Inmaculada de El Escorial
Datos principales
Autor
Fecha
1656-60
Estilo
Material
Dimensiones
206 x 144 cm.
Museo
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Cuando Pacheco dictó las normas iconográficas que habían de regir la pintura sevillana consideró que la Virgen "hase de pintar (...) en la flor de la edad, de doce o trece años, hermosísima niña". Murillo siguió las normas del suegro de Velázquez en esta escena , una de las más atractivas de su producción. El rostro adolescente destaca por su belleza y los grandes ojos que dirigen su mirada hacia arriba. La figura muestra una línea ondulante que se remarca con las manos juntas a la altura del pecho pero desplazadas hacia su izquierda. Los querubines que conforman su peana portan los atributos marianos: las azucenas como símbolo de pureza, las rosas de amor, la rama de oliva como símbolo de paz y la palma representando el martirio. Los ángeles aportan mayor dinamismo a la composición, creando una serie de diagonales paralelas con el manto de la Virgen. La sensación atmosférica que Murillo consigue y la rápida pincelada indican la ejecución entre 1660-65, pero debemos indicar que gracias al dibujo la figura no pierde monumentalidad, definiendo claramente los contornos. El colorido vaporoso está tomado de Herrera el Mozo , quien acercó los conocimientos de la pintura flamenca -con Van Dyck y Rubens - y la escuela veneciana a Murillo.Debe su nombre a haber estado registrada en la Casita del Príncipe de El Escorial en 1788, entre los cuadros del príncipe Carlos IV, desde donde pasó a Aranjuez y de allí al Prado en 1819. Durante mucho tiempo se la denominó Inmaculada de la Granja por considerar que procedía de aquel palacio.