Busqueda de contenidos
obra
A Santiago Rusiñol hay que buscarlo más allá de la pintura: entre la literatura, la música y el coleccionismo y su labor de promotor de un movimiento de agitación cultural moderno, nacionalista y a la vez cosmopolita. En él hallamos la ambigua imagen del artista moderno que oscila entre su supuesta independencia ideológica, su neutralidad política y las críticas a una burguesía vulgar y prosaica en sus ideales, pero de la que depende económicamente.En París, convive con Enric Clarasó y Miquel Utrillo -poco después se les uniría Ramón Casas-. Es un pintor que comienza siendo realista, que pasa por el impresionismo de tonalidades frías y encuadramientos insólitos, de escenas muy a lo Degas como se observa en esta obra de 1890.
Personaje
Literato
Político
Luchó al servicio del emperador de Austria y tras la firma del acuerdo de Campo Formio, se dedicó a viajar por Europa. En España trabajó como agregado de la embajada de Luciano Bonaparte. Luego ingresó en el Instituto y en tiempos de la Restauración se dedicó a difundir el método de enseñanza propuesto por Lancaster. El conde de Laborde también pasó a la historia como uno de los partícipes en la revolución de julio y ejerció como prefecto del Sena y colaborador de Luis Felipe. Como político desempeñó durante varios años el cargo de diputado. De su faceta literaria hay que destacar "Viaje pintoresco e histórico a España", "Itinerario descriptivo de España", "Los monumentos de Francia" y "Examen del método de Lancaster", entre otros.
Personaje
Escultor
La presencia de Pedro Laboria en Nueva Granada servirá para aumentar la influencia de la escultura andaluza en esta región americana. Sus obras aportan una importante renovación como se aprecia en su Santa Bárbara, con grandes muestras de barroquismo, el Rapto de San Ignacio para la iglesia de la Compañía de Jesús o San Francisco Javier.
Personaje
Religioso
De padres humildes, trabajó al servicio del caballero Vega. La toma de Madrid a cargo de los almorávides tras la derrota de Alfonso el Bravo, le obliga a huir y refugiarse en Torrelaguna. En esta población casó con María, después conocida como Santa María de la Cabeza, regresando a Madrid en 1119 para ponerse al servicio de Juan de Vargas. La tradición le atribuye numerosos milagros, como el de que era ayudado a arar los campos por una pareja de ángeles. Beatificado por Paulo V en 1619 y canonizado por Gregorio XV en 1622, su culto salió de España y se extendió a Bretaña, el Franco-Condado y el Tirol. Es el patrón de la ciudad de Madrid y de los campesinos; su fiesta se celebra el 15 de mayo.
Personaje
Arquitecto
Acudió a la Escuela de Bellas Artes, donde fue el ganador del Grand Prix de Roma en 1824. Durante su estancia en Roma, hasta 1830, se dedicó al estudio de las ruinas de la antigüedad. Sus proyectos para la restauración de los templos de Paestum fue uno de los trabajos que más polémica provocó entre sus contemporáneos por su carácter innovador. Al comienzo de la década de los años cuarenta realiza en París la Biblioteca de Sainte-Geneviève. La peculiaridad de este diseño es el empleo del hierro fundido por primera vez para su construcción. Otra innovación era la posibilidad de ver el interior. Su creación más importante fue la Biblioteca Nacional de París. Dentro de este edificio, la sala de lectura es uno de los espacios más importantes por la forma en que finas columnas de hierro sujetan las cúpulas.
lugar
Situado en la comarca del Marquesado, en la provincia de Granada, la localidad de La Calahorra (o Lacalahorra, como en ocasiones se escribe) tiene una historia muy antigua. Las investigaciones arqueológicas han demostrado la existencia de asentamientos pertenecientes al Neolítico, habiéndose determinado también la presencia de los fenicios. En época ibérica, la población recibió el nombre de Arcilacis y, como el resto de la comarca, formó parte de la provincia Bastetana. Se cuenta que, durante el periodo visigodo, La Calahorra y un buen número de fortalezas de la zona estuvieron bajo el señorío del conde don Julián, figura de corte legendario. Con los musulmanes, la localidad pasó a denominarse Alcala Horra o Castillo de las Peñas, estando muy implicada en la guerra de Granada. Finalmente, el territorio fue conquistado por los Reyes Católicos en 1489, siendo entregada La Calahorra y otras poblaciones por el nazarí Cidi Yahya Alnayar. Con la dominación cristiana, la localidad y su comarca pasaron a ser propiedad de D. Rodrigo de Mendoza, siendo La Calahorra la capital de su señorío, el Marquesado del Zenete. La inmensa mayoría de la población, musulmana, acabó por rebelarse contra los señores de La Calahorra, siendo castigados con una feroz represión y el posterior destierro. En consecuencia, el territorio fue repoblado con cristianos viejos procedentes de otras partes de España. La dominación del Marqués del Zenete dejó en la población una huella imborrable, su majestuoso castillo que, levantado en el siglo XVI, muestra trazas tanto medievales como renacentistas. Igualmente renacentista es su iglesia, construida a caballo entre los siglos XVI y XVII. Éstos son sus dos monumentos principales.