La Asunción de Tiziano

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Datos principales


Personaje relacionado

Tiziano Vecellio

Desarrollo


La Asunción que Tiziano pintó para la iglesia de Santa María dei Frari en Venecia entre 1516 y 1518 es una de sus obras más espectaculares. Sus fuentes de inspiración debemos buscarlas en Mantegna y Giovanni Bellini, aunque el maestro veneciano las perfecciona, abandonando el realismo para otorgar al asunto la sobrenaturalidad necesaria. La composición se divide en tres espacios: la zona superior, con Dios Padre esperando a recibir a María en su seno; la central, con la Virgen María siendo ascendida por una gran corte de querubines; y la inferior, donde los apóstoles contemplan el episodio. Pero Tiziano ha conseguido unir las tres zonas con gran maestría, a través de diferentes elementos como el color rojo que afecta a los tres espacios; la luz, al iluminar de igual manera la zona terrenal y la celestial, sin hacer variaciones entre ambas; los gestos de las figuras, que ponen en contacto los diferentes planos - el brazo levantado del apóstol de espaldas, el querubín que aparece a su lado, la mirada hacia arriba de la Virgen o Dios Padre mirando hacia abajo -; la unidad compositiva, al recurrir a una pirámide para la zona terrenal y un círculo en la celestial, participando la Virgen en ambos mundos lo que indica su calidad de intercesora para el ser humano en su salvación. Las figuras empleadas por el maestro son de gran tamaño, destacando las posturas movidas que otorgan mayor veracidad. Tiziano recurre a una doble perspectiva de gran originalidad al contemplar desde arriba hacia abajo a los apóstoles y de abajo a arriba a la Virgen y Dios Padre. La intensidad del colorido y el brillo de la luz dorada forman parte de la cuidadosa puesta en escena seguida por Tiziano, quien había calculado hasta los más mínimos detalles de emplazamiento ya que el lienzo se sitúa al final de un gran altar gótico y en un difícil contraluz, contrarrestado por la maravillosa luminosidad que emana de la obra. De esta manera se pone de manifiesto el deseo del maestro por agradar a sus clientes.

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