A lo largo del siglo XIII, con la guerra y repoblación se vincula la creación de las bastidas o villas nuevas, cuyos vecinos viven prácticamente una doble condición civil y militar en un territorio en litigio que hay que defender.
se encuentra en el cruce de los dos ejes principales de la ciudad que, de este modo, se comunica de inmediato con las cuatro puertas del recinto amurallado.