Santa Bárbara
Datos principales
Autor
Fecha
1438
Material
Dimensiones
101 x 47 cm.
Museo
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El maestro de Flemalle fue uno de los grandes autores primitivos flamencos. Intelectual de honda cultura teológica, realizó este tríptico por encargo de Enrique de Werl, teólogo del concilio de Basilea. En la tabla que nos ocupa encontramos la bellísima figura de la santa profundamente embebida en la lectura, de espaldas a una chimenea encendida. La maestría con que están plasmadas las llamas son una característica de este pintor, lo que permite identificar fácilmente su obra. La pose de la figura es un estereotipo atribuido a María, pero un elemento indica que se trata en realidad de Santa Bárbara: el interior de la habitación se abre gracias a una ventana sobre un fondo de paisaje, en el que se aprecia una torre en construcción. Éste es el atributo iconográfico de la santa. La pintura flamenca gustaba de representar interiores en perspectiva, aunque en una perspectiva muy diferente de la cultivada por sus coetáneos del Quattrocento: es una exploración empírica de la realidad, sin aplicación de normas matemáticas ni ópticas, pero con una perfecta interpretación de la realidad tridimensional para trasladarla al plano pictórico bidimensional. El detallismo y el esmero en la pincelada también hablan de su procedencia flamenca: los cabellos se dibujan uno a uno, el paisajito es minucioso en todos sus elementos, así como los objetos del interior y las baldosas del suelo, que introducen la sensación de profundidad. El cuadro fue traído a España en el siglo XVIII, por Carlos IV, permaneciendo en los Reales Sitios de Aranjuez, hasta su traslado al Prado en 1827.