Resurrección de Drusiana
Datos principales
Autor
Fecha
1313-14
Escuela
Estilo
Material
Museo
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Giotto desarrolla de manera ejemplar el milagro de la Resurrección de Drusiana, atribuido a San Juan Evangelista a su vuelta a Éfeso. Basándose en la "Leyenda dorada" de Jacobo de la Voragine, Giotto sitúa el acontecimiento a las puertas de Éfeso, entre la entrada de la ciudad y el testero de la iglesia, en la parte derecha. San Juan es recibido con grandes honores por algunos fieles, que se arrodillan ante él. Al paso de la comitiva fúnebre de Drusiana, que esperaba con fervor su vuelta de Patmos, el santo ordena detenerse al séquito y, a la anciana, que se levante. San Juan imprime gran energía a su mandato, levantando con fuerza su mano derecha hacia Drusiana que, al otro lado, se incorpora de su lecho de muerte. Todos reaccionan con asombro. La plasticidad de las figuras se recorta suavemente sobre el fondo arquitectónico, las murallas de la ciudad. Giotto consigue una relación espectacular, pero sin sobresaltos, entre el fondo y los personajes; los dos grupos quedan a la vez conectados en el gesto poderoso del santo y el agradecimiento de Drusiana, que avanza los brazos hacia San Juan. El artista ha creado de esta forma una de las composiciones más armoniosas de todo su arte, mucho más verosímil, en todos sus aspectos, que las representaciones para la capilla Scrovegni de Padua .