Desarrollo
Babilonia, la ciudad varias veces resurgida de sus ruinas, con los nuevos señores, los persas, conoció todavía pálidos días de esplendor artístico. Tomada, finalmente, por Alejandro Magno , sería el macedonio quien la reconstruiría, haciendo de ella su capital de Oriente; sin embargó, la pronta muerte de aquél, en el año 323, cortó en seco la historia de la Babilonia monumental y artística de la nueva fase helenística. Paulatinamente, la ciudad quedó abandonada a su suerte, convirtiéndose en un campo de polvo y olvido... Con ello la Historia del Arte mesopotámico había finalizado.