Batalla de Granada
Desarrollo
Caído el imperio almohade, el último reducto musulmán de la Península es el reino nazarí de Granada, fundado en 1238. Por parte cristiana, Castilla se configura como el reino más poderoso y el mayor enemigo de los nazaríes, mientras Portugal, Navarra y Aragón buscarán objetivos distintos. Desde el principio, el reino de Granada fue un objetivo cristiano. La batalla del Salado, en 1340, supuso un primer revés para los granadinos. La alianza de los reinos de Castilla y Aragón mediante el matrimonio de los Reyes Católicos propició el asalto definitivo sobre el Reino de Granada. El hostigamiento a los nazaríes se produjo en varios frentes. Por mar, fueron atacadas plazas como Marbella, Málaga o Almería. Por tierra, desde Marchena, Córdoba o Ubeda salieron distintas expediciones de conquista. Los ataques nazaríes sobre Tarifa, Utrera o Lucena no evitaron el progresivo debilitamiento del reino del reino. La caída de la capital, Granada, era sólo cuestión de tiempo. En 1491 comenzó el asedio a la ciudad de Granada, que duró casi un año. Tras el incendio del campamento cristiano se reforzó el sitio con la construcción de una ciudad militar, Santa Fe, como centro de operaciones. 50.000 combatientes impusieron un severo cerco alrededor de la ciudad de Granada. Los granadinos, impotentes, realizaron diversas incursiones en campo abierto, que fueron rechazadas por los cristianos. El hambre y las enfermedades minaron su resistencia. Finalmente, la ciudad se rindió el 2 de enero de 1492. La caída del reino de Granada conllevó el destierro para su rey, Boabdil , a quien se concedió el dominio de las Alpujarras. Boabdil se instaló con su familia en Andarax, hoy Laujar, donde vivirá un año. Posteriormente embarcó en Adra con destino a Africa, muriendo en 1493.