Gótico, mudéjar y castillos
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Datos principales
Desarrollo
El arte gótico, introducido por los monjes cistercienses, sigue la ruta y la irradiación de sus fundaciones en Moreruela, Las Huelgas, Poblet, Santes Creus y Alcobaça y tiene sus mejores representaciones en las iglesias catedralicias de ciudades como Burgos, Toledo y León del siglo XIII. También son notables ejemplos las iglesias de Santa María del Mar, Santa María del Pi de Barcelona, y las catedrales de Gerona y de Pamplona, ya en el siglo XIV. Los mudéjares o musulmanes que han permanecido en los territorios ocupados por los cristianos, también desarrollan su propio arte. Grandes ejemplos son edificios como la Seo de Zaragoza, las iglesias del Salvador y de San Martín de Teruel, San Pablo de Zaragoza o Santa María de Calatayud. Contemporáneos de iglesias y monasterios son los numerosos castillos, construidos por la nobleza, y edificios civiles. Merecen ser destacados edificios como las lonjas comerciales de Barcelona, Valencia, Palma de Mallorca y Perpiñán, el palacio real de Barcelona con el Salón del Tinell, el edificio de las atarazanas barcelonesas o el palacio-castillo de Bellver en Palma de Mallorca..., símbolos de la importancia de las ciudades, de la actividad comercial y de la necesidad de realzar el papel de la monarquía.