Es una de las obligaciones que establece el Corán a sus seguidores para defender y propagar el Islam. Este precepto fue una de las causas que impulsó la expansión de este credo tras la muerte de Mahoma
Abu l-Qasim Muhammad Ibn Abd Al-lah ibn Abd al-Muttalib Ibn Hasim
Profeta y fundador del Islam (La Meca, 570 h.- Medina, 632). Consiguió imponer a las tribus beduinas su religión monoteista y extenderla a toda la península Arábiga, estableciendo su centro de operaciones en Medina. La Meca será considerada la Ciudad Santa por excelencia del Islam, imponiendo la obligación de realizar al menos una peregrinación en la vida a esta ciudad.