Marta y María Magdalena
Datos principales
Autor
Fecha
1597-98
Estilo
Material
Dimensiones
97,8 x 132,7 cm.
Museo
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Los temas que Caravaggio trató en su pintura fueron similares y se conocen muchas variaciones y copias de los mismos. Esta situación era común en la pintura de la época, como ocurre también en los pintores españoles (Pacheco y Zurbarán ). Caravaggio introduce una nueva manera de tratar la pintura religiosa, en arreglo a los nuevos dictados de la Iglesia Católica, que pretendía aproximar el dogma a los fieles incultos. De este modo, Caravaggio comienza a desmitificar los personajes y las situaciones, poniendo a los ángeles y a los santos los rostros de chicuelos de la calle, e incluso su propio retrato. En el lienzo que ahora nos ocupa, la anécdota religiosa es minimizada frente al aspecto cortesano y de género de la escena. Se trata de la reconvención que Santa Marta hace a Santa María Magdalena, a la que reprocha su vanidad en las cosas mundanas. La vanidad femenina se pone de manifiesto a través del riquísimo vestido, el cuidado peinado de la dama, la florecilla, el peine de marfil y especialmente, en el espejo, que simboliza la belleza superficial, no duradera. Caravaggio ha considerado la escena casi como la de una joven dama asistida por su criada y sólo el título de la pieza orienta acerca de su significado religioso, pues ningún otro elemento podría hacer pensar que no es una obra profana.