Bote atrapado entre bloques de hielo

Carus, vinculado a Caspar David Friedrich

Caspar David Friedrich

Pintor alemán (1774-1840) es la principal aportación de Alemania al Romanticismo europeo. Se formó en Copenhague, entonces uno de los centros artísticos más avanzados, y se estableció definitivamente en Dresde. En torno a él se formaría un círculo de artistas, la Escuela de Dresde. Aunque no participó en grandes proyectos decorativos, sus obras fueron adquiridas por los reyes de Prusia Federico Guillermo III y Federico Guillermo IV, así como por el Zar Nicolás I. Su pintura destaca por el tratamiento simbólico del paisaje. Renovó este género a partir de la ruptura de las convenciones cromáticas y de perspectiva, por lo que su influencia se extiende hasta el Expresionismo y el Surrealismo.

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desde 1817, compartió con aquél su particular visión del mundo y de la naturaleza. Más que en sus tratados sobre el paisaje, en sus cuadros se refleja esta asimilación de conceptos: en ellos, al igual que en Friedrich, la naturaleza se impone sobre el hombre, los personajes, la anécdota. Ante ella, toda narración en sustituida por la meditación silenciosa, apoyada en un lenguaje alegórico. Este lenguaje, en su concepción pictórica, procede del Romanticismo

Romanticismo Alemán

Alemania está en plena fiebre filosófica y artística, causada por el Nacionalismo. Los grandes temas de la Alemania imperial, mantenidos hasta Hitler, nacen en este período, envueltos en una grandeza trascendental que dio origen a la idea de lo Sublime.

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; de ahí la preeminencia de los paisajes lunares en la obra de Carus, fuertemente influido por Goethe. Esta obra viene a contener el mismo significado que El mar helado

El Mar Helado

Esta obra de Friedrich de 1823-24 supone la mayor ruptura con el paisajismo clásico. Se conocen numerosas influencias, desde las expediciones al Polo Norte de 1820 a los panoramas de la época, pasando por sus propios estudios sobre bloques de hielo. Sin embargo, se trata de representar, desde la fantasía del pintor, la grandeza trágica de la naturaleza, en la que naufraga un velero. El aspecto inerte, aséptico, mitigado por un contrastado colorido, busca que el espectador interiorice la visión y se mueva a reflexión, abandonando el puro goce estético. Expuesto en 1824 y 1826, fue objeto de duras críticas.

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, aunque expresado de diferente manera. Los elementos son típicamente friedrichianos: el árbol seco, símbolo de la muerte; el cuervo posado en sus ramas, como ave de mal agüero, en una actitud similar a la de Cazador en el bosque

Cazador en el bosque

La más célebre de las obras patrióticas de Friedrich fue realizada entre 1813 y 1814, año en que fue expuesta en Dresde junto a Tumbas de héroes antiguos. Su atrevida estructura geometrizante, típica del pintor, procede de La cruz en las montañas, pero el tema se vincula a sus convicciones nacionalistas exaltadas por la invasión napoléonica.

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; los bloques de hielo que se imponen al bote, al que impiden la navegación... Asimismo, la construcción dual es propia de los pintores de la Escuela de Dresde, con una neta distinción entre el primer plano sombrío y un fondo de perspectiva interrumpida u oculta, generalmente en la niebla. A la izquierda, se alza una inalcanzable ciudad, representativa de la ciudad celestial.