El templo de Juno en Agrigento
Datos principales
Autor
Fecha
h. 1830
Estilo
Material
Dimensiones
54 x 72 cm.
Museo
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Friedrich nunca deseó viajar a Roma, a Italia, que en la época era la meta de todo artista que se preciara, como Ingres o los nazarenos Cornelius y Overbeck . En 1816, ante la insistencia de su amigo Johan Ludwig Gebhard Lund, Friedrich declinaba la invitación. Su gusto era nórdico y aborrecía Italia en la medida en que su imagen venía deformada por la difusión de lo que los Nazarenos estaban haciendo en aquel momento. Su meta era Islandia, isla a la que en varias ocasiones se dispuso a viajar, como en 1811, aunque sin éxito. Era el paradigma de lo nórdico. A diferencia de Cornelius, que triunfaba en Alemania, él no comprendía la necesidad de empaparse de clasicismo renacentista : "Puedo imaginarme el marchar a Roma y vivir allí. Pero la idea de volver al norte desde allí me hace estremecer; para mí, es como ser enterrado vivo". Por ello, y dadas las concomitancias de estilo, esta obra aparece en los catálogos de Carl Gustav Carus quien, influenciado por Goethe, se distanció de la línea puramente espiritual de Friedrich y marchó a Italia en la primavera de 1828, en donde pasó unos meses. En cualquier caso, la obra posee una indudable influencia de Friedrich y el hecho de haber sido realizada por Carus no modificaría la datación. Sin embargo, se ha demostrado que la autoría corresponde al artista de Greifswald. En 1830 escribió: "Todo tenía que ser italiano (para los críticos de arte).
.. Sería posible hacer esto en casa a partir de grabados, sin tener que hacer un viaje especial a Roma". Así lo hizo: se sirvió de una aguatinta ejecutada por el grabador suizo Franz Hegi, a partir de una obra del dibujante alemán Karl Ludwig Frommel, que fue publicada en 1826 en la obra "Viaje pintoresco a Sicilia". Tomándola como base, Friedrich la reinterpreta según su visión: desaparecen las figuras, los turistas. Al contrario, el templo se hace inaccesible al quedar separado de la terraza. Los olivos han sido eliminados; los bloques de piedra caídos son reelaborados como rocas del Elbsandsteingebirge. Como sus robles, también paganos, aparece aislado en un atardecer sin límites.
.. Sería posible hacer esto en casa a partir de grabados, sin tener que hacer un viaje especial a Roma". Así lo hizo: se sirvió de una aguatinta ejecutada por el grabador suizo Franz Hegi, a partir de una obra del dibujante alemán Karl Ludwig Frommel, que fue publicada en 1826 en la obra "Viaje pintoresco a Sicilia". Tomándola como base, Friedrich la reinterpreta según su visión: desaparecen las figuras, los turistas. Al contrario, el templo se hace inaccesible al quedar separado de la terraza. Los olivos han sido eliminados; los bloques de piedra caídos son reelaborados como rocas del Elbsandsteingebirge. Como sus robles, también paganos, aparece aislado en un atardecer sin límites.