Crucifixión en una iglesia
Datos principales
Alias
Altar de los Siete Sacramentos
Autor
Fecha
1445 h.
Estilo
Material
Dimensiones
200 x 97 cm.
Museo
Contenidos relacionados
La composición de este cuadro de Rogier van der Weyden está utilizando un modelo que había inaugurado Jan van Eyck algunas décadas antes, como podemos ver en su Virgen en una iglesia . Se trata de una idea por la que una escena sagrada aparece mágicamente desarrollada en el seno de una iglesia, dentro de sus naves de arquitecturas góticas. Es un milagro, un círculo cerrado que concluye la devoción cristiana: Jesús crucificado inicia una nueva era, en la que el hombre ha sido salvado del pecado original. En memoria de Jesús se celebra el ritual de la Eucaristía en edificios apropiados, las iglesias y catedrales, en las que de nuevo se aparece Cristo muerto, el origen de todo. La escena de la Crucifixión sería perfectamente ortodoxa si estuviera ambientada en el monte Calvario: Cristo aparece en una elevada cruz, ya muerto; María desmayada en el suelo es atendida por San Juan, mientras las santas mujeres lloran por Cristo. Sin embargo, Weyden ha trasladado los personajes a través del tiempo para situarlos en el interior de una de las catedrales góticas donde los clientes del cuadro, sus familiares, el propio pintor, iban a celebrar los sacramentos. Es un recordatorio de que la muerte de Cristo está presente siempre en la vida del fiel, que no debe olvidar su misión en la iglesia a la que acude diariamente. El cuadro es un panel central de un tríptico que estaba destinado también a una iglesia. Es decir, es una imagen de la manifestación de lo sagrado en el espacio sagrado por excelencia.