Catedral de Canterbury
Localización
Desarrollo
El constructor de la catedral de Canterbury fue el arzobispo Lanfranco, designado por el duque Guillermo en 1070. Iniciadas de inmediato las obras, en el templo se celebraban ya ceremonias litúrgicas en 1077. En la cripta de Canterbury, durante el primer cuarto del siglo XII, el estilo románico alcanza sus formas más maduras en la concepción del capitel. Los motivos esculpidos surgen acusadamente sobre el fondo de la cesta, con un estilo expresivo y vigoroso. La serie de animales tocando instrumentos musicales se inspira en las ilustraciones humorísticas del scriptorium de Canterbury. Tras un incendio, la catedral fue reconstruida a partir de 1174. Con ello se produjo la expansión del gótico francés de la Isla de Francia hacia Inglaterra , mediante la llegada de maestros franceses a la isla. En los trabajos de la Catedral de Canterbury fue reclamado el maestro Guillermo de Sens. Este caso, perfectamente documentado, concierne a la arquitectura y a un periodo inicial del gótico. Se ha creído que cuando en 1378 el obispo de Canterbury, Sudbury, decide derribar las naves antiguas de la catedral y levantar otras nuevas confía el proyecto a Yeveley, aunque esto no está documentado. La muerte del obispo paró la obra que se continuará ya en los años noventa. Interiormente es una construcción de grandes dimensiones, donde la diferencia de altura entre las naves es pequeña, lo que no impide la existencia de dos pisos en la nave central por encima de las arquerías de separación. La cubierta es relativamente simple, comparada con ejemplos anteriores. La Catedral de Canterbury es uno de los más importantes centros de peregrinación cristianos, debido a que allí se halla el sepulcro de Santo Tomás Becket .