Estatuilla de un dios (Ugarit)

La Ugarit correspondiente al Bronce Reciente, que cubría más de 20 hectáreas de superficie, no fue sólo una ciudad, sino también una verdadera capital, en la que existía un disciplinado poder político, controlado por los reyes. No existió un urbanismo organizado, pues las calles eran de corta longitud y anchura y, a menudo, laberínticas. El verdadero barrio residencial estaba en las cercanías del Palacio real; contó con las mejores viviendas, algunas de complicada planta, aunque la tónica común fue una sencilla y simple organización de los espacios. En general, las casas ugaríticas se concibieron también como lugares de enterramiento.

En 1928 se descubrió Ugarit de manera casual. El Bronce Reciente (1600-1200 a. C.) conoció el apogeo de la civilización ugarítica. La ciudad se organizó y se enriqueció con magníficas residencias, entre ellas un suntuoso Palacio real. La ciudad pasó a depender de los hititas hasta su destrucción por los pueblos del Mar hacia 1885 a.C.

Los abundantes objetos metálicos hallados en Ugarit indican el lugar ocupado por la metalurgia en esta sociedad. La variedad de joyas en oro, plata, electro y bronce, tanto de fabricación local como foránea, hallada en Ugarit es muy considerable. Se trata, sobre todo, de amuletos.