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Datos principales
Desarrollo
MEMORIAL 43F Ya he representado de cuanta importancia es en aquellas partes 6 mil quintales de fierro y debe advertirse cuánto puede tardar el socorro del que más será menester; y de que en el Pirú no hay mosquetes ni arcabuces y que es fuerza los he de llevar de España y una partida de acero y algunas herramientas labradas. Dénseme 40 quintales de hierro bruto y los dos mil que quedan conviértanse con ayudar lo demás que fuera necesario en 500 mosquetes y mil arcabuces, el acero y las herramientas labradas que pareciere convenir. MEMORIAL 44 Señor. El Capitán Pedro Fernández de Quirós. V.M. ordenó al Consejo de Indias me diere despachos a mi satisfacción, en orden a la población de las tierras Australes, a donde V.M. se sirve mandarme. El secretario Pedro de Ledesma me entregó una cédula, cuya copia va con éste, tan falta de claridad y fuerza, cuanto es fuerza las lleve, para que el Virrey del Pirú entienda bien lo que V.M. manda (234). En razón del decreto de V.M. se me ofrecen dos puntos que advertir. El primero, que, pues, de los cabos que pedí, y el Consejo de Estado consultó, V.M. sólo niega la lleva de la gente de España y limita el hierro. El cierto que todos los demás cabos me tiene V.M. concedidos y éstos no se me han dado. El segundo, que la cédula que recibí no es a mi satisfacción, y la satisfacción que quiero es sólo que esta obra se encamine bien y asegure desde aquí. Digo, pues, Señor, que falta en la cédula mandar al virrey que sin réplica a cosas que se le pueden ofrecer, y sin embargo de contrario alguno, y con toda brevedad, gaste en despacharme 500 ducados de lo más bien parado de la hacienda real a mi satisfacción, para ver así la voluntad de V.
M., y que avise del breve y buen despacho que me ha dado. Falta una sobre cédula o carta de V.M. al virrey en confirmación de lo que V.M. le ordena. Falta una cédula que hable generalmente con todos los ministros de V.M. para que me ayuden y ninguno impida a las personas que por el camino y en Lima se pueden ofrecer y yo buscar por necesarios a la obra. Fáltame el título de Gobernador y Capitán General que no puedo excusar, que si pudiera ir sin él no lo pidiera. Falta una cédula para que si yo muriese pueda nombrar la persona que hubiese mostrado el tiempo, que merece ocupar aquel lugar. Fáltame saber lo que debo y puedo hacer en aquellas partes y falta a los naturales dellas todo el bien que ha muchos siglos esperan: falta a V.M. ser protector de nuevas Indias, ganar las riquezas dellas con la fama y gloria de haber dado principio, medio y fin a esta mayor de las empresas. Suplico a V.M. no dilate más tan grandes pérdidas. Sólo tengo dos cédulas: la una de 3 mil quintales de hierro y la otra de ayuda de costa. Advierto a V.M. que cuando fui a descubrir llevé cédulas todo lo que pudo ser, apretadas, claras y firmes, y que con serlo, tuve tanto que averiguar en Lima, cuanto lo puedo mostrar luego, y que ha tres años que aquí a los ojos de V.M. pleiteo con tradiciones porque V.M. no pierda esta merced que nuestro Señor le hace. Suplico a V.M. considere que todo cuanto pido es debido a este gran caso y conforme a lo que V.M. me tiene concedido.
MEMORIAL 45 Señor. El Capitán Pedro Fernández de Quirós. V.M. mandó al Consejo de Indias me diera despachos a mi satisfacción, para que el virrey del Pirú me dé lo que fuera menester a la población de las tierras Australes, a donde V.M. se sirve mandarme ir. El secretario Pedro de Ledesma me entregó unas cédulas tan faltas de claridad y fuerza, cuanto es fuerza las lleve para que el virrey entienda bien la voluntad de V.M. y yo consiga la merced que V.M. tiene hecha a la causa y a mí en bien de tantos. Suplico a V.M. se sirva de despacharme de su real mano, o mandar al Consejo de Estado me despache como sabe que conviene, y porque le toca adquirir y conservar los reinos y dar principio seguro al gobierno de ellos, y porque creó esta causa y me despachó la vez primera. Si V.M. no manda que se ponga más calor en la ejecución desta su causa, las contradicciones, desvíos y largas la han de acabar aquí y a mí con ella.
M., y que avise del breve y buen despacho que me ha dado. Falta una sobre cédula o carta de V.M. al virrey en confirmación de lo que V.M. le ordena. Falta una cédula que hable generalmente con todos los ministros de V.M. para que me ayuden y ninguno impida a las personas que por el camino y en Lima se pueden ofrecer y yo buscar por necesarios a la obra. Fáltame el título de Gobernador y Capitán General que no puedo excusar, que si pudiera ir sin él no lo pidiera. Falta una cédula para que si yo muriese pueda nombrar la persona que hubiese mostrado el tiempo, que merece ocupar aquel lugar. Fáltame saber lo que debo y puedo hacer en aquellas partes y falta a los naturales dellas todo el bien que ha muchos siglos esperan: falta a V.M. ser protector de nuevas Indias, ganar las riquezas dellas con la fama y gloria de haber dado principio, medio y fin a esta mayor de las empresas. Suplico a V.M. no dilate más tan grandes pérdidas. Sólo tengo dos cédulas: la una de 3 mil quintales de hierro y la otra de ayuda de costa. Advierto a V.M. que cuando fui a descubrir llevé cédulas todo lo que pudo ser, apretadas, claras y firmes, y que con serlo, tuve tanto que averiguar en Lima, cuanto lo puedo mostrar luego, y que ha tres años que aquí a los ojos de V.M. pleiteo con tradiciones porque V.M. no pierda esta merced que nuestro Señor le hace. Suplico a V.M. considere que todo cuanto pido es debido a este gran caso y conforme a lo que V.M. me tiene concedido.
MEMORIAL 45 Señor. El Capitán Pedro Fernández de Quirós. V.M. mandó al Consejo de Indias me diera despachos a mi satisfacción, para que el virrey del Pirú me dé lo que fuera menester a la población de las tierras Australes, a donde V.M. se sirve mandarme ir. El secretario Pedro de Ledesma me entregó unas cédulas tan faltas de claridad y fuerza, cuanto es fuerza las lleve para que el virrey entienda bien la voluntad de V.M. y yo consiga la merced que V.M. tiene hecha a la causa y a mí en bien de tantos. Suplico a V.M. se sirva de despacharme de su real mano, o mandar al Consejo de Estado me despache como sabe que conviene, y porque le toca adquirir y conservar los reinos y dar principio seguro al gobierno de ellos, y porque creó esta causa y me despachó la vez primera. Si V.M. no manda que se ponga más calor en la ejecución desta su causa, las contradicciones, desvíos y largas la han de acabar aquí y a mí con ella.