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Datos principales
Desarrollo
Cómo el licenciado Luis Ponce, después que hubo presentado las reales provisiones y fue obedecido, mandó pregonar residencia contra Cortés e los que habían tenido cargos de justicia, y cómo cayó malo de mal de modorra y della falleció, y lo que más le sucedió Después que hubo presentado Luis Ponce las reales provisiones, con mucho acato de Cortés y el cabildo y los demás conquistadores fue obedecido; mandó pregonar residencia general contra Cortés y contra los que habían tenido cargo de justicia y habían sido capitanes; y como muchas personas que no estaban bien con Cortés, e otros que tenían justicia sobre lo que pedían: qué priesa se daban de dar quejas de Cortés y de presentar testigos, que en toda la ciudad andaban pleitos; y las demandas que le ponían, uno que no les dio partes de oro, como era obligado, e otros le demandaban que no les dio indios, conforme a lo que su majestad mandaba, y que los dio a criado de su padre Martín Cortés y a otras personas sin inéditos, criados de señores de Castilla. Otros le demandaban caballos que les mataron en las guerras, que puesto que habían habido mucho oro de que se les pudiera pagar, que no les satisfizo por quedarse con el oro. Otros demandaban afrenta de sus personas, que por mandado de Cortés les habían hecho y un Juan Xuárez, cuñado suyo, le puso una mala demanda de su mujer de Cortés, doña Catalina Xuárez, "Marcaida", hermana del Juan Xuárez, que la había ahogado una noche el mismo Cortés; y en aquella sazón había venido de Castilla un fulano de Barrios, con quién casó Cortés a una hermana de Xuárez, y cuñada suya; se apaciguó por entonces aquella demanda que le había puesto el Juan Xuárez.
Este Barrios es con quien tuvo pleitos un Miguel Díaz sobre la mitad del pueblo de Mestitan, como dicho tengo en el capítulo que de ello habla. Volvamos a nuestra residencia, que luego que se comenzó a tomar quiso nuestro señor Jesucristo que por nuestros pecados y desdicha cayó malo de modorra el licenciado Luis Ponce, y fue desta manera, que viniendo del monasterio de señor san Francisco de oír misa, le dio una muy recia calentura, y echóse en la cama y estuvo cuatro días amodorrado, sin tener el sentido que convenía, y todo lo más del día y de la noche era dormir; y como aquello vieron los médicos que le curaban, que se decían el licenciado Pedro López y el doctor Ojeda y otro médico que él traía de Castilla, todos a una les pareció que se confesase y recibiese los santos sacramentos, y el mismo licenciado lo tuvo en gran voluntad; y después de recibidos con gran humildad y contrición, hizo testamento, y dejó por su teniente de gobernador al licenciado Marcos de Aguilar, que había traído consigo desde la España. Otros dijeron que era bachiller, y no licenciado, y que no tenía autoridad para mandar; y dejóle el poder desta manera: que todas las cosas de pleitos y debates y residencias, y la prisión del factor y veedor, se estuviese en el estado que lo dejaba hasta que su majestad fuese sabidor de lo que pasaba, y que luego hiciese mensajeros en un navío a su majestad. Y ya hecho su testamento y ordenada su ánima, al noveno día que cayó malo dio la ánima a nuestro señor Jesucristo, y como hubo fallecido, fueron grandes los lutos y tristezas que todos los conquistadores a una sintieron: como si fuera padre de todos, así lo lloraban, porque ciertamente él, venia para remediar a los que hallase que derechamente habían servido a su majestad, y antes que muriese así lo publicaba; y le hallaron en los capítulos e instrucciones que de su majestad traía, que diese de los mejores repartimientos de indios a los conquistadores, de manera que conociesen mejoría en todo.
Y Cortés, con todos los demás caballeros de la ciudad, se pusieron luto y le llevaron a enterrar con gran pompa a San Francisco, y con toda la cera que entonces se pudo haber: fue su enterramiento muy solemne para en aquel tiempo. Oí decir a ciertos caballeros que se hallaron presentes cuando cayó malo, que, como Luis Ponce era músico y de suyo regocijado, por alegrarle le iban a tañer con una vihuela y a dar música, y que mandó que le tañesen una baja, estando en la cama, con los dedos y pies, y los meneaba hasta acabar la baja; y acabada perdió la habla, que fue todo uno. Pues como fue muerto y enterrado de la manera que dicho tengo, oír el murmurar que en México había de las personas que estaban mal con Cortés y con Sandoval, que dijeron y afirmaron que le dieron ponzoña con que murió, que así había hecho al Francisco de Garay ; e quien más lo afirmaba era fray Tomás Ortiz, ya que venía por prior de ciertos frailes que traía en su compañía, que también murió de modorra el mismo prior de ahí a dos meses, él y otros frailes, y también quiero decir que pareció ser que en el navío en que vino el Luis Ponce, que dio pestilencia en ellos, porque a más de cien personas que en él venían les dio modorra y dolencia, de que murieron en la mar, y después de desembarcados en la villa de Medellín murieron muchos dellos, y aun de los frailes quedaron muy pocos y con ellos murió su prior de ahí a pocos meses; y fue fama que aquella modorra cundió en México .
Este Barrios es con quien tuvo pleitos un Miguel Díaz sobre la mitad del pueblo de Mestitan, como dicho tengo en el capítulo que de ello habla. Volvamos a nuestra residencia, que luego que se comenzó a tomar quiso nuestro señor Jesucristo que por nuestros pecados y desdicha cayó malo de modorra el licenciado Luis Ponce, y fue desta manera, que viniendo del monasterio de señor san Francisco de oír misa, le dio una muy recia calentura, y echóse en la cama y estuvo cuatro días amodorrado, sin tener el sentido que convenía, y todo lo más del día y de la noche era dormir; y como aquello vieron los médicos que le curaban, que se decían el licenciado Pedro López y el doctor Ojeda y otro médico que él traía de Castilla, todos a una les pareció que se confesase y recibiese los santos sacramentos, y el mismo licenciado lo tuvo en gran voluntad; y después de recibidos con gran humildad y contrición, hizo testamento, y dejó por su teniente de gobernador al licenciado Marcos de Aguilar, que había traído consigo desde la España. Otros dijeron que era bachiller, y no licenciado, y que no tenía autoridad para mandar; y dejóle el poder desta manera: que todas las cosas de pleitos y debates y residencias, y la prisión del factor y veedor, se estuviese en el estado que lo dejaba hasta que su majestad fuese sabidor de lo que pasaba, y que luego hiciese mensajeros en un navío a su majestad. Y ya hecho su testamento y ordenada su ánima, al noveno día que cayó malo dio la ánima a nuestro señor Jesucristo, y como hubo fallecido, fueron grandes los lutos y tristezas que todos los conquistadores a una sintieron: como si fuera padre de todos, así lo lloraban, porque ciertamente él, venia para remediar a los que hallase que derechamente habían servido a su majestad, y antes que muriese así lo publicaba; y le hallaron en los capítulos e instrucciones que de su majestad traía, que diese de los mejores repartimientos de indios a los conquistadores, de manera que conociesen mejoría en todo.
Y Cortés, con todos los demás caballeros de la ciudad, se pusieron luto y le llevaron a enterrar con gran pompa a San Francisco, y con toda la cera que entonces se pudo haber: fue su enterramiento muy solemne para en aquel tiempo. Oí decir a ciertos caballeros que se hallaron presentes cuando cayó malo, que, como Luis Ponce era músico y de suyo regocijado, por alegrarle le iban a tañer con una vihuela y a dar música, y que mandó que le tañesen una baja, estando en la cama, con los dedos y pies, y los meneaba hasta acabar la baja; y acabada perdió la habla, que fue todo uno. Pues como fue muerto y enterrado de la manera que dicho tengo, oír el murmurar que en México había de las personas que estaban mal con Cortés y con Sandoval, que dijeron y afirmaron que le dieron ponzoña con que murió, que así había hecho al Francisco de Garay ; e quien más lo afirmaba era fray Tomás Ortiz, ya que venía por prior de ciertos frailes que traía en su compañía, que también murió de modorra el mismo prior de ahí a dos meses, él y otros frailes, y también quiero decir que pareció ser que en el navío en que vino el Luis Ponce, que dio pestilencia en ellos, porque a más de cien personas que en él venían les dio modorra y dolencia, de que murieron en la mar, y después de desembarcados en la villa de Medellín murieron muchos dellos, y aun de los frailes quedaron muy pocos y con ellos murió su prior de ahí a pocos meses; y fue fama que aquella modorra cundió en México .