El Neolítico
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Datos principales
Desarrollo
Entre el 5.000 y el 3.200 antes de Cristo se desarrolla en la cuenca mediterránea el periodo neolítico. En Oriente Próximo se generarán algunos rasgos culturales que se extenderán hacia Occidente a lo largo de los milenios siguientes. Las principales características del Neolítico se pueden resumir en el surgimiento de la agricultura, la domesticación de animales, el cambio a un modo de vida en poblados permanentes y la invención de la cerámica. No obstante, estos cambios surgen a lo largo de un proceso de miles de años. En la Península ibérica, las primeras comunidades a las que se puede adjudicar una forma de vida neolítica se hallan en la costa mediterránea, ocupando generalmente cuevas elevadas y abrigos naturales. Su medio de subsistencia alternaba la caza y la recolección con el cultivo de cereales y leguminosas, además de la cría de ovejas, cabras y cerdos. La cerámica es uno de los grandes avances, pues permite almacenar y transportar los alimentos. También se puede percibir un desarrollo de las herramientas y las técnicas agrícolas, como la hoz para la siega y el vareo de los frutos. Por último, cabe citar una mayor complejidad en las estructuras sociales y simbólicas, siendo muy frecuentes los asentamientos sedentarios y los enterramientos con ajuar, como el de la Cueva de los Murciélagos de Albuñol, en Granada.