Las diosas aztecas
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Datos principales
Desarrollo
La presencia femenina en el complejo panteón azteca es rica y variada. De hecho, los mitos y leyendas de la historia mexica están plagados de referencias a la actuación de divinidades, en las que lo femenino tiene singular importancia. Generalmente estas divinidades están relacionadas con la lluvia, la fertilidad, la agricultura o el maíz. Y los rituales en honor a las diosas tenían un lugar preferente en las ceremonias desempeñadas por las mujeres en el entorno doméstico. Además, en algunas ocasiones las mujeres se ataviaban con atributos propios del dios del maíz, tratando así de enfatizar su importancia. En general, las divinidades aztecas resultan todavía confusas, en cuanto a su nomenclatura y sus atribuciones. Un lugar especial ocupa la madre de Huitzilopochtli, Cuahtlicue, "la diosa con falda de serpientes", símbolo de feminidad, o divinización de lo femenino. Su leyenda se refiere a la concepción milagrosa de su hijo mientras ella se encontraba realizando trabajos de purificación. Cuando sus numerosos hijos quisieron matarla, por lo que consideraban una afrenta, Hiutzilopochtli salió de su vientre con todas sus armas, y persiguió a sus hermanos, matando a muchos de ellos. Gráfico Otras divinidades importantes vinculadas a lo femenino son Chalchihuitlicue, la "dama de la falda de jade", o Chicomecoatl, "Siete serpientes". La primera, hermana del dios de la lluvia Tlaloc, era la diosa de las tormentas, manantiales y riachuelos. La segunda, diosa del maíz, recibía ofrenda de sacrificios humanos en su fiesta. Ya se ha indicado antes que en los ceremoniales realizados en honor de las diosas del panteón azteca, tenían especial protagonismo las mujeres.