Isidoro de Antillón y Marzo

Ingresa en la Universidad

Las universidades

La Universidad vino a cubrir de manera idónea la desorganización y el nomadismo de los maestros. Las primeras en aparecer y también las que alcanzaron mayor relevancia -París, Oxford o Bolonia- fueron aquellas que partieron de la experiencia de escuelas episcopales. Jurídicamente los universitarios eran clérigos, por más que en la práctica no se comportasen como tales e incluso sus planteamientos favoreciesen el laicismo. Esta dependencia de Roma hizo que muy pronto los Pontífices intentaran utilizar al movimiento universitario en favor de los objetivos de la reforma.

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de Zaragoza

Zaragoza, entre la Edad Moderna y la Contemporánea

Como capital de provincia, la Zaragoza del siglo XIX creció como ciudad de servicios: comerciales, militares, administrativos, políticos, jurídicos, educativos y eclesiásticos. Su universidad cuenta, en 1868, con menos de 500 alumnos, y aquella parte de la población que posee tiempo de ocio puede esparcirse en más de siete sociedades artístico-recreativas o en su plaza de toros, con aforo para más de diez mil espectadores. O también en sus dos teatros.

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y realiza derecho, economía política y matemáticas. Completa su formación en Valencia, donde obtiene el doctorado en leyes. Inicia su trayectoria laboral impartiendo clases de geografía e historia en el Real Seminario de Nobles

Nuevas instituciones de enseñanza superior

Por todas España, conforme al espíritu del Siglo de las Luces, se fundaron instituciones de enseñanza superior, como el Seminario de Nobles (1725) de Madrid, el Seminario Patriótico de Vergara, la Academia Militar de Matemáticas, los Reales Colegios de Cirugía, la Real Escuela de Mineralogía de Madrid, el Real Instituto Asturiano de Minas (1794), la gran creación de Jovellanos, los Reales Estudios de San Isidro, en Madrid, la Librería Real (1716), el Real Gabinete de Historia Natural (1752), el Jardín Botánico de Madrid (1755), etc...

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de Madrid

El Madrid de Carlos III

De los monarcas borbónicos, será Carlos III quien tenga mayor influencia sobre la fisonomía de la capital. Su consonancia con las ideas ilustradas imperantes en la época le llevan a promover la construcción de obras públicas, para uso y disfrute de los ciudadanos, a veces continuando la labor iniciada por sus predecesores.

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. Permanece en esta ciudad hasta que comienza la Guerra de la Independencia, lo que provoca su traslado a Zaragoza. Allí, trabajó para la Junta de Defensa. Su siguiente destino fue Sevilla, ciudad en la que creó varias publicaciones periódicas. Más tarde, estableció su residencia en Palma, donde escribía para "La Aurora Mallorquina". Declarado antimonárquico, fue diputado en la Cortes de Cádiz de 1812. Este modo de pensar provocó su encarcelamiento por orden de Fernando VII

Fernando VII

Rey de España (1784-1833) consiguió la abdicación de su padre Carlos IV en 1808 pero Napoleón le despojó del trono en beneficio de José I. Encerrado en Valençay, recuperó su corona en 1813 restaurando el absolutismo. En 1823 sufrió un levantamiento que trajo la promulgación de la Constitución de 1812, iniciando la época liberal que finalizará en 1823, cuando se abre la última etapa de su reinado llamada "Década Ominosa" en la que volverá a imponer el absolutismo. Le sucede su hija Isabel II.

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. De su legado escrito hay que mencionar dos libros de texto dirigidos a sus discípulos. Sus métodos de enseñanza estaban muy ligados a los postulados de Johann Heinrich Pestalozzi

Johan Heinrich Pestalozzi

Pedagogo suizo (Zurich, 1746- 1827). Investigó sobre los distintos métodos de enseñanza.

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. Los mapas acompañaban a los textos para facilitar su comprensión. Otra de sus aportaciones fue la creación de una nomenclatura específica sobre geografía para comprender mejor esta materia. En su obra "Elementos" realiza una fuerte crítica a aquellos geógrafos españoles y extranjeros que han escrito antes inexactitudes sobre España, como sucede con el mapa de España de Tomás López. Observó eclipses lunares y realizó algunos informes sobre éstos. Estudió con detalle la situación de los lugares a partir observaciones astronómicas. Los datos de Tofiño

Vicente Tofiño de San Miguel

Científico español (Cádiz, 1732- Isla de León, Cádiz, 1795). Realizó por encargo un Atlas marítimo de España, en la que también colaboraron Dionisio Alcalá Galiano, José Vargas Ponce y José María Lanz, entre otros.

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no le ofrecían demasiada confianza por sus métodos de medición. Para Antillón resultaban mucho más fiables las aportaciones de Agustín de Betancourt

Agustín de Betancourt

Ingeniero ilustrado español (Puerto de la Cruz, Tenerife, 1758- San Petersburgo, 1824). A él se debe la fundación de las escuelas de ingenieros de Madrid y de San Petersburgo.

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y Simón de Rojas Clemente.