La ciudad
Compartir
Datos principales
Rango
vida cotidiana XVIII
Desarrollo
Fuera de las grandes mansiones que acabamos de describir, la ciudad es una mezcla abigarrada de viviendas, divididas en barrios con sus propias leyes y autoridades -los comisarios franceses, los alcaldes de barrio, españoles...- para su mejor gobernación. Estas otras construcciones dan aún menos oportunidades a la privacidad. Suelen poseer varias alturas, todas habitadas y comunicadas por una o varias escaleras con ventanas. Las habitaciones dan a descansillos. Los pisos principales -del primero al cuarto- se reservan a familias burguesas y de clase media, el bajo lo ocupa una tienda o taller, a medio camino entre el espacio interior y el exterior, cuyos aprendices y empleados se alojan en el entresuelo o en los desvanes, con frecuencia propiedad del mismo maestro o comerciante que se los arrienda. Cada habitación acoge a varias personas que duermen en jergones utilizados, además, para guardar el dinero que a duras penas consiguen reunir.