Julia
Desarrollo
A pesar de que Augusto se empeñara en reformar las costumbres romanas no pudo evitar que su hija fuera todo un símbolo de la promiscuidad. A los catorce años fue casada con Marcelo, hijo de su tía Octavia , pero pronto enviudó, convirtiéndose -en palabras de Indro Montanelli- en "la viuda alegre de Roma". Augusto no podía consentir la conducta de su hija por lo que buscó un nuevo esposo. El elegido fue Marco Agripa de cuarenta y seis años frente a los 18 de la nueva esposa. Además Agripa estaba felizmente casado, pero Augusto le impuso el divorcio para que tomara como esposa a la bella Julia. Durante el tiempo que duró el matrimonio tuvieron cinco hijos. Pero al morir Agripa su viuda volvió a las andadas, convirtiéndose en la nueva "viuda de Roma". Augusto tomó otra vez medidas y buscó un nuevo esposo: Tiberio . Julia no sentó la cabeza a pesar de su matrimonio y su esposo la abandonó pasado un tiempo. Augusto expulsó a su hija por inmoral y la encerró en Ventetones, donde falleció el mismo año que su padre.