Condesa de Haussonville
Datos principales
Autor
Fecha
1845
Estilo
Material
Dimensiones
136 x 92 cm.
Museo
Contenidos relacionados
Ingres repite sus principales trucos a la hora de realizar un retrato aristocrático. La dama que encarga el lienzo está situada de pie, algo poco habitual, pues Ingres muestra a sus modelos recostadas entre lujosos almohadones, como si fueran odaliscas de la Francia moderna. Sin embargo, la riqueza de las telas, la minuciosidad de los detalles es la misma de otros retratos. Este rasgo es consecuente con la posición del artista, que trabaja para los más elitistas personajes de la Restauración borbónica.La misión de un buen pintor en este ambiente debía ser captar con todo detalle la magnificencia del ambiente en el que estas personas se desenvuelven. Sin embargo, Ingres pone gran énfasis en la sencillez de la personalidad de sus damas, con peinados simples, sin maquillaje y con grandes ojos que miran directamente al espectador. Ingres obligaba a sus clientes a posar durante horas, a cambiar miles de veces de postura hasta que el artista consideraba que tenían la pose ideal. Esta pequeña tortura dota a sus retratos de una extraordinaria elegancia, a la vez de parece plantear una relación amistosa y directa del personaje con su espectador. Por último, mencionaremos que Ingres nuevamente recurre a un espejo colocado a espaldas de la condesa, no para ampliar el espacio, sino para recrearse en la bella nuca de su modelo, igual que hizo en otros retratos, como el de Madame de Senonnes .