Alto Imperio
Desarrollo
Con Augusto se inaugura el Imperio, un sistema en el cual el poder político real estaba en manos de un solo individuo, el emperador, en virtud de su imperium maius y de la auctoritas derivada de la tribunicia potestas y secundariamente de los otros títulos concedidos al emperador. El Senado quedó reducido a un órgano de apoyo de ese poder político.
El arte romano, durante este periodo, se expandió junto con el imperio a lo largo y ancho del Mediterráneo, siendo uno de los principales exponentes de la avanzada civilización romana.
El arte romano tiene sus raíces en diversas influencias, especialmente del mundo etrusco y griego. La fuerte organización y personalidad del Imperio Romano exigieron un arte y una arquitectura que combinaran funcionalidad y propaganda. Así nació un arte muy centralizado y unitario que abarcó todo el imperio, no solo en Roma, sino también en todas sus provincias.
El arte es una de las manifestaciones artísticas más significativas de la historia del mundo occidental, ya que su influencia ha perdurado a lo largo de los siglos en toda Europa. A lo largo de la historia, incluso en períodos alejados del canon romano, como el gótico, se ha percibido su influencia.
La arquitectura se caracteriza por muros gruesos y bóvedas de cañón, arista y anular. Los materiales utilizados incluyen piedra, ladrillo y hormigón. Se emplean columnas, pilares y pilastras de distintos órdenes, como el toscano y el compuesto, con influencias etruscas y corintias.
En la arquitectura religiosa, se observan influencias etruscas y griegas, con plantas rectangulares y circulares, como en el Panteón de Agripa. La arquitectura funeraria incluye mausoleos piramidales y circulares, como el de Cayo Cestio, y columbarios con nichos y lápidas. En la arquitectura civil, el foro era el centro de la actividad socioeconómica, con domus, viviendas de patricios (villae) y casas de alquiler. La arquitectura pública cercana al foro incluye teatros, termas, basílicas y monumentos decorativos como altares, arcos y columnas ciclópeas. Finalmente, la arquitectura de ingeniería abarca acueductos, calzadas y puentes.
En la arquitectura religiosa, se observan influencias etruscas y griegas, con plantas rectangulares y circulares, como en el Panteón de Agripa. La arquitectura funeraria incluye mausoleos piramidales y circulares, como el de Cayo Cestio, y columbarios con nichos y lápidas. En la arquitectura civil, el foro era el centro de la actividad socioeconómica, con domus, viviendas de patricios (villae) y casas de alquiler. La arquitectura pública cercana al foro incluye teatros, termas, basílicas y monumentos decorativos como altares, arcos y columnas ciclópeas. Finalmente, la arquitectura de ingeniería abarca acueductos, calzadas y puentes.
La escultur, influenciada por las tradiciones griega y etrusca, se realizaba en mármol y bronce, utilizando técnicas como el trépano para crear profundos relieves y claroscuros, o máscaras de cera cubiertas de mármol. El bulto redondo se utilizaba en bustos, cabezas y figuras completas. Los sarcófagos se adosaban a las paredes y se decoraban en su parte visible.
El retrato evolucionó a lo largo de las épocas. Durante la República (III-I a.C.), los retratos eran realistas, con claroscuros y facciones duras. En la etapa de Augusto (Alto Imperio, I d.C.), se representaba al emperador en diversas formas: como cónsul, divinizado, pretor, héroe y sumo pontífice. En el Bajo Imperio (I-III d.C.), se representaban las dinastías flavia, julia, antonina, severa y constantina de diversas maneras.
Por su parte la narrativa histórica se encargaba de resaltar las hazañas de héroes y emperadores, representando paisajes en bajo relieve, elementos arquitectónicos en medio relieve y figuras humanas en alto relieve, siempre con un carácter propagandístico.