CAPITULO II
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Datos principales
Desarrollo
CAPITULO II Llegada á la ciudad de Truxillo, descripcion abreviada de esta y continuacion del viage desde ella hasta la de Lima 39 Sin hacer mas detencion en Chocope que aquella regular para dar descenso á los vagages, continuamos nuestro viage passando de él á la ciudad de Truxillo, que dista 11 leguas, y está, segun las observaciones que allí hicimos, en 8 grados 6 minutos 3 segundos de latitud. Esta ciudad fue edificada el año de 1535 en el valle de Chimo por Don Francisco Pizarro. Su situacion es hermosa aunque el suelo, de arena muerta, defecto general en todas las demás poblaciones de aquellos valles; está cercada de murallas de adoves; y en quanto á su capacidad, se podrá computar por una de las del tercer orden. Dista de las playas marítimas como media legua, y á dos leguas al norte de ella está el puerto de Guancacho, por el qual hace el comercio ultramarino. Las casas muestran bastante aparato y hermosura; todas las principales de la ciudad son de adoves, con primorosas balconerías y vistosas portadas; las de los barrios se componen de baxareques; unas y otras son baxas por razon de los temblores, y muy pocas las que se hallan con un alto. 40 Reside en esta ciudad el corregidor, que govierna todo el partido, un obispo, cuya diocesis empieza desde Tumbez, con un cuerpo de cabildo que consta de tres dignidades, que son dean, arcediano y chantre, 4 canongias y 2 raciones. Hay Caxas reales con dos oficiales de la Real Hacienda, contador y tesorero, de quienes, como yá tengo dicho, el uno passa á Lambayeque á hacer allí su residencia interin que el otro está en Truxillo.
Hay conventos de religiosos de varias ordenes, colegio de la Compañía, un hospital de nuestra Señora de Bethleem y dos conventos de monjas, uno de Santa Clara y otro de descalzas de Santa Teresa. 41 El vecindario se compone de españoles, indios y gente de todas castas; en los primeros hay muchas familias de lustre y de conveniencias. Son todos muy agradables, de buenas modales, cultos y bien instruidos. Las mugeres visten con muy corta diferencia á la moda de Lima, cuyo trage se describirá adelante, y convienen tambien en las mas de sus costumbres. Todas las familias de medianas conveniencias estilan allí calesas, sin cuyo auxilio fuera dificil andar las calles por su mucha arena, y assi es muy crecido su numero. 42 En el clima se reconoce mutacion y diferencia sensible del ibierno al verano desde esta ciudad en adelante, pues en la primera sazon se dexa sentir el frio y no menos el calor en la segunda. Las campañas de todo este valle son de suma fertilidad; cogese en ellas mucha caña de azucar, maiz, toda suerte de verduras y frutas. Parte de ellas se componen de plantío de viñas y otras de olivares. Las tierras que están mas cercanas á la serranía producen trigo, cebada y simientes de esta especie, y por ello no es solo abundante para sí de todo genero de mantenimientos pero surte con los que le sobran á Panamá, especialmente de harinas de trigo y azucares. La gran fertilidad de la tierra hace divertido el país y á la ciudad rodeada de frondosas arboledas, unas que, formando calles, ofrecen passeos divertidos, y otras en las huertas y jardines; y siendo el cielo muy alegre, goza de este beneficio, recrea á su vecindario y sirve de descanso y desahoga á los que trafican.
43 A distancia de una legua de la ciudad corre un rio que fertiliza con varias acequias sus campañas; y passandolo á vado el dia 4, que continuamos el viage, y despues el pueblo de Mocha, entramos el siguiente en el de Birú, distante de Truxillo 10 leguas. En el pueblo de Moche se entrega á los alcaldes el passaporte del corregidor de Truxillo, sin cuya circunstancia embarazan que se prosiga el viage, como sucede en Sechura. 44 Está Birú en 8 grados 24 minutos 59 segundos de latitud austral; componese de 50 casas de baxareques, en las que habitan 70 familias de españoles, indios y gente de castas; y á media legua al norte de él lleva su curso un arroyo de donde se sacan varias acequias para regar las tierras de su pertenencia, no menos fértiles que las de Truxillo, y assimismo las de otras poblaciones que tienen su assiento rio arriba. De aquí salimos el mismo dia y, caminando á ratos por las playas y á ratos algo apartados de ellas, aunque nunca mas de 1 á 2 leguas, hicimos alto el 6 en un parage desierto que nombran el tambo de Chao, del qual continuamos hasta las orillas del rio de Santa y, passandolo con la ayuda de dos chimbadores, entramos en la villa del mismo nombre, que dista de él como un quarto de legua y 15 de Birú, en cuyo transito hay arenales muy dilatados y dos cuestas que los interrumpen. 45 El rio de Santa se explaya en el parage por donde regularmente se vadea cosa de un quarto de legua, formando cinco madres ó brazos principales por las quales corre en todas las sazones del año con mucho caudal; passasse á vado, y hay para ello hombres destinados con cavallos muy altos y enseñados á resistir la violencia de su corriente, que siempre es grande.
Danles el nombre de chimbadores, y tienen el cuidado de buscar y conocer el vado para guiar despues por él las cargas y passageros, sin cuya providencia no sería practicable porque es muy frequente el mudarlos con las avenidas y dificil el encontrarlos, experimentandose aún en los mismos chimbadores muy de continuo la desgracia de que, variandolos repentinamente en alguno de sus brazos, los arrastre la corriente y haga perecer entre sus ondas. Quando es ibierno en la sierra, que corre muy cargado, no admite vado en muchos dias, y entonces es forzoso que se detengan los passageros hasta que aminoren las aguas, particularmente si van acompañados con algunas cargas de mercaderias porque, hallandose escoteros, tienen el recurso de poderlo passar en balzas de calabazos, rodeando seis ó ocho leguas mas arriba del pueblo, donde tiene mas comodidad para ello, pero nunca sin peligro pues suele suceder que, cayendo en alguna violenta corriente, arrastre consigo la balza hasta meterla en el mar. Quando nosotros lo passamos, estaba baxo totalmente, y, no obstante por 3 experiencias que se hicieron en su orilla y convinieron todas entre sí, hallamos que en 29 segundos y medio de tiempo corria el agua 35 tuessas, esto es, en una hora de tiempo 4271 tuessas, que hacen una legua y media maritima. Esta violencia del agua es algo menor que la que Mr. de la Condamine señala en la relacion de su viage del rio Marañón á el Pongo ó estrecho de Manceriche, pero no hay duda que, quando el rio de Santa aumenta su caudal con el excesso que suele, sobrepujará su aceleracion á la de aquel Pongo, pues estaba en esta ocasion en la mayor menguante que acostumbra.
46 La latitud de la villa de Santa Marta de la Parrilla, que assi es su propio nombre, fue concluida por la observacion de algunas estrellas, respeto de no haverse logrado por el sol, de 8 grados 57 minutos 36 segundos. Tuvo su primitiva fundacion en la playa maritima, de la qual dista ahora poco mas de media legua; era entonces muy capaz y con crecido vecindario y conventos de todas religiones, residiendo en ella un corregidor, pero, haviendola destruido por los años de 1685 el pyrata inglés Eduardo David, abandonaron aquel sitio sus habitadores, y los que no tuvieron possibilidad para transferirse á lugar mas seguro poblaron donde hoy permanece. Componese esta villa de 25 á 30 casas, unas de baxaregue y otras de paja, las quales dan á entender bastantemente la pobreza de sus dueños; su vecindario llegará á 50 familias, todas de indios y gente de castas. 47 Al tiempo que estabamos observando, se vió en el ayre el lucido phenomeno de una grande exhalacion encendida ó globo de fuego, semejante al que se dixo en la primera parte haverse reconocido en Quito, aunque no de tanto volumen y claridad. Este corrió largo espacio acia el oeste y, al llegar á la marina, causó un estrépito semejante al de un cañonazo, con el qual terminó; los que no le havian visto empezaron á alborotarse, y, creyendolo aviso de alguna embarcacion que huviesse llegado al puerto, ocurrió todo el pueblo con sus armas y cavallos á la playa para disputar el passo si fuesse de enemigos, mas, no haviendo encontrado cosa alguna, se restituyeron al pueblo dexando allí sus guardas para que diessen noticia de qualquiera novedad.
En todo aquel territorio de Valles son muy comunes estas inflamadas exhalaciones, tanto que á cada rato de la noche se están percibiendo, y entre ellas algunas de mucha duracion y de bastante claridad y magnitud. 48 Está sujeto este pueblo á una plaga intolerable de mosquitos, tal que su mismo vecindario, aunque acostumbrado á ellos, no puede soportarla; hay tiempos en que se disminuyen y algunos, aunque raros, en que no los hay, pero por lo comun abundan en todas estaciones. La mortificacion de este insecto cessa desde Piura en adelante, á excepcion de algunos pueblos donde por estar muy cercanos los rios los hay, pero en ninguno con el excesso que en el de Santa. Desde esta villa nos dirigimos el dia 8 á Guacatambo haciendo assi llamada que dista de Santa 8 leguas, y junto á ella está el tambo, el qual consiste en un cubierto para que hagan mansion los passageros, corriendo cerca de él un arroyo mediano. 49 El dia 9 llegamos á otra hacienda que llaman de Manchan, antes de la qual como una legua passamos por el pueblo nombrado Casma la Baxa, que se compone de 10 á 12 casas solamente con una iglesia, y en la distancia que media entre él y Manchán corre otro arroyo mediano; dista esta hacienda de la antecedente como 8 leguas. De Manchan continuamos el dia 10 por unas cuestas pedregosas y algo molestas, particularmente para las literas, á que dan el nombre de culebras, y en el siguiente 11 entramos en el pueblo de Guarmey, distante de Manchán 16 leguas, passando cosa de 3 mas adelante, donde se havia hecho la pascana assi llaman allí las paradas que se hacen en el camino por un tambo, que nombran tambien de culebras, y es la dormida ó parada regular.
El pueblo de Guarmey es de pequeña extension pues en 40 casas, como las de los antecedentes, hay 70 vecinos, entre los quales son pocos los españoles que lo habitan, y los restantes, indios, mulatos y gente de todas castas. Su latitud es de 10 grados 3 minutos 53 segundos. Hace en él su continua residencia el corregidor, que antes la tenia en la villa de Santa. 50 De este pueblo proseguimos el dia 13 hasta un parage que nombran de los Callejones, distante de aquel 13 leguas de camino bien modesto, assi por la arena como por varias cuestas y cerros que median, entre los quales hay uno llamado el Salto del Frayle, de bastante peligro, pues, componiendose de peña viva y bien alta, está totalmente escarpado acia la mar, por cuya pendiente es forzoso passar, causando el riesgo de su precipicio no menos horror en los racionales que recelo en los vagages. El siguiente dia llegamos á Guamanmayo, casas situadas en la orilla del rio de la Barranca, aunque algo distantes de él, y pertenecientes al pueblo de Pativilca, que dista como 8 leguas de los Callejones. Este pueblo es el ultimo hasta donde se estiende por aquella parte la jurisdiccion del corregimiento de Santa ó Guarmey. 51 El pueblo de Pativilca es mediano pues solo consta de 50 á 60 casas. Su vecindario es proporcionado á la capacidad, y entre él hay algunas familias de españoles y la mayor parte gente de todas castas, pero muy pocos indios. Cerca de la marina, la qual dista de Guamanmayo como tres quartos de legua, se conservan unos paredones de adoves, ruinas de un antiguo edificio de los indios, cuya magnitud confirma el informe que dan aquellos naturales de haver sido uno de los palacios de los antiguos caziques de aquella tierra, y no hay duda que la situacion es adequada á este fin porque se goza en él la diversion de la campaña, que es muy fértil y amena, y el recreo de la mar.
52 De allí passamos el 15 á la orilla del rio de la Barranca, distante cosa de un quarto de legua, y lo vadeamos con el auxilio de chimbadores; en esta ocasion venia muy baxo y dividido en tres brazos; es muy pedregoso y, por esto, causa de peligro en todos tiempos. Como una legua mas adelante está el pueblo de la Barranca, en el qual empieza la jurisdiccion de Guaura; contiene de 60 á 70 casas; su vecindario es crecido, y en él hay mucha gente blanca ó españoles. Y el mismo dia llegamos á la villa de Guaura, haviendo andado desde Guamanmayo 9 leguas. 53 Toda esta villa se compone de una sola calle, larga como un quarto de legua, y de 150 á 200 casas, unas de adoves y otras de baxareques, y rancherías de indios. Además de la iglesia parroquial, tiene un convento de religiosos franciscos. Y antes de entrar, se passa por una hacienda que le está inmediata, tan quantiosa que se estiende por el camino mas de una legua, lo qual hace sumamente divertido este tránsito porque todo quanto la vista se puede estender por la parte del oriente son cañaverales de azucar y, por la del occidente, sementeras de trigo, maiz y otros granos, las quales no solamente ocupan aquellas inmediaciones de la villa sino quanto comprehende todo el valle, que es muy espacioso. 54 En donde se termina la calle de Guaura por la parte del sur, hay un gran torreon con una puerta, y sobre ella un especie de reducto. Este torreon dá entrada á un puente de piedra, baxo del qual corre el rio con bastante profundidad y tan cercano á la poblacion que toca el agua los fundamentos de ella sin perjudicarlos porque son de peña viva.
Despues del rio, continúa en aquel terreno un barrio o arrabal de la misma villa, cuyas casas, aunque no unidas, acompañan el camino en la distancia de media legua, y lo hacen muy ameno las muchas arboledas y huertas que median entre ellas. La latitud de Guaura, determinada por una observacion de sol que en ella hicimos, es de 11 grados 3 minutos 36 segundos austral. Su cielo, alegre, y el temperamento, muy sano y regular pues, aunque se siente la diferencia de estaciones en el año, no tanto que moleste el frio en el ibierno ni fatigue en el verano el calor. 55 Desde Guarmey en adelante se encuentran muchos vestigios de antiguos edificios de los ingas; por unas partes, paredes de palacios ó habitaciones; por otras, cercas de adoves bien gruessas que formaban caminos reales de suficiente ancho ó yá lugares fuertes y especie de castillos que tenían en los sitios correspondientes para resistir á los insultos de sus enemigos y naciones con quienes mantenian guerras. Uno de estos ultimos monumentos se encuentra á cosa de dos leguas ó tres de la parte del norte del pueblo de Pativirca, no lexos de un arroyo, y son las ruinas de una fortaleza, que este nombre le dan, en lo alto de un cerro mediano, de que solo permanecen vestigios de los paredones que la formaban, cuyo parage está cercano á la marina. 56 De Guaura passamos á la villa de Chancay; y aunque no cuentan mas de 12 leguas de una á otra, por el tiempo que gastamos en el camino, hicimos juicio de que havria 14.
Allí se observó la latitud y se determinó de 11 grados 33 minutos 47 segundos austral. Su capacidad es como de 300 casas de adoves, quinchas y rancherías. Su vecindario, que es crecido, contiene gran numero de familias españolas, muchas de distinguida calidad; lo restante es gente de todas castas, como en las villas anteriores. Además de la parroquia, tiene un convento del orden Seraphico y un hospital, cuya administracion está á cargo de los vecinos. En esta villa la principal del corregimiento de su nombre, y perteneciente á él la villa de Guaura; el corregidor, que hace en Chancay su ordinaria residencia, nombra un justicia mayor que exerce la jurisdiccion en Guaura. Sus campañas son muy fértiles, todas de riego por medio de muchas acequias del rio de Passamayo , que corre á la parte del sur de la villa y como legua y media distante de ella; produce mucho maiz, con el qual se engorda en las haciendas una gran cantidad de ganado de cerda, por cuya razon las ocupan todas con sementeras de este grano y, el ganado, lo conducen á Lima para el abasto de aquella ciudad. 57 El mismo dia 17, que llegamos á Chancay, salimos de él y, passando á vado el rio de Passamayo, no obstante estar algo crecido, á una legua despues encontramos con el tambo del mismo nombre, desde el qual empieza la cuesta de un cerro de arena, que es muy molesta assi por su piso y extension como por ser áspera la subida, lo que dá ocasion á que se procure passar siempre de noche para disminuirla fatiga.
De allí, continuando el siguiente dia 18, llegamos á tambo de inga y entramos en Lima, haviendo caminado 12 leguas en esta ultima jornada desde la villa de Chancay. 58 Por las distancias que quedan apuntadas en el discurso del viage, se concluye que desde Tumbez á Piura hay 62 leguas, desde Piura á Truxillo 89 y de Truxillo á Lima 113, que todas componen 264; regularmente, se anda este camino de noche porque, siendo todo el país de arena muerta, hacen gran reberveracion en ella los rayos del sol, y no podrian resistir las mulas tales jornadas, juntándose á estas incomodidades la de no encontrarse agua, yerva ni otra cosa alguna. Assi, todo el camino se distingue mas bien por los huessos de las mulas que parecen en sus tránsitos desfallecidas que por la señal de su huella ó senda que forma el continuo tráfico, pues, aun siendo tan frecuente que no cesse en ningun tiempo, luego que acaba de passar alguna requa, borra el viento las huellas que quedaron estampadas. Es tan rara en todo él qualquiera yervecita ó rama que siempre que se encuentra es señal segura de estar yá poco distante la poblacion porque estas se hallan situadas donde hay rio, cuya humedad las produce y fecundiza aquellos campos; con que, todo lo que no está poblado dexa de serlo por la falta del agua, sin la qual ni puedan formarse ni subsistir los pueblos ni hacerse utiles las tierras. 59 En las poblaciones se hallan con abundancia los mantenimientos necessarios, assi de aves como de carnes, pan, frutas y vino, todos muy gustosos, delicados y á un precio regular; pero es necessario que el viagero sazone la vianda á su gusto por sí mismo ó por sus criados porque de otra manera no hallará en la mayor parte de los pueblos quien le haga la comida, á excepcion de aquellos grandes donde en los tambos lo executan los mismos á cuyo cargo están.
En los pueblos pequeños se reducen los tambos ó possadas á un cubierto simple, donde solo se encuentran las paredes sin ninguna otra cosa; por lo qual, no solo tienen los que viajan la incomodidad y trabajo de llevar agua, leña y lo que han de comer de un pueblo á otro sino tambien vasijas propias y los demás adminiculos para aderezarlo. Fuera de las aves domesticas, pollos, gallinas, pichones, pabos y patos, que abundan aun en los pueblos mas reducidos, se encuentra gran cantidad de tortolas en todos los parages que se cultivan porque estas se mantienen con el maiz y semillas de los arboles y procrean mucho; los viageros se divierten con su cacería aquel tiempo que están de parada en cada pueblo hasta que vuelen á caminar. Pero fuera de estas aves y algunas especies de pajaros pequeños, no hay otras en todo aquel camino ni animales silvestres, dañosos ó reptiles. 60 La providencia de las acequias con que los rios alcanzan á fecundar mas terreno fue obra debida al cuidado é industria de los emperadores ingas y una de las primeras atenciones con que beneficiaban á sus vassallos, enseñandoles por este medio el de enriquecerse con frutos para su subsistencia y regalo. Entre estos rios hay muchos que totalmente quedan secos por la superficie quando cessan las aguas en la serranía, pero otros muchos, como el de Santa, la Barranca, Guaura, el Passamayo y otros, no solo tienen corriente de aguas en todo tiempo pero crecido caudal aun en la mayor esterilidad. 61 Por lo regular, empiezan á tomar agua aquellos rios por los meses de enero ó febrero hasta junio, que es el ibierno de la serranía y, por el contrario, se experimenta verano en Valles; allí llueve, y acá son picantes y vivos los soles y moderados los sures. Desde junio, les empieza á faltar el agua, tanto que por noviembre y diciembre suelen estar en su mayor menguante ó sequedad, y por este tiempo es el ibierno en Valles, en el qual se experimenta en la sierra el temperamento de verano, no alternandose, assi, en tan pequeña distancia tanta variedad de temple.
Hay conventos de religiosos de varias ordenes, colegio de la Compañía, un hospital de nuestra Señora de Bethleem y dos conventos de monjas, uno de Santa Clara y otro de descalzas de Santa Teresa. 41 El vecindario se compone de españoles, indios y gente de todas castas; en los primeros hay muchas familias de lustre y de conveniencias. Son todos muy agradables, de buenas modales, cultos y bien instruidos. Las mugeres visten con muy corta diferencia á la moda de Lima, cuyo trage se describirá adelante, y convienen tambien en las mas de sus costumbres. Todas las familias de medianas conveniencias estilan allí calesas, sin cuyo auxilio fuera dificil andar las calles por su mucha arena, y assi es muy crecido su numero. 42 En el clima se reconoce mutacion y diferencia sensible del ibierno al verano desde esta ciudad en adelante, pues en la primera sazon se dexa sentir el frio y no menos el calor en la segunda. Las campañas de todo este valle son de suma fertilidad; cogese en ellas mucha caña de azucar, maiz, toda suerte de verduras y frutas. Parte de ellas se componen de plantío de viñas y otras de olivares. Las tierras que están mas cercanas á la serranía producen trigo, cebada y simientes de esta especie, y por ello no es solo abundante para sí de todo genero de mantenimientos pero surte con los que le sobran á Panamá, especialmente de harinas de trigo y azucares. La gran fertilidad de la tierra hace divertido el país y á la ciudad rodeada de frondosas arboledas, unas que, formando calles, ofrecen passeos divertidos, y otras en las huertas y jardines; y siendo el cielo muy alegre, goza de este beneficio, recrea á su vecindario y sirve de descanso y desahoga á los que trafican.
43 A distancia de una legua de la ciudad corre un rio que fertiliza con varias acequias sus campañas; y passandolo á vado el dia 4, que continuamos el viage, y despues el pueblo de Mocha, entramos el siguiente en el de Birú, distante de Truxillo 10 leguas. En el pueblo de Moche se entrega á los alcaldes el passaporte del corregidor de Truxillo, sin cuya circunstancia embarazan que se prosiga el viage, como sucede en Sechura. 44 Está Birú en 8 grados 24 minutos 59 segundos de latitud austral; componese de 50 casas de baxareques, en las que habitan 70 familias de españoles, indios y gente de castas; y á media legua al norte de él lleva su curso un arroyo de donde se sacan varias acequias para regar las tierras de su pertenencia, no menos fértiles que las de Truxillo, y assimismo las de otras poblaciones que tienen su assiento rio arriba. De aquí salimos el mismo dia y, caminando á ratos por las playas y á ratos algo apartados de ellas, aunque nunca mas de 1 á 2 leguas, hicimos alto el 6 en un parage desierto que nombran el tambo de Chao, del qual continuamos hasta las orillas del rio de Santa y, passandolo con la ayuda de dos chimbadores, entramos en la villa del mismo nombre, que dista de él como un quarto de legua y 15 de Birú, en cuyo transito hay arenales muy dilatados y dos cuestas que los interrumpen. 45 El rio de Santa se explaya en el parage por donde regularmente se vadea cosa de un quarto de legua, formando cinco madres ó brazos principales por las quales corre en todas las sazones del año con mucho caudal; passasse á vado, y hay para ello hombres destinados con cavallos muy altos y enseñados á resistir la violencia de su corriente, que siempre es grande.
Danles el nombre de chimbadores, y tienen el cuidado de buscar y conocer el vado para guiar despues por él las cargas y passageros, sin cuya providencia no sería practicable porque es muy frequente el mudarlos con las avenidas y dificil el encontrarlos, experimentandose aún en los mismos chimbadores muy de continuo la desgracia de que, variandolos repentinamente en alguno de sus brazos, los arrastre la corriente y haga perecer entre sus ondas. Quando es ibierno en la sierra, que corre muy cargado, no admite vado en muchos dias, y entonces es forzoso que se detengan los passageros hasta que aminoren las aguas, particularmente si van acompañados con algunas cargas de mercaderias porque, hallandose escoteros, tienen el recurso de poderlo passar en balzas de calabazos, rodeando seis ó ocho leguas mas arriba del pueblo, donde tiene mas comodidad para ello, pero nunca sin peligro pues suele suceder que, cayendo en alguna violenta corriente, arrastre consigo la balza hasta meterla en el mar. Quando nosotros lo passamos, estaba baxo totalmente, y, no obstante por 3 experiencias que se hicieron en su orilla y convinieron todas entre sí, hallamos que en 29 segundos y medio de tiempo corria el agua 35 tuessas, esto es, en una hora de tiempo 4271 tuessas, que hacen una legua y media maritima. Esta violencia del agua es algo menor que la que Mr. de la Condamine señala en la relacion de su viage del rio Marañón á el Pongo ó estrecho de Manceriche, pero no hay duda que, quando el rio de Santa aumenta su caudal con el excesso que suele, sobrepujará su aceleracion á la de aquel Pongo, pues estaba en esta ocasion en la mayor menguante que acostumbra.
46 La latitud de la villa de Santa Marta de la Parrilla, que assi es su propio nombre, fue concluida por la observacion de algunas estrellas, respeto de no haverse logrado por el sol, de 8 grados 57 minutos 36 segundos. Tuvo su primitiva fundacion en la playa maritima, de la qual dista ahora poco mas de media legua; era entonces muy capaz y con crecido vecindario y conventos de todas religiones, residiendo en ella un corregidor, pero, haviendola destruido por los años de 1685 el pyrata inglés Eduardo David, abandonaron aquel sitio sus habitadores, y los que no tuvieron possibilidad para transferirse á lugar mas seguro poblaron donde hoy permanece. Componese esta villa de 25 á 30 casas, unas de baxaregue y otras de paja, las quales dan á entender bastantemente la pobreza de sus dueños; su vecindario llegará á 50 familias, todas de indios y gente de castas. 47 Al tiempo que estabamos observando, se vió en el ayre el lucido phenomeno de una grande exhalacion encendida ó globo de fuego, semejante al que se dixo en la primera parte haverse reconocido en Quito, aunque no de tanto volumen y claridad. Este corrió largo espacio acia el oeste y, al llegar á la marina, causó un estrépito semejante al de un cañonazo, con el qual terminó; los que no le havian visto empezaron á alborotarse, y, creyendolo aviso de alguna embarcacion que huviesse llegado al puerto, ocurrió todo el pueblo con sus armas y cavallos á la playa para disputar el passo si fuesse de enemigos, mas, no haviendo encontrado cosa alguna, se restituyeron al pueblo dexando allí sus guardas para que diessen noticia de qualquiera novedad.
En todo aquel territorio de Valles son muy comunes estas inflamadas exhalaciones, tanto que á cada rato de la noche se están percibiendo, y entre ellas algunas de mucha duracion y de bastante claridad y magnitud. 48 Está sujeto este pueblo á una plaga intolerable de mosquitos, tal que su mismo vecindario, aunque acostumbrado á ellos, no puede soportarla; hay tiempos en que se disminuyen y algunos, aunque raros, en que no los hay, pero por lo comun abundan en todas estaciones. La mortificacion de este insecto cessa desde Piura en adelante, á excepcion de algunos pueblos donde por estar muy cercanos los rios los hay, pero en ninguno con el excesso que en el de Santa. Desde esta villa nos dirigimos el dia 8 á Guacatambo haciendo assi llamada que dista de Santa 8 leguas, y junto á ella está el tambo, el qual consiste en un cubierto para que hagan mansion los passageros, corriendo cerca de él un arroyo mediano. 49 El dia 9 llegamos á otra hacienda que llaman de Manchan, antes de la qual como una legua passamos por el pueblo nombrado Casma la Baxa, que se compone de 10 á 12 casas solamente con una iglesia, y en la distancia que media entre él y Manchán corre otro arroyo mediano; dista esta hacienda de la antecedente como 8 leguas. De Manchan continuamos el dia 10 por unas cuestas pedregosas y algo molestas, particularmente para las literas, á que dan el nombre de culebras, y en el siguiente 11 entramos en el pueblo de Guarmey, distante de Manchán 16 leguas, passando cosa de 3 mas adelante, donde se havia hecho la pascana assi llaman allí las paradas que se hacen en el camino por un tambo, que nombran tambien de culebras, y es la dormida ó parada regular.
El pueblo de Guarmey es de pequeña extension pues en 40 casas, como las de los antecedentes, hay 70 vecinos, entre los quales son pocos los españoles que lo habitan, y los restantes, indios, mulatos y gente de todas castas. Su latitud es de 10 grados 3 minutos 53 segundos. Hace en él su continua residencia el corregidor, que antes la tenia en la villa de Santa. 50 De este pueblo proseguimos el dia 13 hasta un parage que nombran de los Callejones, distante de aquel 13 leguas de camino bien modesto, assi por la arena como por varias cuestas y cerros que median, entre los quales hay uno llamado el Salto del Frayle, de bastante peligro, pues, componiendose de peña viva y bien alta, está totalmente escarpado acia la mar, por cuya pendiente es forzoso passar, causando el riesgo de su precipicio no menos horror en los racionales que recelo en los vagages. El siguiente dia llegamos á Guamanmayo, casas situadas en la orilla del rio de la Barranca, aunque algo distantes de él, y pertenecientes al pueblo de Pativilca, que dista como 8 leguas de los Callejones. Este pueblo es el ultimo hasta donde se estiende por aquella parte la jurisdiccion del corregimiento de Santa ó Guarmey. 51 El pueblo de Pativilca es mediano pues solo consta de 50 á 60 casas. Su vecindario es proporcionado á la capacidad, y entre él hay algunas familias de españoles y la mayor parte gente de todas castas, pero muy pocos indios. Cerca de la marina, la qual dista de Guamanmayo como tres quartos de legua, se conservan unos paredones de adoves, ruinas de un antiguo edificio de los indios, cuya magnitud confirma el informe que dan aquellos naturales de haver sido uno de los palacios de los antiguos caziques de aquella tierra, y no hay duda que la situacion es adequada á este fin porque se goza en él la diversion de la campaña, que es muy fértil y amena, y el recreo de la mar.
52 De allí passamos el 15 á la orilla del rio de la Barranca, distante cosa de un quarto de legua, y lo vadeamos con el auxilio de chimbadores; en esta ocasion venia muy baxo y dividido en tres brazos; es muy pedregoso y, por esto, causa de peligro en todos tiempos. Como una legua mas adelante está el pueblo de la Barranca, en el qual empieza la jurisdiccion de Guaura; contiene de 60 á 70 casas; su vecindario es crecido, y en él hay mucha gente blanca ó españoles. Y el mismo dia llegamos á la villa de Guaura, haviendo andado desde Guamanmayo 9 leguas. 53 Toda esta villa se compone de una sola calle, larga como un quarto de legua, y de 150 á 200 casas, unas de adoves y otras de baxareques, y rancherías de indios. Además de la iglesia parroquial, tiene un convento de religiosos franciscos. Y antes de entrar, se passa por una hacienda que le está inmediata, tan quantiosa que se estiende por el camino mas de una legua, lo qual hace sumamente divertido este tránsito porque todo quanto la vista se puede estender por la parte del oriente son cañaverales de azucar y, por la del occidente, sementeras de trigo, maiz y otros granos, las quales no solamente ocupan aquellas inmediaciones de la villa sino quanto comprehende todo el valle, que es muy espacioso. 54 En donde se termina la calle de Guaura por la parte del sur, hay un gran torreon con una puerta, y sobre ella un especie de reducto. Este torreon dá entrada á un puente de piedra, baxo del qual corre el rio con bastante profundidad y tan cercano á la poblacion que toca el agua los fundamentos de ella sin perjudicarlos porque son de peña viva.
Despues del rio, continúa en aquel terreno un barrio o arrabal de la misma villa, cuyas casas, aunque no unidas, acompañan el camino en la distancia de media legua, y lo hacen muy ameno las muchas arboledas y huertas que median entre ellas. La latitud de Guaura, determinada por una observacion de sol que en ella hicimos, es de 11 grados 3 minutos 36 segundos austral. Su cielo, alegre, y el temperamento, muy sano y regular pues, aunque se siente la diferencia de estaciones en el año, no tanto que moleste el frio en el ibierno ni fatigue en el verano el calor. 55 Desde Guarmey en adelante se encuentran muchos vestigios de antiguos edificios de los ingas; por unas partes, paredes de palacios ó habitaciones; por otras, cercas de adoves bien gruessas que formaban caminos reales de suficiente ancho ó yá lugares fuertes y especie de castillos que tenían en los sitios correspondientes para resistir á los insultos de sus enemigos y naciones con quienes mantenian guerras. Uno de estos ultimos monumentos se encuentra á cosa de dos leguas ó tres de la parte del norte del pueblo de Pativirca, no lexos de un arroyo, y son las ruinas de una fortaleza, que este nombre le dan, en lo alto de un cerro mediano, de que solo permanecen vestigios de los paredones que la formaban, cuyo parage está cercano á la marina. 56 De Guaura passamos á la villa de Chancay; y aunque no cuentan mas de 12 leguas de una á otra, por el tiempo que gastamos en el camino, hicimos juicio de que havria 14.
Allí se observó la latitud y se determinó de 11 grados 33 minutos 47 segundos austral. Su capacidad es como de 300 casas de adoves, quinchas y rancherías. Su vecindario, que es crecido, contiene gran numero de familias españolas, muchas de distinguida calidad; lo restante es gente de todas castas, como en las villas anteriores. Además de la parroquia, tiene un convento del orden Seraphico y un hospital, cuya administracion está á cargo de los vecinos. En esta villa la principal del corregimiento de su nombre, y perteneciente á él la villa de Guaura; el corregidor, que hace en Chancay su ordinaria residencia, nombra un justicia mayor que exerce la jurisdiccion en Guaura. Sus campañas son muy fértiles, todas de riego por medio de muchas acequias del rio de Passamayo , que corre á la parte del sur de la villa y como legua y media distante de ella; produce mucho maiz, con el qual se engorda en las haciendas una gran cantidad de ganado de cerda, por cuya razon las ocupan todas con sementeras de este grano y, el ganado, lo conducen á Lima para el abasto de aquella ciudad. 57 El mismo dia 17, que llegamos á Chancay, salimos de él y, passando á vado el rio de Passamayo, no obstante estar algo crecido, á una legua despues encontramos con el tambo del mismo nombre, desde el qual empieza la cuesta de un cerro de arena, que es muy molesta assi por su piso y extension como por ser áspera la subida, lo que dá ocasion á que se procure passar siempre de noche para disminuirla fatiga.
De allí, continuando el siguiente dia 18, llegamos á tambo de inga y entramos en Lima, haviendo caminado 12 leguas en esta ultima jornada desde la villa de Chancay. 58 Por las distancias que quedan apuntadas en el discurso del viage, se concluye que desde Tumbez á Piura hay 62 leguas, desde Piura á Truxillo 89 y de Truxillo á Lima 113, que todas componen 264; regularmente, se anda este camino de noche porque, siendo todo el país de arena muerta, hacen gran reberveracion en ella los rayos del sol, y no podrian resistir las mulas tales jornadas, juntándose á estas incomodidades la de no encontrarse agua, yerva ni otra cosa alguna. Assi, todo el camino se distingue mas bien por los huessos de las mulas que parecen en sus tránsitos desfallecidas que por la señal de su huella ó senda que forma el continuo tráfico, pues, aun siendo tan frecuente que no cesse en ningun tiempo, luego que acaba de passar alguna requa, borra el viento las huellas que quedaron estampadas. Es tan rara en todo él qualquiera yervecita ó rama que siempre que se encuentra es señal segura de estar yá poco distante la poblacion porque estas se hallan situadas donde hay rio, cuya humedad las produce y fecundiza aquellos campos; con que, todo lo que no está poblado dexa de serlo por la falta del agua, sin la qual ni puedan formarse ni subsistir los pueblos ni hacerse utiles las tierras. 59 En las poblaciones se hallan con abundancia los mantenimientos necessarios, assi de aves como de carnes, pan, frutas y vino, todos muy gustosos, delicados y á un precio regular; pero es necessario que el viagero sazone la vianda á su gusto por sí mismo ó por sus criados porque de otra manera no hallará en la mayor parte de los pueblos quien le haga la comida, á excepcion de aquellos grandes donde en los tambos lo executan los mismos á cuyo cargo están.
En los pueblos pequeños se reducen los tambos ó possadas á un cubierto simple, donde solo se encuentran las paredes sin ninguna otra cosa; por lo qual, no solo tienen los que viajan la incomodidad y trabajo de llevar agua, leña y lo que han de comer de un pueblo á otro sino tambien vasijas propias y los demás adminiculos para aderezarlo. Fuera de las aves domesticas, pollos, gallinas, pichones, pabos y patos, que abundan aun en los pueblos mas reducidos, se encuentra gran cantidad de tortolas en todos los parages que se cultivan porque estas se mantienen con el maiz y semillas de los arboles y procrean mucho; los viageros se divierten con su cacería aquel tiempo que están de parada en cada pueblo hasta que vuelen á caminar. Pero fuera de estas aves y algunas especies de pajaros pequeños, no hay otras en todo aquel camino ni animales silvestres, dañosos ó reptiles. 60 La providencia de las acequias con que los rios alcanzan á fecundar mas terreno fue obra debida al cuidado é industria de los emperadores ingas y una de las primeras atenciones con que beneficiaban á sus vassallos, enseñandoles por este medio el de enriquecerse con frutos para su subsistencia y regalo. Entre estos rios hay muchos que totalmente quedan secos por la superficie quando cessan las aguas en la serranía, pero otros muchos, como el de Santa, la Barranca, Guaura, el Passamayo y otros, no solo tienen corriente de aguas en todo tiempo pero crecido caudal aun en la mayor esterilidad. 61 Por lo regular, empiezan á tomar agua aquellos rios por los meses de enero ó febrero hasta junio, que es el ibierno de la serranía y, por el contrario, se experimenta verano en Valles; allí llueve, y acá son picantes y vivos los soles y moderados los sures. Desde junio, les empieza á faltar el agua, tanto que por noviembre y diciembre suelen estar en su mayor menguante ó sequedad, y por este tiempo es el ibierno en Valles, en el qual se experimenta en la sierra el temperamento de verano, no alternandose, assi, en tan pequeña distancia tanta variedad de temple.