de gran alcance: la apropiación por el Fisco de las fortunas de senadores ricos, condenados por lesa majestad y, en segundo lugar, la reforma monetaria.
Más información La cuestión judaíca
Los judíos cultos y helenizados fueron partidarios de la colaboración con Roma mientras las capas empobrecidas de la población odiaban por igual a la oligarquía judía que a los romanos. Algunos sectores de los judíos antirromanos, se habían organizado en bandas armadas para luchar contra las tropas romanas de ocupación. El 66 d.C. fueron confiscados por Roma los tesoros del Templo y la rebelión se extendió a todos los territorios de Judea. Vespasiano fue el encargado por Nerón para sofocar la revuelta.
Más información Las fronteras
El ejército romano tuvo que intervenir en tres conflictos fronterizos durante el imperio de Nerón: el mar Negro, Armenia y Britania.
Más información Año de los cuatro emperadores
Entre los años 68 y 69 Roma ve como cuatro emperadores acceden al trono, impulsados por los pretorianos o las legiones: Galba, Otón, Vitelio y Vespasiano. Se pone de manifiesto claramente la participación de los gobernadores de provincias imperiales con mando sobre tropas en la elección del nuevo emperador. La familia Julio-Claudia se alejará definitivamente del poder.
Más información Italia y las provincias bajo los Julio-Claudios
Durante los Julio-Claudios se fue paulatinamente rompiendo el modelo político impuesto por Augusto y, de modo particular, en la relación entre Italia y las provincias occidentales. Los italianos emigrados a estas provincias participarán cada vez más activamente en la vida política, económica y cultural de Roma.
Más información Evolución social
Evolución social
Ciudadanos romanos, ciudadanos latinos, peregrinos, libertos y esclavos formaban la división social del Imperio en la época de los Julio Claudios. No todos los ciudadanos son iguales ante la ley pero los grupos dependientes consiguen una mejora sustancial de sus condiciones. En número de libertos empiezan a asceder y el sistema esclavista sufre una transformación favorable para el sometido.
Más información Nuevas tendencias ideológicas
La influencia de Oriente será la pauta principal en el terreno ideológico durante la época de los Julio-Claudios. El desarrollo del cristianismo y del estoicismo marcarán este primer siglo en el que se manifiesta un ligero cambio en las concepciones religiosas del Imperio.
Más información Alto Imperio (III): Flavios y Antoninos
El principado de los Flavios (69-96) se caracteriza por la coherencia, el buen sentido y el apego a la realidad. Vespasiano, Tito y Domiciano no formaban parte de una familia de rancio abolengo ni de grandes riquezas. La asociación en el gobierno del sucesor y la participación contemporánea de los tres en diversas magistraturas hace difícil separar, en todos los casos, las aportaciones particulares de cada uno. Les sucederán los Antoninos (96-193)nombre genérico de los emperadores Nerva, Trajano, Adriano, Antonino Pío, Marco Aurelio y Cómodo, cuya política se puede considerar sucesoria de los Flavios en numerosos aspectos.
Más información El poder imperial
En los años finales del siglo I las condiciones estaban maduras como para que Vespasiano y sus hijos se presentaran como auténticos gobernantes dotados del poder supremo. El régimen era el de una monarquía en el sentido etimológico del término con viejas herencias de formas republicanas. Los senadores perdieron casi toda su capacidad política para ser destinados a responsabilidades administrativas.
Más información Senadores y caballeros bajo los Flavios
Con los Flavios podemos observar cierta reforma en la constitución del Senado al participar muchos provinciales de Occidente, constituyendo el clan de mayor peso en la Curia lo que posiblemente condujo al asesinato de Domiciano. Los caballeros sustituyeron a los libertos imperiales en todos los altos cargos de la administración central.
Más información Roma en la política flavia
Como había hecho Augusto, los Flavios llevaron a cabo una ingente tarea constructiva en Roma. Acueductos, templos, el Coliseo, depósitos de almacenamiento fueron levantados por los emperadores para embellecer la capital que contaba con casi un millón de habitantes. Se continuó con el reparto de dinero y alimentos entre la plebe y los pretorianos vieron recortado su poder.
Más información Las provincias en la política flavia
Uno de los objetivos de la política flavia reside en mantener una atención continuada y coherente destinada a la equiparación progresiva de las provincias a Italia. La concesión del estatuto de municipio latino convertía en latina a una gran parte de la población libre de las ciudades. Cada nuevo municipio se organizaba a semejanza de los municipios de Italia y todos contaban con una ley que reglamentaba su funcionamiento.
Más información Economía y fiscalidad de los Flavios
La agricultura en la época de los Flavios estará caracterizada por la recuperación estatal de tierras en manos de particulares y la preocupación por conseguir la explotación máxima de todas las tierras cultivables. Se perfecciona la gestión de los distritos mineros explotados directamente por el Estado al desaparecer de ellos los publicanos y encargarse a libertos imperiales la gestión de los mismos. La recuperación real del Tesoro público fue el resultado no tanto de los nuevos impuestos como de una eficaz gestión fiscal y de una mejora general de la economía.
Más información Ejército y campañas militares
Para abaratar gastos militares, entre los Flavios comenzó a ser más frecuente el reclutar soldados en áreas próximas a los campamentos al tiempo que se licenciaron legiones. Las campañas militares realizadas fueron tres: la judaica, la galo-germana y la británica.
Más información Política y cultura bajo los Flavios
El Coliseo, monumento destinado al uso del pueblo, y el Palacio imperial son dos de las mejores obras que ilustran la ideología del poder flavio. Su liberalismo político permite cualquier manifestación cultural, apoya a aquéllas como la ciencia jurídica que son útiles para la formación de cuadros de gobierno, pero se enfrenta con sus mejores armas contra el uso del pensamiento con fines de ruptura del consenso social o de oposición política.
Más información Imperio durante los Antoninos
Cortada la línea flavia con el asesinato de Domiciano, quien había cometido el error de no asociar a nadie a su gobierno, se crea pronto un nuevo modelo basado en la adopción. La adopción equivalía a un anuncio público del sucesor, frecuentemente consensuado en el consejo privado de cada emperador.
Más información Gobierno de Nerva
Durante dos años (96-98) Nerva es nombrado emperador tras el asesinato de Domiciano. Sus primeras medidas estuvieron relacionadas a satisfacer a los descontentos. Los senadores recuperaron su prestigio y volvieron del destierro los exilados. El programa de los alimenta y la compra de tierras por parte del Estado para su distribución será continuado por su sucesor Trajano.
Más información El Imperio de Trajano
Miembro de una familia procedente de Italica, Trajano continúa la línea establecida por Nerva en cuanto a las relaciones con el Senado, considerando a la cámara el máximo órgano consultivo.
Más información Administración trajana
Por primera vez, durante el imperio de Trajano se advierte un intento de utilizar el aparato administrativo para equilibrar la desigualdades entre Italia y las provincias, sin distinción entre las orientales y las occidentales. A través de la institución de los alimenta y de la construcción de obras públicas Trajano consiguió restituir el esplendor de Italia, al igual que ocurrió con las provincias.
Más información Guerras de conquista
La frontera oriental y la Dacia serán las zonas de expansión del Imperio Romano en época de Trajano. Las riquezas aumentaron considerablemente gracias a estas campañas.
Más información El gobierno de Adriano
La adopción de Adriano por parte de Trajano permitió a aquel acceder al imperio en el año 117. Ya había ocupado importantes cargos anteriormente, desde los que pudo iniciar una cierta hostilidad con los senadores, hostilidades que aumentarán por las reformas administrativas que Adriano llevará a cabo.
Más información Administración central
Durante el imperio de Adriano se llevará a cabo una intensa reforma administrativa, siendo uno de sus elementos más destacados la división de Italia en distritos.
Más información Las provincias bajo Adriano
Los viajes de Adriano son una muestra del interés del emperador por conocer de cerca los problemas de las provincias y darles soluciones reales sobre el terreno. Su política provincial atendió a la mejora de las condiciones económicas (incremento de la agricultura y la minería) que revirtieron en el desarrollo de las infraestructuras y la construcción de edificios. Adriano, fascinado por la cultura griega, intentó revitalizar el esplendor de la antigua Atenas.
Más información Defensa fronteriza
La política antiexpansionista diseñada por Adriano, contraria a la de Trajano, será especialmente favorable para el desarrollo económico de las ciudades. Esta política defensiva refleja gráficamente la concepción de un Imperio culto, urbano y rico frente a un mundo de bárbaros.
Más información El Imperio con Antonino Pío
El sucesor de Adriano, Antonino Pío, procedía de la Galia y era miembro de una rica e influyente familia. Su riqueza le permitirá hacer donaciones a la plebe y al ejército de su propia fortuna. Antonino cambiará la estructura senatorial y más de la mitad de los senadores provinciales procedía ahora de Oriente.
Más información Administración central
La política administrativa de Antonino sigue la misma línea que la de sus antecesores, destacando las medidas destinadas a un mejor trato de los esclavos. La gestión fiscal debió ser positiva habida cuenta del saldo del Tesoro tras el fallecimiento del emperador.
Más información Las provincias
Mientras que en las provincias occidentales se manifiesta una tendencia al latifundio, en oriente el pequeño y mediano campesino encuentran condiciones de vida aceptables por las amplias posibilidades de consumo de las ciudades. Continúa la paz de reinados anteriores excepto en Britania y Mauritania.
Más información El gobierno de Marco Aurelio
Miembro de una familia procedente de Hispania, Marco Aurelio puso en marcha la corregencia al asociar al gobierno primero a su hermano y después a su hijo.
Más información Administración del Imperio
El gobierno de Marco Aurelio supuso una mayor autonomía y más competencias para el Senado. Los ingresos fiscales disminuyen pero se mantienen los compromisos con la plebe romana. Se gasta menos en construcciones públicas, el Fisco es más eficaz aún que en el pasado y no se está en momentos económicos de expansión; las ciudades del imperio manifiestan signos de austeridad pero aún no de crisis.
Más información Peligros en las fronteras
Los pueblos fronterizos inician su presión durante el gobierno de Marco Aurelio, produciéndose numerosos conflictos: los partos, los pueblos danubianos, Mauritania o la frontera renana. Este conjunto de conflictos manifiesta los defectos de la fórmula de un Imperio cerrado y rico, de espaldas a pueblos incultos y más pobres.
Más información El gobierno de Cómodo
El gobierno de Cómodo (180-192), el sucesor de Marco Aurelio, se nos presenta como una dura pugna con el grupo senatorial al apoyarse el Emperador en los caballeros para las tareas gubernamentales. En ese marco de hegemonía de los caballeros, hay que entender la línea pacifista con la que se inicia y continúa el régimen de Cómodo.
Más información Roma y las provincias
La situación económica del Imperio durante el gobierno de Cómodo no debió ser muy buena como demuestran las hambrunas de la propia Roma, la revuelta de Materno o las devaluaciones monetarias. A pesar de todo, las ciudades de Oriente y de Africa mantenían mejores condiciones de vida.
Más información Las ciudades
Roma se sirvió de la ciudad como instrumento para organizar los territorios y como medio de control y, a la vez, de integración de las poblaciones de Italia y de las provincias. Cada ciudad contaba con un territorio dentro del cual había otros núcleos urbanos menores, aldeas, que dependían administrativamente del núcleo central o ciudad. La extensión de esos territorios era muy variada.
Más información Organización administrativa urbana
La época de los Antoninos se corresponde con el auge de la municipalización de África y en otras provincias como Hispania, con los resultados de la labor municipalizadora iniciada con César-Augusto e impulsada definitivamente con los Flavios. La base de esta organización municipal serán las ciudades griegas. Los magistrados municipales estaban obligados a hacer declaración de bienes antes de ocupar su cargo.
Más información Religión y ciudad
Desde los Flavios, se generaliza el culto al emperador. A los emperadores difuntos y divinizados, divi, se añadieron todos los miembros de la familia imperial desde los Antoninos, momento en el la ideología del culto imperial se fue tiñendo de otras manifestaciones religiosas. El cristianismo empieza a incidir en las burguesías municipales e intelectuales.
Más información Ciudad y economía
El apogeo que viven las ciudades desde los Flavios hasta los Antoninos debemos buscarlo en el desarrollo del comercio y de la artesanía. La mejora de la red viaria, especialmente atendida desde Trajano, estimuló el comercio interior. Los comerciantes se organizaron en asociaciones llamadas collegia.
Más información Alto Imperio (IV): los Severos y la anarquía militar
Alto Imperio (IV): los Severos y la anarquía militar
Con los últimos Antoninos, ante todo desde Marco Aurelio, hay manifestaciones de la sociedad romana y de la forma de gobierno que preludian la era de los Severos. A partir de la muerte del último Severo, la quiebra del antiguo sistema es mucho más evidente.
Más información Los Severos
La muerte de Cómodo provocará una profunda crisis donde Senado, pretorianos y ejército se disputarán el poder. El ejército provincial se impondrá sobre sus rivales.
Más información Guerra Civil
La muerte de Cómodo motivó que diversos generales se proclamaran emperador con el apoyo de sus tropas. El más fuerte de ellos fue Septimio Severo que se impuso a Pescenio Niger en oriente y a Clodio Albino en occidente, saliendo vencedor de la guerra civil. La contienda no sólo reforzó la posición militar de Septimio y le brindó la ocasión de eliminar a los adversarios, sino que fue aprovechada para introducir reformas administrativas y mejorar su hacienda privada.
Más información Tras la Guerra Civil
Entre los años 197 y 235 encontramos cinco emperadores en Roma reunidos bajo el nombre de los Severos: Septimio Severo, Caracalla, Macrino, Heliogábalo y Alejandro Severo. Las luchas en las fronteras y el creciente poder de sus mujeres a través del consejo privado serán los elementos de unificación de estos gobiernos.
Más información Administración central
Las tensiones fronterizas motivan que durante el gobierno de los Severos el ejército adquiera un mayor peso político y social, siendo los caballeros la clase social más beneficiada. Las relaciones con el Senado no fueron malas aunque cada vez tenía menor peso político. Caracalla concede la ciudadanía romana a la población libre del Imperio.
Más información Política religiosa
La tendencia al sincretismo se acentúa durante el gobierno de los Severos aunque los emperadores reconozcan la validez de otros dioses. El cristianismo va aumentando su número de fieles y los cristianos comienzan a tener una organización sólida.
Más información Medidas económicas
Los gastos militares durante el gobierno de los Severos aumentaron considerablemente lo que motiva un aumento de los impuestos. Septimio Severo y Caracalla se apropiaron de los grandes dominios senatoriales para aumentar los ingresos. Cuando los impuestos regulares y los extraordinarios no fueron suficientes, la administración no dudó en exigir otras aportaciones especiales, aumentando al tiempo las medidas humanitarias.
Más información Anarquía militar
La presión de los bárbaros en las fronteras del Imperio motivará que el ejército asuma el poder a partir del 235, momento conocido como la Anarquía militar. La lucha contra los enemigos del Imperio será la prioridad única de estos emperadores-soldados que serán sacrificados por la defensa del Imperio.
Más información Emperadores soldados
Entre los años 235 y 300 la única prioridad de Roma será la defensa de las fronteras del Imperio ante los continuos ataques de poblaciones exteriores, en una situación de absoluta anarquía. El ejército ocupa el papel prioritario en la política del momento, eligiendo a los emperadores que consideran más cualificados para la guerra.
Más información Transición al Bajo Imperio
Una revuelta militar en el año 284 salvó al Imperio cuando se proclamó Diocleciano emperador, momento en el que se abrió un período durante el cual se logró tanto la superación de la larga crisis política anterior como la elaboración de una serie de medidas que afectarían directamente a la evolución del mundo romano bajo-imperial. La crisis económica y religiosa serán nuevas complicaciones que unir a la tensión militar.
Más información Sistema tetrárquico
Una de las principales reformas incorporadas por Diocleciano será el establecimiento de la tetrarquía. Dos augustos y dos césares gobiernan el Imperio, sistema colegiado que asignaba a cada uno una zona. Maximiano fue dotado con el título de augusto mientras Constancio y Galerio eran nombrados césares.
Más información Reformas de Diocleciano
Los objetivos de las reformas planteadas por Diocleciano serán el saneamiento de la economía, la defensa de la integridad del imperio e incluso la defensa de la romanidad, por lo que se explica la persecución de los cristianos. Estas reformas encajaban entre sí como las piezas de un rompecabezas.
Más información Reforma militar
Las nuevas necesidades del Imperio motivaron que Diocleciano pusiera en marcha un amplio programa de reformas militares entre las que destacan la ampliación de los efectivos militares, la creación de ejércitos móviles, la remodelación de las fronteras, la constitución de unidades militares formadas por campesinos voluntarios o el aumento de impuestos para mantener la enorme maquinaria bélica.
Más información Reformas económicas
Las reformas monetarias emprendidas por Diocleciano motivarán el desprecio de la moneda de cobre por lo que se publicó un edicto de precios máximos para evitar el aumento desproporcionado de precios. El impuesto de capitación se convertirá en el principal impuesto mantenedor de la maquinaria estatal al aumentar el número de tierras cultivadas al tiempo que fomentaba el aumento de la población servil.
Más información Tetrarquía sin Diocleciano
La abdicación de Diocleciano y Maximiano supuso que los dos césares Galerio y Constancio ocuparan el cargo de augusto y eligieran a dos nuevos césares: Maximino Daza y Severo. La muerte de Constancio provocó la entrada en escena de su hijo Constantino y de Majencio, iniciándose una época de tensión y lucha entre los diversos tetrarcas. La colaboración y la concordia que debía presidir la gestión de los tetrarcas se había roto sin remedio.
Más información Bajo Imperio
La etapa correspondiente a la abdicación de Diocleciano en el año 305 y la destitución de Rómulo Augústulo como emperador de Occidente en el año 476 se denomina Bajo Imperio.
Más información Constantino dueño único del Imperio
La derrota de Majencio en el Puente Milvio supondrá que Constantino se convierta en emperador de Occidente (312). Las primeras medidas que adoptó fueron: la disolución de la guardia pretoriana, el refuerzo de sus relaciones con Licinio y la promulgación en Occidente de la libertad religiosa. En el 324 Constantino, tras derrotar a Licinio, reunificó de nuevo el Imperio después de cuarenta años de haber estado dividido. Asoció a tres de sus hijos al imperio designándoles césares recuperando el espíritu de la tetraquía de Diocleciano.
Más información Conversión y política religiosa de Constantino
Desde el año 313 Constantino se acerca a la Iglesia cristiana, llegando a ser bautizado en el lecho de muerte. Potenció y utilizó el poder de la Iglesia lo que le reportó amplias ventajas: le procuró nuevas bases en las que asentar su poder y actuó manteniendo el consenso que todo poder político necesita. Las disposiciones que Constantino adoptó a favor de la Iglesia se concentran en dos campos especialmente importantes: las concernientes al patrimonio y las referidas a la jurisdicción eclesiásticos.
Más información Sucesión de Constantino: Constancio II
Tras la muerte de Constantino (337) se produjo una encarnizada lucha por el poder entre los césares que había nombrado. Constantino II se puso al frente del Imperio Occidental y Constancio II del Oriental. A Constante, el menor, le encomendaron el gobierno del Ilírico. Los enfrentamientos continuaron hasta que Constacio II se impuso, nombrando césar a Juliano.
Más información Relaciones Iglesia-Estado
La política religiosa en tiempos de Constancio II estuvo en manos del emperador si tenemos en cuenta que su participación le llevó a controlar las reuniones eclesiásticas y los concilios o a actuar de hecho como jefe máximo de la Iglesia. Su participación en el conflicto entre ortodoxos y arrianos llegó a comprometer la unidad del Estado.
Más información Juliano césar y Juliano emperador
En el año 355 Juliano es nombrado césar por Constancio y enviado a las galias para sofocar una serie de revueltas bárbaras. Allí pudo demostrar su habilidad política y militar que le valió para ser nombrado emperador en 361, a la muerte de Constancio. Enseguida emprendió una tarea de organización y depuración, intentando resucitar el antiguo espíritu republicano. Posiblemente aquí resida su principal error.
Más información La cuestión religiosa
La actitud de Juliano, quien había afirmado sus creencias paganas, respecto al cristianismo fue inicialmente de tolerancia. Pero en los veinte meses que duró su gobierno se puso de manifiesto la imposibilidad de convivencia pacífica entre estas dos religiones. Después de la muerte de Juliano no volvió a haber ningún otro emperador pagano.
Más información Política social de los Constantínidas
La economía va a estar dirigida por el Estado durante el gobierno de los Constantínidas. Este intervencionismo se manifiesta también en la organización de la actividad laboral del Imperio. Uno de los rasgos más novedosos respecto a la sociedad de esta época es el papel que el clero cristiano va a jugar en el campo de la asistencia social y su constitución como gran propietaria de bienes.
Más información Reformas fiscales y administrativas
Durante la época de los Constantínidas se van a producir importantes cambios fiscales, monetarios y administrativos que afectarán a todo el Bajo Imperio.
Más información La dinastía Valentiniana en el poder
El fallecimiento de Juliano supuso el ascenso al poder de Joviniano. Su gobierno duró escasos meses y fue sucedido por Valentiniano, interesado por preservar los derechos del Estado y abandonar los conflictos religiosos. Eligió a su hermano Valente como augusto oriental, siendo una decisión equivocada ya que Valente carecía de dotes políticas o militares. El Imperio se dividió en dos partes y Valente tuvo que afrontar la invasión de grupos de bárbaros que le derrotaron en Andrinópolis.
Más información El Imperio occidental con Valentiniano I
El gobierno de Valentiniano supuso el último empeño mantenido con una tenacidad admirable no sólo de salvaguardar el imperio Occidental, sino de relanzarlo. Militarizó todas las funciones administrativas, incluso las civiles, e incrementó el ejército, contando incluso con soldados bárbaros. Uno de sus mayores intereses será incrementar los ingresos fiscales por lo que se enfrentó con el Senado. Tras su muerte se asiste a un empeoramiento de la crisis que ya será imparable.
Más información Graciano, Valentiniano II y Teodosio.
Durante el reinado de Graciano se disfrutó de una época de paz en las fronteras, gracias a la sabia política defensiva de su padre. Su política religiosa parece determinada también por influencias externas. Así, en el 379, publicaba un edicto de tolerancia religiosa. Ese año nombró a Teodosio augusto de Oriente mientras Valentiniano II recibió la Iliria. Los ataques de los bárbaros son constantes y en el año 382 Teodosio permite la instalación de los visigodos entre el Danubio y los Balcanes.
Más información Fin de Graciano y usurpación de Máximo
La política religiosa pro cristiana desplegada por Graciano provocará la proclamación de Máximo como emperador en Britania. Máximo avivó el sentimiento de romanidad frente a los bárbaros y procedió a la fortificación del limes del Rin. Teodosio intervino y se dirigió a Italia pero prefirió negociar con Máximo, repartiéndose el Imperio. La evacuación de parte de Britania y la cuestión prisicilianista desencadenarán los acontecimientos que conducirán a la derrota de Máximo en el año 388.
Más información Teodosio: restablecimiento de la unidad imperial
Tras el triunfo ante Máximo, Teodosio recluyó a Valentiniano II en la Galia. La muerte del segundo motivó la proclamación de Eugenio y su dominio sobre las Galias, Italia e Hispania. En el año 394 se enfrentan ambos saliendo Teodosio victorioso, reunificando el Imperio. Desde ese momento el Imperio se postergará ante los dictados de la Iglesia, proclamando Teodosio en el año 391 una sentencia mortal contra el paganismo.
Más información Fin del Imperio Romano Occidental
Fin del Imperio Romano Occidental
A la muerte de Teodosio se divide el Imperio entre sus dos hijos: oriente para Arcadio y occidente para Honorio. La corriente de pensamiento cristiana que está contra la guerra se impone y los bárbaros van ocupando cada vez más territorios y funciones administrativas. Continuas oleadas de bárbaros penetran en la parte occidental, trasladando la capital a Rávena. La fisura entre ambos Imperios era un hecho irreversible. En esta situación, los estados bárbaros surgidos dentro del Imperio se consolidaban y Alarico llega a saquear Roma durante tres días. En el año 476 Odoacro destrona a Rómulo Augústulo, último emperador romano de Occidente.
Más información Consideraciones sobre la caída del Imperio Occidental
Los continuos ataques a las fronteras occidentales serán la principal causa de la caída de ese sector del Imperio mientras que la zona oriental pudo mantener casi intactas sus fronteras. Ahora bien el Imperio Romano de Oriente vivirá en continua amenaza por las constantes querellas religiosas e intrigas palaciegas. Tres causas esenciales propiciaron la ruina del imperio occidental: las invasiones de los pueblos bárbaros, los problemas internos y la influencia eclesiástica.
Más información El patronato y los grandes dominios
Los pequeños y medianos propietarios, indefensos y agobiados por los impuestos, se colocaban bajo la protección de un gran propietario quien, a su vez, los despojaba de todos o parte de sus bienes a cambio de dicha protección. Esta institución del patronato tuvo para el Estado consecuencias fatales ya que suponía una evasión de bienes fiscales muy considerable. La figura del defensor plebis constituyó una forma inteligente de defensa de los colonos y pequeños propietarios frente a los abusos de los poderosos, la mayoría patronos.
Más información El papel de la Iglesia
La Iglesia oficial, gran propietaria de dominios y dotada de una serie de privilegios que aumentaban su autonomía frente al Estado (como la capacidad judicial otorgada a los obispos), no fue ajena tampoco al hundimiento del Imperio. Las disensiones internas de la Iglesia durante el bajo Imperio tuvieron no sólo repercusiones puramente religiosas, sino que en ellas arrastraron a aquellos que se habían convertido en su brazo secular
Más información Roma: la Monarquía
A pesar de las complicaciones existentes para los historiadores alrededor de los orígenes de Roma, atendiendo a las numerosas leyendas y mitos sobre el tema, se considera que el año 754 a.C. sería el de la fundación de la ciudad, estableciéndose una monarquía similar a las tiranías griegas del momento.
Más información La formación de la República Romana
Los primeros años de la República presentan muchas incertidumbres. Tras la caída de Tarquino y la monarquía se designó un praetor maximus que dirigiría la República. Posteriormente encontramos la institución del consulado, en un primer momento ocupado también por plebeyos hasta que los patricios controlen todos los mecanismos de la vida política.
Más información Expansión romana
Las raíces del imperialismo romano están en la propia estructura de la sociedad romana y en la evolución posterior de ésta, en la que, a factores políticos, se fueron añadiendo otros de carácter económico, psicológico, diplomático, etc... que marcaron la política exterior de Roma y posibilitaron que se convirtiese en una potencia dominadora de medio mundo. El impulso que llevó a Roma a la conquista del mundo mediterráneo y las formas que adoptó dicha conquista están íntimamente ligados a las instituciones republicanas, responsables de su orientación y de los medios para llevarla a cabo.
Más información República Romana: desde los Gracos a la fase final
El período comprendido entre 133 y 27 a.C. será una etapa tremendamente convulsa en la historia de Roma. El fortalecimiento del poder personal conducirá a los triunviratos y las dictaduras de César o Augusto, suponiendo el fin de la República.
Más información Alto Imperio: Augusto
Durante el gobierno de Augusto se rompe definitivamente la estructura republicana y se inicia el Imperio, continuando las reformas planteadas por Julio César.
Más información Alto Imperio (II): los Julio-Claudios
Entre los años 14 y 68 los miembros de la familia Julia-Claudia, herederos de Augusto, se suceden en el poder: Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón.
Más información Alto Imperio (III): Flavios y Antoninos
El principado de los Flavios (69-96) se caracteriza por la coherencia, el buen sentido y el apego a la realidad. Vespasiano, Tito y Domiciano no formaban parte de una familia de rancio abolengo ni de grandes riquezas. La asociación en el gobierno del sucesor y la participación contemporánea de los tres en diversas magistraturas hace difícil separar, en todos los casos, las aportaciones particulares de cada uno. Les sucederán los Antoninos (96-193)nombre genérico de los emperadores Nerva, Trajano, Adriano, Antonino Pío, Marco Aurelio y Cómodo, cuya política se puede considerar sucesoria de los Flavios en numerosos aspectos.
Más información Alto Imperio (IV): los Severos y la anarquía militar
Con los últimos Antoninos, ante todo desde Marco Aurelio, hay manifestaciones de la sociedad romana y de la forma de gobierno que preludian la era de los Severos. A partir de la muerte del último Severo, la quiebra del antiguo sistema es mucho más evidente.
Más información Transición al Bajo Imperio
Una revuelta militar en el año 284 salvó al Imperio cuando se proclamó Diocleciano emperador, momento en el que se abrió un período durante el cual se logró tanto la superación de la larga crisis política anterior como la elaboración de una serie de medidas que afectarían directamente a la evolución del mundo romano bajo-imperial. La crisis económica y religiosa serán nuevas complicaciones que unir a la tensión militar.
Más información Bajo Imperio
La etapa correspondiente a la abdicación de Diocleciano en el año 305 y la destitución de Rómulo Augústulo como emperador de Occidente en el año 476 se denomina Bajo Imperio.
Más información Cartago
Creada como factoría por los fenicios en el I milenio a.C., el desarrollo de Cartago como potencia comercial y política se produce a partir del siglo VI a.C. Su expansión alcanza a la costa levantina de la península Ibérica, Sicilia, Ibiza, Cerdeña o diversas islas cercanas a Malta. Su vocación marinera y comercial les llevó hasta las costas de Bretaña.
Más información Primera Guerra Púnica
La primera Guerra Púnica fue la primera guerra extra-itálica de Roma. Se inicia en el 265 a.C. y dura 24 años. La causa la encontramos en la solicitud de ayuda por parte de los mamertinos en su enfrentamiento con los siracusianos. Roma apoya a los primeros y Cartago a los segundos. La victoria romana permitirá la conversión de Sicilia en provincia romana.
Más información Segunda Guerra Púnica
La Segunda Guerra Púnica se libró entre cartagineses y romanos por el control del Mediterráneo occidental. Sus principales protagonistas serán Aníbal y Escipión Africano. El primero vencerá en Cannas pero la victoria definitiva será para el romano en Zama.
Más información Motivos del conflicto
La prepotencia de Roma tras la primera Guerra Púnica y el expansionismo cartaginés en la Península Ibérica se consideran como los motivos principales del conflicto. La causa inmediata será el ataque de Aníbal a Sagunto (219 a.C.)
Más información La lucha entre Aníbal y Roma
En 218 a.C. Aníbal atraviesa los Alpes con su ejército y domina casi toda la península Itálica tras la batalla de Cannas (216 a.C.). La reacción romana sería encabezada por Escipión el Africano que consiguió llevar la guerra a Hispania y cortar los suministros del ejército de Aníbal. En el año 202 a.C. tenía lugar la batalla de Zama que daba la victoria a Roma y suponía el final del conflicto.
Más información Tercera Guerra Púnica
Tras la segunda Guerra Púnica, Cartago se comprometió a no emprender ninguna guerra sin el permiso de Roma. Pero el acoso de Massinisa provocó la respuesta cartaginesa lo que motivó la intervención de Roma a través de Escipión Africano. En la primavera del año 146 a.C. la ciudad fue abandonada y arrasada. Antes del 130 a.C. Roma se convertía en la única e indiscutible potencia del Mediterráneo.
Más información Guera Ilírica
Roma actuó en esta ocasión no sólo en defensa de sus intereses, sino también por la necesidad de reafirmar su posición de potencia hegemónica y mantener un cierto control sobre sus vecinos. El conflicto estalla en el año 230 a.C.; la flota romana no encontró grandes dificultades para apoderarse de Issa y de Faros y castigar duramente a las poblaciones del sur de Iliria. En el 228 a.C. se firma la paz, estableciendo Roma un protectorado sobre la zona.
Más información Segunda Guerra Macedónica
La política expansionista de Filipo V y de Antíoco III va a motivar la solicitud de ayuda de Rodas y Pérgamo a Roma. Tras una primera victoria romana que obligó a Filipo a negociar, la ruptura de las conversaciones motivó la definitiva batalla de Cinoscéfalos (197 a.C.) que trajo la paz y la independencia a Grecia.
Más información Liberación de Grecia
Tras derrotar a Filipo V, Roma consideró que la mejor situación para Grecia era el restablecimiento de la libertad para las polis, incapaces de transformarse en una gran potencia. En el año 194 a.C. todos los soldados romanos salen de la Hélade, lo que permitirá el desarrollo de un excelente caldo de cultivo para las luchas intestinas.
Más información Guerra contra Antíoco III
El acuerdo de Filipo V y Antíoco para repartirse Egipto contó con la repulsa de Roma. En el año 193 a.C. Roma y Antíoco fijan la frontera entre ambos imperios pero el seleucida se convertirá en el líder de los sentimientos antirromanos de la época. La lucha entre ambos se decantará del lado romano, obteniendo la victoria definitiva en Magnesia del Sípilo (189 a.C.).
Más información Tercera Guerra Macedónica
La política senatorial romana no tardó en suscitar descontentos en Grecia, descontentos que fueron liderados por Perseo de Macedonia. En el año 171 a.C. Roma se lanzó contra Macedonia siendo la primera etapa de la guerra bastante dura para los romanos hasta conseguir la definitiva victoria en las cercanías de Pidna. Tras la victoria, Macedonia era dividida en cuatro regiones, paso previo a convertirse en provincia romana (148 a.C.).
Más información Sumisión de Grecia
Las numerosas revueltas antirromanas -especialmente en Macedonia, la Liga Aquea y Corinto- que se producen en Grecia durante la mitad del siglo II motivarán que Roma acabe definitivamente con la soberanía y la libertad de Grecia.
Más información Guerra contra Mitrídates
Entre los años 89 y 63 a.C. Roma y el reino del Ponto dirigido por Mitrídates VI mantendrán una encarnizada guerra entre cuyas causas encontramos la personalidad del rey, los deseos de fortalecer su poder expandiendo su zona de influencia o la presión fiscal que Roma sometía a la provincia de Asia. Mitrídates buscó el apoyo del pueblo asiático lo que motivó que la aristocracia se decantara por Roma, desnivelando hacia esta última la balanza. Pompeyo venció al rey del Ponto, convirtiendo el reino en provincia romana.
Más información Conquista de la Galia Cisalpina
Entre el 236 y el 177 a.C. se produjo la conquista del territorio norte de la península itálica, derrotando a los belicosos galos que habitaban en aquella zona. La victoria romana fue asegurada con la creación de dos importantes colonias latinas, Cremona y Plasencia, con seis mil colonos cada una.
Más información Guerra de las Galias
Entre el año 58 y 51 a.C. se desarrolla la guerra de las Galias donde César resultará vencedor, subiendo su influencia política en Roma. La conquista supone la anexión de todos los pueblos situados en torno al territorio provincial de la Galia Narbonense hasta alcanzar sus fronteras naturales situando ésta, hacia el Este, en el Rin.
Más información Motivos del conflicto
La prepotencia de Roma tras la primera Guerra Púnica y el expansionismo cartaginés en la Península Ibérica se consideran como los motivos principales del conflicto. La causa inmediata será el ataque de Aníbal a Sagunto (219 a.C.)
Más información Conquista de Hispania
Las riquezas de la península Ibérica motivarían la conquista romana, tras haber llegado al territorio con motivo de la segunda Guerra Púnica. Los indígenas hispanos se someterán con dificultad, encontrándose casos de resistencia relevantes como Viriato o Numancia. Tras la división del territorio conquistado en dos provincias -Ulterior y Citerior- se puso en marcha un ambicioso programa de fundación de ciudades ya que el entorno urbano aún no estaba muy desarrollado en la zona.
Más información Gobierno de Sertorio en Hispania
Aglutinando a las fuerzas anti-silanas, Sertorio se estableció en Hispania donde organizó un gobierno de inspiración popular. La provincia se convirtió en un Estado autónomo, favoreciendo la romanización de la Península.
Más información MAGNA GRECIA ·Magna Grecia antes de Roma
Magna Grecia
La zona sur de Italia y la isla de Sicilia serán los lugares donde diferentes polis griegas establecerán sus colonias, iniciándose un estrecho contacto entre el mundo griego y la península itálica. Las relaciones comerciales y culturales también se extenderán a la zona del Lacio, introduciendo el alfabeto, el olivo y favoreciendo el desarrollo de la vida urbana.
Más información Guerras de Pirro y Magna Grecia
El primer enfrentamiento del ejército romano con el mundo griego, encarnado en Pirro, se produjo cerca de la colonia tarentina de Heraclea en el 280 a.C. El resultado se tradujo en una victoria para Pirro, si bien las pérdidas en ambos bandos fueron enormes.
Más información Sicilia
El peligro que suponía la presencia de Pirro en el sur de Italia y Sicilia motivó la firma de un tratado entre Cartago y Roma. En el primer enfrentamiento el rey epirota consiguió la victoria pero la victoria de los Campos Arusinos (275 a.C.) permitió a Roma controlar toda Italia.
Más información Relación con los reinos helenísticos
La relación de Roma y las monarquías helenísticas se hizo más estrecha durante la segunda mitad del siglo II a.C. Atalo III de Pérgamo cedió en herencia su reino a Roma (133-129 a.C.); en Egipto la confusa situación permitió la participación en la política del país, reconociendo a Roma como dueña inevitable de sus destinos políticos; en los reinos seleucidas se apostará por Demetrio hasta que Roma intervenga directamente.
Más información De Filipos a Nauloco
Tras la batalla de Filipos y la toma de Perugia por parte de Octavio, el convenio de Bríndisi selló prácticamente la división del Imperio en dos partes, pues Lépido no constituía ningún peligro. La derrota de Sexto Pompeyo ante Octavio reforzará esta división que, posteriormente, provocará la lucha entre los dos hombres fuertes: Octavio y M. Antonio.
Más información Batalla de Accio
La batalla de Accio (31 a.C.) ganada por Octavio motivará que éste se convierta en el único dueño del poder, iniciándose el Imperio.
Más información Transición al Bajo Imperio
Una revuelta militar en el año 284 salvó al Imperio cuando se proclamó Diocleciano emperador, momento en el que se abrió un período durante el cual se logró tanto la superación de la larga crisis política anterior como la elaboración de una serie de medidas que afectarían directamente a la evolución del mundo romano bajo-imperial. La crisis económica y religiosa serán nuevas complicaciones que unir a la tensión militar.
Más información Constantino dueño único del Imperio
La derrota de Majencio en el Puente Milvio supondrá que Constantino se convierta en emperador de Occidente (312). Las primeras medidas que adoptó fueron: la disolución de la guardia pretoriana, el refuerzo de sus relaciones con Licinio y la promulgación en Occidente de la libertad religiosa. En el 324 Constantino, tras derrotar a Licinio, reunificó de nuevo el Imperio después de cuarenta años de haber estado dividido. Asoció a tres de sus hijos al imperio designándoles césares recuperando el espíritu de la tetraquía de Diocleciano.
Más información Sucesión de Constantino: Constancio II
Tras la muerte de Constantino (337) se produjo una encarnizada lucha por el poder entre los césares que había nombrado. Constantino II se puso al frente del Imperio Occidental y Constancio II del Oriental. A Constante, el menor, le encomendaron el gobierno del Ilírico. Los enfrentamientos continuaron hasta que Constacio II se impuso, nombrando césar a Juliano.
Más información El trabajo y la sociedad
De todas los territorios que constituían el Imperio será Italia quien tenga una situación de absoluto privilegio. La agricultura se especializó gracias a la llegada masiva de grano procedente de Africa, Hispania o Egipto. De las tierras conquistadas también llegarán un amplio número de esclavos que paulatinamente irán ocupando los puestos de trabajo de los campesinos libres, creando un sistema esclavista.
Más información Trabajo agrícola
La economía romana descansará sobre el sector agrario, produciéndose un importante desarrollo del regadío y de la ganadería. Las pequeñas propiedades no tendrán competencia ante el aumento del número de grandes explotaciones trabajados por esclavos lo que motivará el incremento de la población servil.
Más información Trabajo en la minería
Debido a la necesidad de metales por parte del Estado, la minería alcanzó un especial desarrollo en el Imperio Romano, contando con un amplio número de trabajadores, en su mayoría esclavos.
Más información Los artesanos
La amplia demanda de productos manufacturados provocó el desarrollo de la artesanía, especialmente en las ciudades donde encontramos la mayoría de los talleres. Los artesanos se asociaron en colegios, siendo el precedente de los gremios medievales.
Más información Los comerciantes
El comercio marítimo fue una de las principales fuentes de riqueza en el Imperio Romano, existiendo importantes personajes que se dedicaron a este menester. Los propios productores iniciaban la cadena comercial que se engrosaba con la existencia de intermediarios, creadores de los grandes emporios comerciales de las ciudades.
Más información Los financieros
La actividad financiera sería desempeñada principalmente por los publicanos y las sociedades por ellos creadas. Su férreo control sobre el arrendamiento de impuestos provocó las quejas de las provincias por lo que fue obligatoria la intervención estatal.
Más información El coste de la vida
El coste de la vida tuvo un significativo aumento desde la época de la república hasta el Imperio. Los salarios que conocemos no aumentaron proporcinalmente con los precios, provocando importantes procesos inflacionistas.
Más información La familia
Una de las instituciones fundamentales de Roma fue la familia donde la figura del pater familias dominaba todos los ámbitos de la vida. Pertenecer a una familia vinculaba la posesión de derechos de ciudadanía por lo que los que perdían los derechos ciudadanos se veían excluidos de la posibilidad de formar una familia.
Más información La educación
Podemos distinguir tres periodos educativos en la historia de Roma: el primero correspondería a siglos VIII-III a.C. -la Monarquía y los primeros momentos de la República-; el segundo al periodo comprendido entre los siglos III a.C. y II d.C.; y el tercero al Bajo Imperio, caracterizados por la influencia familiar, helenística y estatal, respectivamente.
Más información Diversiones
Las carreras de carros y las luchas de gladiadores serán los espectáculos favoritos de los romanos, siendo sufragados en numerosas ocasiones por los emperadores para elevar su cotización popular.
Más información Lengua y literatura
La influencia griega se manifiesta en la literatura romana durante la época de las conquistas hasta que Plauto introduzca la comedia romana. Durante las Guerras Civiles la literatura romana alcanzará su máximo esplendor que se mantendrá en la época imperial, entrando en crisis hacia el siglo III.
Más información Las mujeres
Sometidas primero al padre y después al esposo, las mujeres romanas apenas tenían margen de maniobra, dedicando la mayor parte de su tiempo a la costura. La viudedad podía aportar a veces un buen alivio a las mujeres que veían como sus matrimonios eran concertados. Pero en su haber encontramos que recibían la parte de la herencia e incluso las relaciones clientelares paternas por lo que en ocasiones controlaron las decisiones del esposo.
Más información La prostitución
Según cuentan las crónicas, en la Roma del siglo I existía más de 32.000 prostitutas censadas, lo que permite hacerse una idea del volumen de negocio que rodeaba al sexo. Los romanos regularon la prostitución, estableciendo impuestos a las mujeres que se dedicaban a este oficio, existiendo algunas que consiguieron evadirse del fisco al ofrecer sus servicios fuera de los burdeles.
Más información La ciencia
La ciencia romana será heredera de Grecia, poniendo de manifiesto el carácter práctico de los romanos. La mayoría de los estudiosos se dedicarán a la recopilación de material y su primaria elaboración empírica, descuidando en la mayor parte de los casos las ciencias naturales.
Más información La filosofía
Los romanos no manifestarán un especial interés por la filosofía, siendo las escuelas griegas las que alcancen un mayor desarrollo, especialmente el estoicismo y el escpeticismo.
Más información El Derecho
La incorporación del Derecho será una importante novedad que tendrá reflejo en las futuras sociedades. Se fragua durante la época republicana y alcanzará un elevado grado de desarrollo en época imperial.
Más información La religión
En Roma podemos distinguir una religión pública de otra privada, siendo Júpiter el promotor de las acciones emanadas del Estado. Todo se basará en un acuerdo tácito entre la divinidad y el ser humano, considerando que cada objeto o fenómeno tiene su propia alma.
Más información Ciudades y casas
La anarquía urbanística, la especulación, la suciedad y el bullicio caracterizan la urbanización de Roma durante los momentos de apogeo, desarrollándose numerosos planes por parte de los gobernantes y emperadores.
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