Retrato de Picasso
Datos principales
Autor
Fecha
1947
Material
Dimensiones
64´1 x 54´7 cm.
Museo
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A finales del año en que se pinta este cuadro, 1947, Dalí conseguía publicar el núm. 2 de su propia revista, titulada "Dali News. Monarch of the Dailies". Toda la primera plana de ese número la ocupaba el siguiente titular: TRUMAN, MARSHALL, PICASSO, DALI EN LA CRISIS DEL ARTE Y LA EXTENSIÓN DE LA REVUELTA. Con un titular tan original recogía algunas noticias en las que Truman y Marshall se habían mostrado opuestos a determinadas manifestaciones del arte moderno. Dalí no ocultaba su desprecio hacia ciertos críticos especializados y Picasso era objeto de un vivo interés, como siempre, por parte de Dalí. De Picasso -a quien retrata en este lienzo que vemos- decía Dalí que era "uno de los mayores anarquistas y destructores de la historia, que tiene la gloria de haber destruido la pintura de los Salones y la belleza pseudo-oficial". Pero con esa actitud Picasso, según Dalí, también había conseguido que los artistas más jóvenes perdieran todo interés por el arte clásico del pasado, por la forma tradicional de un Rafael , por ejemplo. Por eso sería el propio Dalí el encargado de restaurar algunos principios del verdadero arte clásico; en el número de la revista hacía un juego de palabras con su nombre y se convertía en Dalí el Salvador. En el retrato de Picasso existe una impresión general de animal o de monstruo, cuyas partes del rostro se alargan y deforman hasta hacerlo irreconocible del todo. Además, la confusión de materias se repite en ese busto de piedra que se convierte en carne. Como en obras anteriores, existe un aire muy familiar de "cadavre exquis" (cadáver exquisito), esa técnica inventada por los surrealistas que consistía en la realización colectiva de un mismo dibujo. Cada uno realizaba una parte sin ver lo que ya se había pintado, obteniéndose resultados sorprendentes.