Ludwig Boltzmann

Estudia en la Universidad de Oxford. Tras doctorarse en 1866, se dedica a impartir clases en diferentes universidades de Alemania y Austria. Su aportación a la termodinámica

Del microcosmos al macrocosmos

La revolución científica del siglo XX ha dado lugar a una nueva representación del Universo y de la Naturaleza. Del Universo infinito y estático característico de la época moderna, surgido de las ideas de Newton, se ha pasado al universo dinámico y en expansión de las revoluciones relativista y cuántica. La representación determinista característica de la racionalidad de la civilización occidental en la época moderna, que se articulaba en tres grandes postulados -espacio y tiempo absolutos y principio de causalidad estricto- tiene que ser reemplazada por una nueva racionalidad que, desde el paradigma de la complejidad, sea capaz de integrar de forma coherente y consistente "azar y necesidad".

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es fundamental, como muestran sus publicaciones. Una de ellas sostenía que la segunda ley de la termodinámica se explicaba a partir del movimiento de los átomos. Otra de sus contribuciones a la ciencia, concretamente, a la teoría cinética, fue la formulación del Teorema de Equiparación de la energía, que establecía los grados de libertad de la partícula. Junto con Josef Stefan es autor de la ley de Stefan-Boltzmann. Otro de los asuntos que abordó fue la teoría atómica

Del átomo a la estructura de la vida

La mecánica cuántica está en la base de una nueva rama de la física que ha tenido desarrollos espectaculares en la segunda mitad del siglo: la "física del estado sólido". Así pues, la mecánica cuántica ha permitido, mediante el conocimiento del comportamiento de los fenómenos atómicos y de la estructura de la materia, el desarrollo de nuevas disciplinas como la física de altas energías o la electrodinámica cuántica, o ha posibilitado importantes avances en múltiples disciplinas, desde la biología molecular y la bioquímica a la informática o la superconductividad. Avances que están en la base de algunas innovaciones tecnológicas más trascendentes de los últimos treinta años y que nos sitúan a las puertas de desarrollos aún más espectaculares.

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, aunque sus trabajos nunca fueron aceptados ante la falta de pruebas que demostrasen la existencia de los átomos. Como dato anecdótico cabe citar que en su lápida se inscribió su ecuación: S = K LnW, que define la entropía como el grado de desorden de un sistema. Durante años fue miembro de la Academia de Ciencias de Viena.