José Augusto T. Martínez Ruiz
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Datos principales
Alias
Azorín
Tipo
Literato
Fecha nacimiento
8-6-1873
Lugar nacimiento
Monóvar, Alicante
País nacimiento
Fecha muerte
4-3-1967
Lugar muerte
Cargo
Escritor
Desarrollo
Nacido en Monóvar (Alicante) en el seno de una familia acomodada, estudió Derecho en Valencia, Granada, Salamanca y Madrid . En Valencia realizó colaboraciones para periódicos republicanos y editó folletos sobre literatura y temas sociales, que denotan una actitud inconformista y crítica con su tiempo. Esta etapa será evocada por el autor más tarde en su libro Valencia, publicado en 1941. En 1896 se establece en Madrid, relacionándose con la bohemia literaria del momento. Colabora en periódicos como El País (1896) o El Progreso (1897), así como en algunas revistas literarias. También se relaciona con los círculos anarquistas que piden un cambio radical de la situación política. Junto a Baroja y Ramiro de Maeztu , sus intervenciones en prensa se significan por postular reformas educativas y económicas. En 1902 publica su novela La voluntad, en la que se muestra la madurez del escritor. En ella aparece el personaje llamado Azorín, nombre que toma el propio autor a partir de entonces. La novela ensarta paisajes, episodios autobiográficos y crónica contemporánea al autor, al tiempo que marca ya las claves de lo que será su obra posterior. Meditación, alejamiento de lo superfluo, descripción y gusto por la estética son elementos que proliferan en sus dos novelas siguientes, Antonio Azorín (1903) y Las confesiones de un pequeño filósofo (1904). Decidido a intervenir en política, su pensamiento experimenta un giro radical, deslizándose hacia un conservadurismo que no pocos califican de interesado.
Milita en las filas conservadoras de Antonio Maura y más tarde de La Cierva , siendo diputado en las legislaturas de 1907, 1914 y 1916-20. En este periodo se interesa por temas españoles y paisajes, especialmente por mostrar escenas campesinas. Surgen así los ensayos Los pueblos (1905), España (1909), Castilla (1912) y Un pueblecito, Riofrío de Avila (1916). También pertenecen a este periodo obras surgidas de la lectura de otros autores, a modo de impresiones de lectura: La ruta de don Quijote (1905), Lecturas españolas (1912), Clásicos y modernos (1913) o El paisaje de España visto por los españoles (1917). Excelente crítico literario, en 1913 publica Los valores literarios, tema que continuará dos años más tarde con Al margen de los clásicos. En la década de los 20 retoma la ficción en forma de novela, con Don Juan (1922), Doña Inés (1925), Félix Vargas (1928), Superrealismo (1929) y Pueblo (1930). En ellas Azorín busca renovar la literatura española del momento, propósito del que también participan sus incursiones en el teatro, con obras como Judit (1926), Old Spain!, Brandy, mucho Brandy (1927) o su trilogía publicada en 1927 Lo invisible. El estallido de la guerra civil marca una etapa de exilio para Azorín, que será recordad por el autor en su obra París (1945). En 1939 regresa a Madrid y continúa su labor creativa, con títulos como El escritor (1941), El enfermo, María Fontán (1943), Salvadora de Olbena, La isla sin aurora (1944) y Ante Baroja (1946).
Milita en las filas conservadoras de Antonio Maura y más tarde de La Cierva , siendo diputado en las legislaturas de 1907, 1914 y 1916-20. En este periodo se interesa por temas españoles y paisajes, especialmente por mostrar escenas campesinas. Surgen así los ensayos Los pueblos (1905), España (1909), Castilla (1912) y Un pueblecito, Riofrío de Avila (1916). También pertenecen a este periodo obras surgidas de la lectura de otros autores, a modo de impresiones de lectura: La ruta de don Quijote (1905), Lecturas españolas (1912), Clásicos y modernos (1913) o El paisaje de España visto por los españoles (1917). Excelente crítico literario, en 1913 publica Los valores literarios, tema que continuará dos años más tarde con Al margen de los clásicos. En la década de los 20 retoma la ficción en forma de novela, con Don Juan (1922), Doña Inés (1925), Félix Vargas (1928), Superrealismo (1929) y Pueblo (1930). En ellas Azorín busca renovar la literatura española del momento, propósito del que también participan sus incursiones en el teatro, con obras como Judit (1926), Old Spain!, Brandy, mucho Brandy (1927) o su trilogía publicada en 1927 Lo invisible. El estallido de la guerra civil marca una etapa de exilio para Azorín, que será recordad por el autor en su obra París (1945). En 1939 regresa a Madrid y continúa su labor creativa, con títulos como El escritor (1941), El enfermo, María Fontán (1943), Salvadora de Olbena, La isla sin aurora (1944) y Ante Baroja (1946).